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BeShem H' El Olam

Respuestas a Preguntas

Caminante, SÍ HAY camino, lo que HACES es TU andar

Consultas recibidas

"Tambien otra pregunta que queria hacerle es: ¿Por que le llamamos Judaismo o Judeaismo (termino puesto por gentiles) y no Derej HaShem, como originalmente fue?"

"...todo ha venido a convertirse en religion de hombre. Por lo cual le comentaba porque no Derej H', porque no llamarnos hebreos y si judios Porque la separacion que esta ocurriendo en Eretz Yisrael de los ashkenazim de los Sefardim?????? Creo que donde el hombre pone la mano, no hay perfeccion. Creo que hay veces que imponemos nuestras opiniones y costumbres y violamos los mandamientos de H'."

Respuesta

Comienzo esta respuesta con mi versión del poeta Machado que usé por título:
Caminante, SÍ HAY camino, lo que HACES es TU andar.

Le pido que considere estas palabras unos instantes. Reflexione sobre las mismas. Luego, relea sus interrogantes. Y entonces, le aconsejo que continúe con la lectura de esta respuesta.

Vayamos primero al tema sencillo.
Le confieso que jamás escuché antes la palabra judeaismo, ni lo registran mis diccionarios. En cuanto a Judaísmo, y en una demasiado breve definición, podemos considerar que se llama así porque es:

 lo que distingue a los judíos, (los que en su origen (territorial) provienen de Judea (quizás por eso el término que Ud. menciona de judea-ismo), así como los descendientes (materiales y/o legales) de los patriarcas hebreos,) de los que no lo son.

No todo lo que es parte integral y correcta del judaísmo es Derej H' (Camino de Dios), hay cosas que no están ni mencionadas en la Torá, el Tana"j, el Talmud o en ninguna otra fuente válida, pero que en la actualidad es parte aceptada del judaísmo.
Le daré un ejemplo tonto: el guefiltefish, las bolitas de pescado que es costumbre entre los ashkenazim comer en shabbat o en otras festividades. ¿Acaso es orden de la Torá? ¿Es halajá? ¿Uno es más o menos judío si come guefiltefish (o lo que sea su contrapartida en otras comunidades judías)? Seguramente que H' no se preocupa si Ud. come guefiltefish, y obviamente no es parte de lo que Él dictamina, y sin embargo es parte del judaísmo.
Otro ejemplo tonto es el Maguen David o Tzion o Estrella de David.
En la actualidad es incluso símbolo de judaísmo, cuando a todos los efectos tiene muy pocos siglos entre nuestro pueblo y ninguna base tanájica o talmúdica.

Como verá pues, judaísmo y caminos de Dios son término que denotan cosas distintas, una (caminos de Dios) está contenida en la otra, pero no son completamente idénticas.
Y realmente no sé si alguna vez fueron lo mismo. Ud. dice que en su origen el judaísmo se llamaba Derej HaShem, me gustaría, nuevamente le pido, que me cite sus fuentes para que yo pueda corroborar, investigar y aprender; pues por más que busco por mi parte, nada de eso encuentro...

Así pues, dentro del judaísmo, y como parte medular, están las ordenanzas de Dios dictadas en Su Torá, sostenidas y alegadas por los profetas verdaderos, explicadas y protegidas del asedio de la ignorancia y la maldad por nuestros sabios de todos los tiempos, y vivificadas por el pueblo judío (o hebreo o de Israel, pues actualmente son sinónimos) a lo largo de las generaciones.
Pero también forman al judaísmo otros innumerables elementos.

Y una fundamental observación: no todo lo que los judíos hacen es judaísmo. Desgraciadamente muchos judíos desconcen o no hacen lo que el judaísmo indica.
Una cosa es vivir como los judíos y otra (a veces muy distinta) vivir como judío.
El ideal es que "vivir como los judíos" y "como judío" sea lo mismo, es decir, que los caminos individuales de cada judío fueran por la senda propia del judaísmo; pero, como le dije, lamentablemente ese ideal (en muchos casos) es bastante diferente a la realidad...

Pasemos al tema de sus críticas observaciones acerca de los quehaceres humanos.
Que el hombre haga SU propio camino es lo que la Torá ordena, en tanto no se aparte del camino de EL. (Luego podrá leer Ud. algunos versículos intercalados en este texto).

