Un
vistazo a la Parashá Tzav:
Ubicación:
Tzav ("Ordena") es la
segunda del tercer tomo de la Torá, el
sefer Vaikrá, conocido en español como "Levítico".
Temáticas:
Esta parashá se mantiene en la temáticas de la parashá pasada, Vaikrá:
-
Trata esencialmente de alguno de los
korbanot (ofrendas, sacrificios) que se
presentaban en el Mishkán (Tabernáculo, o Santuario
portátil), y posteriormente en el Beit HaMikdash
(Templo). Se enuncia también el tratamiento que había que dar a las
cenizas del altar mayor, así como la orden de mantener encendido
constantemente el fuego en el altar.
-
Educa para aplicarse con seriedad en todo lo
referente a pureza y santidad.
-
Resalta la función primordial de los cohanim
(perpetuos sacerdotes de la estirpe sanguínea de Aarón hijo
de Amrám), como los guías para que por medio del servicio a Dios, sus hermanos israelitas llevaran una vida de pureza y santidad, a la Luz de
la Torá.
-
Destaca la ceremonia en la cual fueron
investidos los sacerdotes para sus sacras funciones en el Santuario. De este
modo se procedió a la inauguración funcional del Santuario.
Para destacar:
-
Como mencionamos un poco más arriba, la
parashá procura dar pautas de conducta que lleven a una vida de santidad y
pureza.
Para lograrlo, no se exige que la persona se torture, prive de placeres o
viva una vida desolada y ermitaña.
Por el contrario, la Torá desea que la persona goce tanto física como
espiritualmente, dentro de los límites que le permiten gozar y crecer
integralmente al mismo tiempo.
Así pues, muchos de los preceptos educadores del carácter, tienen directa
relación con alimentos y acciones cotidianas, que pasan a estar prohibidos o
permitidos por la Torá. Antes de comer algo, o de actuar irreflexivamente,
lo que la persona debe hacer, es tamizar sus acciones con el filtro de la
inteligencia en correspondencia con la normativa, en lugar de actuarlos de
forma rutinaria.
-
Entre las normativas relativas a los
sacrificios, Dios introdujo el precepto de devolver lo que se halló y que
está perdido, y especialmente se señala la obligación de devolver lo que ha
sido robado.
¿Por qué está intromisión que parece resultar tan extraña a la temática
general de la parashá?
La respuesta que han dado los Sabios es la siguiente:
que el ladrón no piense que robará y luego ofrecerá un sacrificio pidiendo
perdón, y con eso estará libre de culpas por su mala acción.
El perdón se obtiene solamente cuando se basa en el arrepentimiento sincero,
que equivale a restituir lo que ha sido dañado y comprometerse a no actuar
más de forma perjudicial.
¡Les deseo Shabbat Shalom UMevoraj!
Moré Yehuda Ribco
|
Preguntas y datos para meditar y profundizar:
-
¿Cuáles son los pasos que Maimónides describe
para la teshuvá, el arrepentimiento auténtico?
-
La haftará termina diciendo:
-
"Así ha dicho el Eterno:
'No se alabe el sabio en su sabiduría,
ni se alabe el valiente en su valentía,
ni se alabe el rico en sus riquezas.
Más bien,
alábese en esto el que se alabe:
en entenderme y conocerme que Yo soy el Eterno,
que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra.
Porque estas cosas Me agradan, dice el Eterno."
(Irmiá / Jeremías 8:23-24)
Explicar el exacto sentido de esta clarísima
afirmación de parte de Dios.
|
©2004
Yehuda Ribco,
Montevideo, Uruguay.
Todos los derechos son propiedad de sus autores.
___Queda
terminantemente prohibido el uso de estos textos para fines de idolatría:
falsos-judíos mesiánicos abstenerse de utilizar la información para
embaucar___ |