Un
vistazo a la Parashá Tetzavé
Ubicación:
Tetzavé ("Ordenarás") es la octava parashá del
segundo tomo de la Torá, el
sefer Shemot, conocido en español como "Éxodo".
Temática:
-
Aarón y sus descendientes escogidos como
cohanim -sacerdotes
Aarón y sus hijos, Nadav, Avihu, Elazar e Itamar fueron escogidos por el
Eterno para que Lo sirvieran como sus sacerdotes y representantes. Una de
sus funciones era mantener las luces de la Menorá encendidas continuamente
en el Santuario (el óleo era provisto por los
comunes del pueblo). Mientras oficiaban en el Santuario, los
cohanim debían vestir unas ropas especiales, que habían sido ordenadas
por el Eterno.
Aarón, en su rol de Cohén Gadol -sumo sacerdote- tenía vestimentas
particulares.
-
Aarón y sus descendientes confirmados como
cohanim
La selección de los cohanim fue confirmada por varios actos
simbólicos: Aarón fue presentado con una toga por Moshé y fue ungido con
óleo especial; los otros cohanim fueron investidos; varios
sacrificios fueron traídos al Santuario, los cohanim pusieron sus
manos en ellos, fueron mecidos delante del Altar y finalmente fueron asados,
para simbolizar el derecho de los hijos de Aarón para ofrecer sacrificios.
Estos actos rituales/simbólicos fueron repetidos durante siete días.
-
Deberes de los cohanim
Entre otras cosas, fueron ordenados para traer una ofrenda ígnea diaria de
un cordero añal, tanto a la mañana como al atardecer, en favor del pueblo de
Israel.
Para destacar:
Al servicio del Eterno
todo el tiempo
En "Manantiales de la Torá", del Rav Alexander Zusia Friedman, nos enseña:
"Ofrecerás uno de los
corderos al amanecer, y el otro cordero lo ofrecerás al atardecer."
(Shemot / Éxodo 29:39)
Debemos esforzarnos para servir al Eterno en la mañana así como al
atardecer, en la juventud así como en la senectud. En la juventud, el cuerpo
es saludable y fuerte y el hombre está en plena posesión de su vigor y
energía. Empero, sus facultades mentales aún no están totalmente maduras. En
la edad adulta, sus facultades mentales están maduras totalmente, pero su
fuerza física ha declinado. Por consiguiente, el sacrificio matinal debe
hacer recordar al hombre la Soberanía celestial cuando el sol de su propio
vida está en ascenso, y no se debe permitirse extraviarse. El sacrificio que
el hombre es requerido de ofrecer al anochecer debe enseñarle que incluso
cuando el sol de su vida está por ponerse, él no debe dejar de esforzarse,
sino que debe reunir nueva potencia para servir al Eterno.
El meil
-saco- y lashón hará -murmuraciones-
En "Aprender y enseñar", el Rav Mordejai Katz, nos enseña:
"Harás la túnica..."
(Shemot / Éxodo 28:31)
Entre las ropas usadas por el sumo sacerdote, estaba el meil. Éste
era vestido como expiación por los pecados relativos al lashón hará
(palabras desdeñosas), que está simbolizado por lo siguiente: (a) su color
(azul cielo) es un recuerdo de que las palabras suben al Cielo, y por ello
debemos ser cuidadosos con lo que decimos; (b) su escote era ajustado,
aunque nunca desgarrado, para recordar ajustar nuestras bocas cuando
sentimos el deseo de hablar lashón hará; y (c) las campanas (campanas
de oro que hacen ruido, y campanas de tela que eran silenciosas) colgaban
desde abajo, indicando que hay tiempos que debemos hablar y otros que
debemos mantener el silencio.
¡Les deseo Shabbat Shalom UMevoraj!
Moré Yehuda Ribco
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