Uno de los proverbios del sabio Salomón dice: "Enseña al niño según SU camino, porque cuando envejezca no se apartará del mismo". (22:6)

¿Por que dice SU camino y no el camino de EL?

Porque la Torá está dada para ser vivida por ser humanos reales, con sus problemas y conflictos. Idas y vueltas. Virtudes y defectos. Bondades y maldades.

Vivir la vida real (la de todos los días, la de la calle, la corriente, la cotidiana...) de acuerdo a los principios del judaísmo, es vivir como judío.

Vivir como judío, es hacer lo que Dios manda como mejor uno pueda, en cada circunstancia, de acuerdo a las propias posiblidades (pero siempre intentando acercarse a lo que Él manda (y la idea básica acá es "intentando acercarse")). 
Una pista al respecto la obtenemos en la pregunta jobiana (Iyo. 31:4) "¿Acaso no ve Él mis caminos y cuenta todos mis pasos?" - (Lea también Tehilim 139)

El ser judío está en andar por el camino de Dios con los propios medios (pies, piernas, codos, rodillas, de panza, etc. ¡como pueda!), ayudado (o contrariado) por otros judíos, pues nadie puede existir en soledad y a la vez llevando una vida tal como Dios manda.

En parte es por eso importante para el judío vivir en comunidad con otros judíos.

Y como Dios nos dió libertad y entendimiento y sentimientos e ignorancia y deseos y pulsiones, cuando el hombre entra en relación con otros, surgen los conflictos, disputas, dudas, etc.
Para lograr el acuerdo entre hombres se precisa el diálogo, y la apertura, pero buscando lo que es cierto, no lo que es comodidad o preferencia, porque si no, no hay acuerdo, sólo alianzas, arreglos, beneficios, usuras, etc.

Así que si en Israel hay disputas internas, o desavenencias de todo tipo, incluso en el área de creencias, ¿cuál es la novedad? 
Hace miles de años ya ocurría, y sigue ocurriendo, por ser parte de la naturaleza humana. Errar y la posiblidad de enmendarse son las características que nos hacen más grandes que las entidades espirituales. Andar errados por el camino de Dios, y pervertirnos (esto en latín es: desviar el camino) es parte de vivir. Y atención, no son estas palabras de que sea algo correcto o bueno, sino, para constatar nuestra debilidad y carencias. Pero también, el optimísmo por la posiblidad del mejoramiento. Veamos qué nos dice el profeta: "''Sin embargo, la casa de Israel dice: 'No es correcto el camino del Señor.' ¿Acaso Mis caminos son incorrectos, oh casa de Israel? ¿No son, más bien, vuestros caminos los incorrectos?  Por tanto, Yo os juzgaré a cada uno según sus caminos, oh casa de Israel, dice el Señor Hashem. Arrepentíos y volved de todas vuestras transgresiones, para que la iniquidad no os sea causa de tropiezo."(Iej. 18:29,30)

Si hay gente que manifestándose religiosa quiere superar a los demás, a pesar de no tener méritos verdaderos, ¿cuál es la novedad? (Lea Iesahiá 58, y verá que al menos 400 años antes de la Común Era los profetas verdaderos del Eterno ya denunciaban estos hechos).

Que haya algunos engreídos que se enseñorean sobre los más humildes, ¿cuál es la novedad? (¿Hace cuánto fue dicho en (Mis. 21:2) "Todo camino del hombre es recto ante sus ojos, pero Hashem es el que examina los corazones."?)

Que entre los hombres exista la imperfeccion, ¿cuál es la novedad?

Esas imperfecciones, gracias a Dios, son parte de la naturaleza humana.
Eso es ser hombre.
De esta forma, con Sabiduría Dios nos crea.
Y para componer o perfeccionar lo imperfecto es que estamos acá, especialmente (pero no exclusivamente) los judíos. (Éste es uno de los razonables motivos del Berit Milá (circuncisión) según Rabí Akiva, el perfeccionar el cuerpo en señal del requerido perfeccionamiento integral).

Aprendamos algo acerca de los mecanismos humanos del perfeccionamiento.
Existen dos modos de disputar según la intención:
1- intención  pura y generosa. Por ejemplo, entre los jajamim exitieron muchas controversias, muy fuertes algunas, sin embargo todas eran con la finalidad de encontrar la verdad y sólo para eso; y por eso es que son todas dignas y santificadas y correctas incluso en la desavenencia.
2- intención  egoísta. Estas son las rencillas que no buscan la verdad, su finalidad es el predominio y la destrucción (o el poderío, o el mal, etc.) y por lo tanto su fin es la destrucción.

