Judaismo conversion Israel Mashiaj Tora Dios amor paz

 Lic. Prof. Yehuda Ribco // Iyar 3, 5766 - 1/5/06

Presentación | Apoyo | Búsqueda

 Cterapia 

  Sembrar gozo

El problema
Seguramente que en ciertas ocasiones experimentas sentimientos negativos, de tristeza, abandono, confusión, duda, pena, inseguridad, insatisfacción, enojo, celos, arrogancia, inferioridad, culpa etc.
Quizás tienes salud, buena familia, amistades, dinero, de todo lo que satisface muchas de las humanas necesidades, pero igualmente te sientes molesto; como si nada tuviera sentido, como si tu vida estuviera a la deriva, o francamente a pique.
Entonces quizás actúas (con hechos o palabras) en respuesta a esos sentimientos, y como consecuencia de esto, en vez de haber generado una solución para sentirte pleno, te encuentras de pronto con un problema mucho más grave: una deuda impagable, un amigo que no desea verte más, un divorcio, hijos que te repudian, padres ofendidos, hundido en adicciones, sin trabajo, etc.
"Es parte de la vida" te dirás, y continuarás en esa espiral de sentirte incómodo en tu vida, actuar supuestamente para resolver el fracaso que experimentas, para darte cuenta luego que estás peor y sin miras de solución. Y entonces te sientes más molesto con tu vida, y te hundes más en la engañosa solución, y sigues así sucesivamente.

Cuando tu incorrecta valoración de ti mismo es la que decide las sendas de tu vida, estas "bajo un destino" de continuos fracasos e incesante insatisfacción.
Te repito, puedes tener el mejor día de tu vida. Estás con buena salud física, te han dado un aumento de sueldo en el trabajo, ganaste a la lotería, tu esposa confirma su amor hacia ti, pero llueve (por decir algo absurdo y de relativa poca monta)... entonces sientes como si el mundo fuera horrendo, tu vida miserable, nada tuviera razón de ser.
Te preguntas con amargura: ¿Por qué a mí?
Y sientes que la gente es mala y la vida es injusta.

Una luz  de vida
Lo que te he descrito recién es un gran pozo, pero afortunadamente es posible salir de él.
No es simple el ascenso, son muchos los obstáculos, y es más fácil dejarse caer nuevamente en el pozo de la decepción que sostener la lucha por salir a la luz.
Pero recuerda, es posible para ti vivir de otra manera.
Tienes que tener en mente el deseo firme y seguro: "Soy un hijo de Dios, por eso quiero vivir con felicidad, merezco vivir con felicidad, viviré con felicidad".

Raíz y ramas
Es necesario que tomes conciencia de la raíz de tus malestares, pues si podas las ramas pero no atiendes como corresponde a las raíces, el problema sobrevivirá a tus intentos por vencerlo.

Lo cierto es que muchas veces tu te dedicas a trabajar sobre las ramas, y con tu terapeuta y amistades haces un gran esfuerzo para -aparentemente- superarte y dejar de lado tus dificultades. Pero no tocas, ni siquiera te aproximas a alas raíces.
Es que, puede sonar extraño y paradójico, pero la mayoría preferimos que las raíces que nos ocasionan dificultades se mantengan activas, en constante re-producción de angustias y malestares.
¿Cómo puede ser esto?
¿Quién podría querer mantenerse en un estado de perenne dolor?

La respuesta es más simple de lo que parece.
Se obtienen "beneficios secundarios" por estar en situación deplorable.
¿Beneficios como cuáles?

  • Puede que el beneficio sea la simpatía o lástima de los otros, que se relacionan menos agresivamente en vista de nuestras dificultades.

  • Puede que las aflicciones sirvan como excusa para no enfrentar cargas o responsabilidades.

  • Puede que el dolor y sus ramificaciones oculten un problema mucho más profundo (real o imaginario), que se quiere evitar a toda costa.

  • Puede que el malestar sea usado inconscientemente como un método para tratar de expiar un profundo sentimiento de culpa.

  • Puede que sea una manera de mantenernos en una "confortable dependencia", para no asumir que debemos vivir en autonomía relativa, separarnos de nuestros padres y hacer nuestra propia vida.

  • Puede ser que creemos que no tenemos otra forma para recibir la atención de los otros.

Quizás, tú que estás en esta situación, en este momento estás negando todas estas posibilidades, y consideras que lo que te estoy enseñando no tiene lógica.
Pero, si te atreves a ser sincero contigo mismo, ¿no estoy en lo correcto?

