Shalom.
Apreciado señor.
No sé basado en qué califica al pueblo judío como nación poderosa, cuando no
alcanzamos más que quince millones de personas dispersos por el mundo,
rodeados de naciones fuertes y multitudinarias, que no siempre nos son
amistosas. Y para mejor, la mayor parte de estos 15.000.000 consiguen su
sustento diario con dificultades y duros trabajos, similarmente al resto de
los pobladores de esta tierra.
¿Nación poderosa los judíos?
En la fantasía de algunos quizás, de aquellos que no saben bien de qué
hablan cuando hablan de "los judíos", pero que no es una verdad en
los hechos.
Yo diría que es una nación escasa y oprimida (abierta o solapadamente), un
poco menos sufrida que en el pasado, pero tan amargamente sometida como
entonces.
No sé en qué se fundamenta para valorar al
Estado de Israel con sus ciudadanos (que los hay judíos y otros que no lo
son) como poderoso.
El Estado de Israel es un pequeño territorio, apenas una mota en los mapas,
de no mas de 5 millones de habitantes rodeado de más 300 millones de árabes
poseedores de la mayor parte de las tierras que van desde la China hasta la
frontera itálica, y desde el extremo norte de Rusia hasta el extremo austral
africano.
¿El
Estado de Israel poderoso entre sus vecinos (la mayoría de los cuales le
son) totalmente hostiles y poseedores de las fortunas provenientes del
petróleo?
En la mitología moderna quizás es un país poderoso, pero no es una realidad
en los hechos.
Yo diría que el Estado de Israel es una minúscula nación que lucha por
subsistir con democracia, tolerancia, dignidad y principios éticos entre los
gigantes que la rodean y oprimen.
(Si ve una manchita de color celeste entre el océano de
países árabes (¡y no están todos en este mapa!), entonces está viendo al
poderoso Israel en el mapa).
En cuanto a la práctica del amor que usted
menciona, ésta se lleva a cabo con la participación de al menos dos que se
estimulan positivamente uno al otro.
Varios gobiernos de Israel han ofrecido en numerosas ocasiones paz por paz,
seguridad por seguridad, cooperación por cooperación, es decir, prácticas de
amor en su nivel más primario.
PERO, la invariable respuesta de los líderes de los intrusos (que se hacen
llamar) palestinos, fue de responder al amor con agresión, a las propuestas
de tranquilidad con terrorismo y extorsiones y amenazas.
El derecho a vivir es un mandato divino, del
mismo grado que el derecho a dejar vivir al inocente.
Nadie, en su sano juicio, permitiría dejar violentar su vida y la de sus
queridos a manos de un agresor taimado y obcecado, como son los (así
llamados) palestinos que prefieren la miseria, destrucción, enfermedad e
incluso muerte propia y de sus hijos si con eso asesinan (material o
espiritualmente) a sus enemigos.
Si los asesinos entre los (así llamados) palestinos no comprenden lo qué es
vivir como humanos entre otros humanos, y llevan a la ruina a sus congéneres
(de su credo o no), ¿no es cuestión de dedicarse a ver cuál es el problema
de ellos en lugar de acusar a las víctimas (los israelíes, y los inocentes
entre los así llamados palestinos?
Israel quiere vivir y dejar vivir, eso lo demuestra con hechos.
Y para continuar con vida, y ayudando a los que sufren, el Estado de Israel
debe combatir el fuego con más fuego; pues, cuando quiso hacer el papel de
bombero, la única respuesta fue la mayor agresividad desde el otro lado que
supusieron que las propuestas de paz eran una muestra de debilidad y ocasión
para vencer por medio de derramar la sangre del odiado judío.
Así que, ¿por qué le pide explicaciones a los judíos, que sólo se defienden
para no ser víctima de la atrocidad de los asesinos fanáticos
(fundamentalistas sin fundamentos, ni éticos, ni religiosos, ni históricos)?
¿Ha mandado sus emails pidiendo la paz con el Estado de Israel a miembros de
cada una de las 22 inmensas (en su conjunto) naciones árabes que rodean a
Israel?
Para finalizar, no sé porqué al pueblo judío
sólo se le admira, por parte
de algunos gentiles, cuando muere o es humillado, y no cuando intenta vivir
y salir adelante con dignidad, a pesar de los grandes escollos.
¿Acaso porque en la mente de algunos sólo se tolera al judío mancillado y
débil, pero no al que es capaz de erguirse sobre sus piernas para enfrentar
a los Goliat que lo aterrorizan a diario?
