Shalom,
gracias por escribirme.
1- Es una muy buena pregunta.
La respuesta se halla en deshilar finamente el idioma.
Representación, entre otras
acepciones es:
-
"Figura, imagen o idea que
sustituye a la realidad."
-
"Conjunto de personas que
representan a una entidad, colectividad o corporación."
No existe una
representación de Dios de acuerdo a la primera acepción dada, pues nada
ni nadie se le asemeja en Su esencia indescriptible (Ieshaiá
/ Isaías 44:7).
Por lo cual, aquel que busca a Dios a través de representaciones,
tales como imágenes, ídolos, falsas deidades, etc., está falseando la
realidad del Eterno, y trayendo mentira a su propia existencia y la de sus
vecinos.
Por esto, Dios explícitamente ordenó:
"'No tendrás dioses
ajenos delante de Mí.
'No te harás escultura, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el
cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
No te inclinarás ante ellas ni les rendirás culto,"
(Shemot / Éxodo 20:3-5)
Pero,
sí existen representantes de Dios, de acuerdo a la segunda
acepción recién presentada.
Esos representantes son los judíos, pues son la nación que Él ha escogido
como Sus testigos perpetuos, tal como anunció el profeta de la Verdad:
"Vosotros sois Mis testigos, dice el
Eterno,
y Mi siervo que escogí,
para que Me conozcáis y Me creáis,
y entendáis que Yo soy,
antes de Mí no fue formado dios, ni lo será después."
(Ieshaiá / Isaías 43:10)
¿Por qué el testigo del Eterno es Su
representante?
Para responder, debemos saber que la función del testigo es dar testimonio
de lo sabido.
La única manera cierta y verídica para testimoniar Su existencia
(con Su amor e interés por nosotros),
es cumpliendo con fidelidad lo que Él ha ordenado,
Sus mandamientos,
tal como está declarado:
"'En el futuro, cuando tu hijo te pregunte
diciendo: '¿Qué significan los testimonios, las leyes y los decretos que el
Eterno nuestro Elokim os mandó?',
entonces responderás a tu hijo: 'Nosotros éramos esclavos del faraón en
Egipto, pero el Eterno nos sacó de Egipto con mano poderosa.
El Eterno hizo en Egipto señales y grandes prodigios contra el faraón y
contra toda su familia, ante nuestros propios ojos.
Él nos sacó de allá para traernos y darnos la tierra que juró a nuestros
padres.
Y el Eterno nos mandó que pusiéramos por obra todas estas leyes y que
temiésemos al Eterno nuestro Elokim, para que nos fuera bien todos los días
y para conservarnos la vida, como en el día de hoy.
Y será para nosotros justicia, si tenemos cuidado de poner por obra todos
estos mandamientos delante del Eterno nuestro Elokim, como Él nos ha
mandado."
(Devarim / Deuteronomio 6:20-25)
Le ruego que lea y relea este párrafo de la
Torá y podrá hallar cómo el cumplimiento de mandamientos ES el testimonio
que la nación judía da acerca de la presencia de Dios.
Ahora bien,
entre la nación que Lo representa, hay un núcleo que Lo representa con mayor
fidelidad.
Entre éstos, los que más preponderancia tienen son los
maestros y rabinos (en épocas antiguas, los sacerdotes y
levitas eran los que se dedicaban especialmente a ocupar estos roles)
pues son aquellos que se dedican con todo su ser a servir al Eterno, a
representarLo frente al resto de los mortales.
Tal como leemos:
"Porque los labios del
sacerdote han de guardar el conocimiento, y de su boca han de buscar la
Torá, pues él es un mensajero del Eterno de los Ejércitos."
(Malaji / Malaquías 2:7)
¿Cuál es el trabajo del
mensajero?
Llevar un mensaje... ser el representante de otro, en este caso de Otro.
Así pues,
el judío que cumple con fidelidad con los mandamientos,
está en representación DE Dios,
y no como representado/sustituyendo A Dios.
En resumen,
el mandamiento para los gentiles: "No maldecir/despreciar a Dios",
incluye también el no maldecir ni despreciar ni repudiar a Sus
representantes (que ya dijimos quienes son),
en correspondencia directa con el mandamiento que Dios dictó a Israel:
"No maldecirás a los jueces, ni hablarás
mal del gobernante de tu pueblo."
(Shemot / Éxodo 22:27)
Pues aquel que desprecia al representante,
está despreciando al que es representado...
2- No entiendo bien su comentario/consulta.
Según lo que me parece entender de su misiva,
usted me está diciendo que no existe un mandamiento para los gentiles que
sea: "no mantener relaciones sexuales ilegítimas".
Como única respuesta posible, si es que ésta es la consulta,
le enumeraré
los siete
mandamientos para las naciones:
-
No tener/adorar dioses ajenos.
-
No maldecir a Dios.
-
No asesinar.
-
No robar.
-
No mantener relaciones sexuales ilícitas
(adulterio, básicamente en principio).
-
No comer partes de un animal que está vivo.
-
Promover a que en su sociedad haya leyes y
tribunales justos.
Quedo a sus órdenes.
Que el Uno y Único Dios bendiga a quienes le
son fieles servidores,
y que
sepamos construir Shalom, Iebarejejá He.
Yehuda Ribco
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