Lic. Prof. Yehuda Ribco |
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Bemidbar > Bemidbar 1:1 - 4:20 |
Shabbat: Iyar 26, 5765; 4/5/05
Comentario de la Parashá
Bemidbar En nuestra parashá, leemos la siguiente orden:
En nuestra Tradición (Bemidbar Rabá 3:9) se señala que el censo de los levitas fue efectuado
por Moshé con
asistencia del Eterno. Siendo así, es válido que nos preguntemos: ¿Para qué el Eterno pide que Moshé haga el censo? ¿No era más simple y efectivo que el Todopoderoso informara: 'En total, son tantos y tantos los levitas'; en lugar de estar pidiendo a Moshé que vaya por las moradas de los levitas y los cuente? La respuesta a estas interrogantes es, en cierta manera, la respuesta a la presencia de las personas en Este Mundo. Debemos entender que el Todopoderoso no precisa de
nada, por tanto, ninguna de nuestras acciones Le afectan. Por otra parte, el Eterno podría con su Misericordia infinita
proveer a las personas de todo lo que éstas precisan, sin que nadie tuviera
siquiera que mover un dedo, ni esforzarse en ningún aspecto. La persona es
puesta en Este Mundo con una determinada misión por realizar, y que
solamente ella lo puede hacer. La persona debe estar dispuesta a dar todo de sí para cumplir su parte en la Creación, y puede confiar que el Eterno hará su parte para que pueda aproximarse a su meta. Como está expresado en Pirkei Avot (2:16): "No
está en ti completar la tarea, pero no eres libre para desistir de ella". Nosotros actualmente, como Moshé en aquella oportunidad, no debemos desistir de ninguna mitzvá, incluso si su cumplimiento aparece como por fuera de nuestras actuales posibilidades. Pues, cuanto más labremos y cultivemos en nuestro campo de vida, seguramente más habrá para cosechar en el momento de la recolección de los frutos. ¡Les deseo a usted y los suyos que pasen un Shabbat Shalom UMevoraj! Moré Yehuda Ribco
1- Esto explica el motivo por el cual creer que
la persona obtiene su salvación personal mediante la fe carente de
obras, es una vacía pretensión mitológica en directa contradicción con lo
anunciado por el Eterno. Él quiere que la persona goce de los frutos de su
trabajo personal, de sus acciones, pues Él sabe que nunca el sabor de las
limosnas es tan agradable como el del propio trabajo. -Otras interpretaciones de este pasaje de la Torá, y más estudios los hallan HACIENDO CLIC AQUÍ, AQUÍ y AQUÍ. |
Relatos, anécdotas y enseñanzas El rabino de Módena explicaba así la oración. Con las plegarias es similar. |
Preguntas y datos para meditar y profundizar:
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De la Parashá Bemidbar |
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©2005
Yehuda Ribco,
Montevideo, Uruguay.
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