Que se admire a alguno por su debilidad o pobreza no es precisamente un
elogio, ni para el admirado y mucho menos para el que así cree
admirar.
Es mejor admirar a Israel y a los judíos por lo que es admirable en ellos:
su deseo de vivir y de contribuir al bienestar del mundo, a partir de claros
valores morales y espirituales, entre los que se cuenta no amilanarse ante
el esfuerzo por hacer jardines de desiertos, y de creer que la paz con el
enemigo es posible.
En resumen: se pueden tranzar relaciones
positivos solamente con aquel que así lo desea, pero mientras a las
flores de Israel se las retribuya con bombas, ¿cómo no esperar la justa
y penosa compensación, que hace notar que a la paz se la debe contestar
solamente con paz?
Mire qué coincidencia con lo que hemos leído
por estos días en la Torá:
"Itzjac [Isaac] sembró en aquella tierra,
y aquel año obtuvo ciento por uno. El Eterno lo bendijo,
(13) y el hombre se enriqueció y continuó enriqueciéndose hasta llegar a
ser muy rico.
(14) Tenía rebaños de ovejas, hatos de vacas y abundancia de siervos, de
modo que los filisteos le tenían envidia.
(15) Los filisteos cegaron y llenaron de tierra todos los pozos que habían
abierto los siervos de su padre Avraham [Abraham], en sus días.
(16) Entonces Abimelec dijo a Itzjac [Isaac]: –Aléjate de nosotros, porque
te has hecho más poderoso que nosotros.
(17) Itzjac [Isaac] se fue de allí, asentó sus tiendas junto al arroyo de
Gerar y habitó allí.
(18) Itzjac [Isaac] volvió a abrir los pozos de agua que habían abierto en
los días de Avraham [Abraham] su padre y que los filisteos habían cegado
después de la muerte de Avraham [Abraham]. Y él los llamó con los mismos
nombres con que su padre los había llamado.
(19) Después los siervos de Itzjac [Isaac] cavaron en el valle y
descubrieron un pozo de aguas vivas.
(20) Y los pastores de Gerar contendieron con los pastores de Itzjac
[Isaac], diciendo: –El agua es nuestra. Por eso llamó al pozo Esec, porque
allí riñeron con él.
(21) Abrieron otro pozo, y también contendieron por él. Y llamó su nombre
Sitna.
(22) Se alejó de allí y abrió otro pozo, y no contendieron por él. Él
llamó su nombre Rejobot diciendo: –Porque ahora el Eterno nos ha hecho
ensanchar, y seremos fecundos en la tierra.
(23) De allí fue a Beerseba.
(24) Y aquella noche se le apareció el Eterno y le dijo: –Yo soy el Elokim
de tu padre Avraham [Abraham]; no temas, porque Yo estoy contigo. Yo te
bendeciré y multiplicaré tu descendencia por amor de Mi siervo Avraham
[Abraham].
(25) Él edificó allí un altar, invocó el nombre del Eterno e instaló allí
su tienda. También allí los siervos de Itzjac [Isaac] excavaron un pozo.
(26) Entonces fue a él Abimelec, desde Gerar, acompañado por Ajuzat, amigo
suyo, y Ficol, jefe de su ejército.
(27) E Itzjac [Isaac] les dijo: –¿Por qué venís a mí, vosotros que me
habéis aborrecido y me habéis echado de en medio de vosotros?
(28) Ellos respondieron: –Claramente hemos visto que el Eterno está
contigo y dijimos: ''Por favor, haya un juramento solemne entre nosotros,
entre tú y nosotros.'' Hagamos una alianza contigo
(29) de que no nos harás daño, como nosotros no te hemos tocado y como
sólo te hemos hecho bien y te despedimos en paz. Tú eres ahora bendito del
Eterno.
(30) Entonces él les hizo un banquete, y comieron y bebieron.
(31) Después se levantaron temprano, e hicieron juramento el uno al otro.
Luego Itzjac [Isaac] los despidió, y ellos se alejaron de él en paz."
(Bereshit / Génesis 26:12-31)
Quiera el Eterno que entre los árabes surjan
líderes que sepan retribuir la paz ofrecida con paz verdadera, así pronto la
paz no será una mera palabra bastardeada por algunos que la desprecian.
Si este texto le ha sido de provecho, no
olvide que este sitio se mantiene gracias a SU colaboración
económica. No cierre su mano, y abra su corazón bondadoso.
Iebarejejá H' - Dios te bendiga,
y que
sepamos construir Shalom
Yehuda Ribco |