Para aprender a desenterrar la raíz de tus dolores, para asumir la imagen que de ti esto da, debes recurrir a una persona entendida y técnicamente capacitada, que te sepa alumbrar y acompañar en tu proceso de  crecimiento.
Y debes aceptar con valentía quien estás siendo, para que puedas llegar a ser la mejor persona que puedes ser.
Mientras te mantengas escondido detrás de excusas, ilusiones, y otras cortinas de humo, difícilmente encontrarás bienestar y felicidad en tu vida.
Debes ver la información que tu maestro en crecimiento te aporta, como una bendición, aunque rompa tus fábulas y te devuelva una imagen pequeña de ti mismo (tal como la que tienes).
Es una verdadera bendición, pues eso significa que tendrás la ocasión de trabajar para curar desde la raíz, sin seguir perdiendo el tiempo detrás de mascaradas y sufrimientos.

Detrás de la cortina
Debes saber que tu yo conciente tiene muy pequeño alcance, en tanto que tu yo inconsciente está en contacto con la mayor parte de lo que tú eres.
Te lo explico con un ejemplo.
El yo conciente podrías verlo como el monitor de tu computadora, en donde tienes presentada la información actual, la que está dibujada en el momento presente.
Puede estar referida a aspectos lejanos en el tiempo o en el espacio, pero es lo que está ahora activo.
Por otra parte, el inconsciente es como lo que está dentro de esa caja misteriosa de tu computadora a la que seguramente conoces como "Torre". Allí se producen infinidad de procesos que son invisibles en el monitor, se conectan y desconectan infinidad de datos por segundo, la memoria del pasado y la actual se activan miles de veces por minuto, diversos elementos se interrelacionan para finalmente presentar (a veces) una minúscula porción de información en tu monitor.
Es parte del ser humano que ambos elementos funcionen, cada cual a su manera y con sus respetivos procesos.
La persona más intelectual y fría en los afectos, que pareciera ser puro monitor, realmente también tiene una Torra en funcionamiento, que finalmente podría ser la que controla lo que está aconteciendo en su vida.
Por esto no es sorprendente que grandes intelectuales, que con su mente penetran misterios de la naturaleza como si fueran claros como el día, en su vida personal sufren inconsolablemente.
Si entendemos esto, y aprendemos a descubrir los procesos inconscientes a partir de lo que se presenta fugazmente en nuestro monitor, estaremos capacitados para teclear los datos correctos que produzcan un proceso positivo, que nos aproxime al placer y nos aparte de malestares emocionales.

Cuanto menos datos distingas en tu monitor, menos capacitado estarás para vivir en bienestar.
Atención, no estoy hablando de un déficit en tu coeficiente intelectual, puedes ser una persona intelectualmente brillante, sino que me refiero a la ceguera producida emocionalmente, que te incapacita para reconocer los datos, o que te momifica en ciertos aspectos, sin darte dinamismo y flexibilidad.

Te daré un ejemplo, para que se entienda mejor.
Imagina una brillante ingeniera, estudiosa y con gran capacidad de análisis y de toma de decisiones técnicas acertadas.
Pero, que su vida de pareja es un continuo padecimiento.
Pareciera como si tuviera marcado un destino de parejas agresivas, que la destratan, que la hacen sentir inferior, que no gozan con su presencia y viceversa.
Ella, la gran ingeniera, no se da cuenta de esto, y vive en la ilusa nube de mantener relaciones de noviazgo perfectas, idílicas. Se enoja con sus amigas que le quieren mostrar las cosas desde otra perspectiva, deja de hablar con su madre que le dice lo que piensa de su novio. Se cree la mujer más feliz, en lo romántico, pero no sabe porque al mismo tiempo siente soledad, abandono, tristeza, temores.
En su monitor los datos ingenieriles se visualizan con gran precisión y efectividad, pero el conjunto de datos emocionales quedan encuadrados en una zona borrosa u oscura.
No se ven datos, no se encuentra información al respecto. Se están en un blanco o vacío, que en realidad está lleno de información no visible por ella.
Por lo tanto, o se mantiene en la ignorancia al respecto de lo que no percibe, o se rellena "el vacío" con ficción, con residuos o datos incorrectos que provienen de la Torre.
Con el paso del tiempo, suele suceder que la zona de datos confusos va creciendo, cada vez el monitor brinda menos información efectiva. El desagrado interno crece, no existe tranquilidad para la angustia. La falsedad con que se cubre el vacío existencial es cada vez mayor.
Entonces, se puede tratar de dar excusas y mantener una fachada de efectividad resguardada.
O se harán esfuerzos intensos para que los otros no reconozcan esa confusión.
Finalmente, si no se ha procedido a una terapia correctiva, la persona termina en un pozo de desolación. O el novio abusivo la abandona definitivamente y ella confirma en los hechos su soledad. O ella se aferra como puede a esa relación tóxica, lucha contra viento y marea para aparentar que vive el mejor de las relaciones sentimentales, mientras el resto de su vida se hunde más y más.

¿Qué llevó a la ingeniera de la anécdota a esta situación?
Los motivos puede ser variados, y es imprescindible que un experto investigue y acompañe a la persona en el camino del descubrimiento de su ser, de las raíces de sus problemas y entonces recién hacia la luz de la vida.
Que el costo económico de la terapia no sea excusa para no emprenderla, pues cada centavo es de verdadera bendición.
Que los padecimientos que se sufran por ir descubriendo la falsedad en la que se estaba viviendo no sirvan de escapatoria para dejar el esfuerzo por quebrar la esclavitud emocional.
Que el tiempo que insuma el proceso de liberación no sea óbice para perpetuarse en el dolor, el desamparo, el auto-engaño, el vacío.
Recuerda, si eres tú el que está en esta situación, es tu vida la que está en juego y aunque no lo creas, tu vida es sumamente valiosa y merece todo el bien y gozo que el Eterno ha dispuesto para ella.
Mientras continúes con subterfugios y evasivas, mantendrás tu destino de fracaso y cada vez más pesadumbre y dolor.

La Divina Presencia
Recuerda a Dios.
Encomiéndate a Él para obtener tu liberación y gozo.
Pero también ten presente que si Él te ha dado existencia, es porque te tiene en cuenta.
Eres especial para Él.
Te conoce.
Te ama.
Desea solamente lo mejor para ti.
Él a diario tiene confianza en ti, por eso te retorna la vida, día tras día, y espera en Su confianza hacia ti, que puedas por fin crecer hasta alcanzar el mejor nivel de tu existencia. Él espera que tú seas feliz, que goces, que alcances tu plenitud.
Él está de tu lado.
Es tu sombra a tu mano derecha.
Por tanto, debes saber que cuentas con el más grande de los aliados.
Y debes entender que Él te creó para que goces, y de esa manera tengas la experiencia del gozo para cuando te llegue el momento de vivir en la Eternidad.
Si no gozas en Este Mundo, tampoco tendrás experiencia del gozo en el Mundo Venidero, y por tanto no podrás aprovechar todo el Bien que allí está reservado para ti.
Aprender a liberarte en Este Mundo, es gozar Aquí y sembrar para gozar Allá.
Que el conocimiento de esto no se convierta en otro motivo para sentirte culpable, sino todo lo contrario. Que te sirva para entender que el tiempo está corriendo y cada instante de dolor es un desperdicio. Desecha la culpa, que es un sentimiento mentiroso. Si dejas de dar evasivas y te concentras en los hechos, si alcanzas a descubrir la raíz de tus padecimientos y te enfrentas sin huidas, entonces estarás aprendiendo a gozar y estarás adquiriendo una nueva identidad, que está dentro de tu ser lista para emerger.

El Eterno ha dado la Torá como medio para alcanzar el verdadero bienestar y la verdadera felicidad.
A través de sus consejos y mandamientos la persona encamina su vida por senderos de Vida.
La felicidad no se encuentra en éxtasis momentáneos, o en lo que la moda publicita como solución.
La clave para la felicidad se halla en el mensaje de la Torá, en el cumplimiento de los mandamientos que el Eterno te ha encomendado a ti que cumplas.

Él te ha creado, y Él ha creado el bienestar.
En medio de ambos ha creado el nexo: el estilo de vida acorde con los mandamientos.
¿Por qué desechar el método que el Creador ha dispuesto para encontrar la verdadera felicidad?

Cuando llenas tu vida desde Arriba, con Torá y cumplimiento de los mandamientos, entonces de a poco vas adquiriendo una nueva perspectiva y descubres una energía que va llenando todo tu ser.

La felicidad y el bienestar están a tu espera.
Tu método hasta ahora no te ha resultado.
¿Por qué no darle una oportunidad a otro método, a uno probado e iluminado desde lo alto?

 

Moré Yehuda Ribco
E-mail: comentario@serjudio.com

Haga clic aquí para saber cómo colaborar con nosotros... GRACIAS!

 


"La persona generosa será prosperada, y el que sacia a otros también será saciado."
(Mishlei / Proverbios 11:25)

 


Página principal | Arriba | Reglas para los e-mail