El proverbio ya lo enseña: (Mis. 10:29) "Hashem es la fortaleza del íntegro de camino, pero es espanto para los que obran maldad."

En gran parte, por el mérito a su modo íntegro y fuerte de discutir la Realidad, es que las decisiones de los jajamim son aceptadas como ciertas y válidas.
Es cierto sus asertos, porque ellos buscaron la Verdad por encima de sus preferencias o comodidades o deseos egoístas y  personales. (Existen otras razones pero no es el tema de la pregunta).

Cuando existían engreídos entre los jajamim (o entre gente que no era sabia pero que pretendían ser como ellos, o contra ellos), los mismos jajamim se encargaban de bajarlos del estrado. Una de las características principales de los sabios (en la definición judía) no es cuánto sabe, sino, cuánto puede llegar a conocer de otras personas; que tan abierto, receptivo y humilde es ante los otros. 

Cuando los jajamim (o el pueblo) se equivocaban, los mismos jajamim arreglaban el equívoco, o hacían el esfuerzo por enmender el daño. El mito de la inefabilidad humana no es precisamente judío...
El salmista expresa a su manera la honesta humildad requerida para ser sabio: "Consideré mis caminos y volví mis pies a tus testimonios." (Teh. 119:59)

Cuando los jajamim se excedían (por ejemplo decretando alguna regla), era el pueblo el encargado de corregirlos. Y los sabios judíos oyen y escuchan al pueblo. Sí, así es, la "masa inculta" es atendida y entendida, y se acepta sus decisiones, en tanto sean legales y no contravengan las órdenes propias de Dios.

Y esto que le menciono no es algo que dijo uno u otro, un sabio o un menos sabio, es lo que la historia nos presenta. Historia objetiva (en la medida que es posible).

Por lo tanto pretender ver en nuestros antiguos sabios a unos viejos haraganes buscadores de fama, riqueza y vaya a saber que más, es pintar una imagen falsa de gente honesta. (Sin dudas que no todos eran tan puros y "santítos", no seamos inocentes, pero tampoco en su inmensa mayoría eran deshonestos. Eran gente, como todos, con aspectos positivos y negativos, sólamente que un poco más sabios, un poco más honestos, un poco más entendedores, un poco más respetuosos y un poco más conocedores).

Por lo tanto, pretender que sabios hombres intentan violar la Torá con sus decisiones, es un absurdo insostenible. Si decisiones rabínicas nos parecen abusivas, o nosotros no entendemos con claridad el texto, pretexto y contexto de las decisiones; o es que realmente fueron un error de los sabios o una necesidad del momento histórico, que se puede solucionar inmediatamente con la llegada del Mashiaj y la reinstauración de un Senado judío (el famoso Sanhedrín) que tenga autoridad para autorizar o desautorizar leyes rabínicas (no de la Torá que son eternas) antiguas.

Y ahora veamos un poco de los que sí tienen intenciones aviesas.
Si por otra parte, decimos que los hombres en general intentan mancillar la Torá, los caminos rectos de Dios, le repito algo que ya mencioné, ¿cuál es la novedad?

La Voluntad de Dios, expresada en la Torá, no es maniatar y "piesatar" a las personas.
Dios si hubiera querido robots o títeres, no nos hubiera creado como nos hizo.
Si Él quiso que poseyéramos una pulsión a lo malo, Sus razones tendrá.
Él tampoco busca nuestra perdición.
El profeta profetizó: "Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos. Vuélvase a Hashem, quien tendrá de él misericordia; y a nuestro Elokim, quien será amplio en perdonar. ''Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos son mis caminos, dice Hashem. Como son más altos los cielos que la tierra, así mis caminos son más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más altos que vuestros pensamientos." (Ies. 55:7-9) 
Entre otras cosas, de esta cita aprendemos que no existe un Camino de Dios a ser transitado como si la persona fuera el mismo Dios, es decir, con perfección.
Como no somos, ni nadie es, fue o será Dios, o como Dios, o parte de Dios; nunca jamás nuestros caminos (es decir, lo que andamos) serán efectivamente Sus caminos.
A lo sumo, podemos intentar aproximarnos, arrimarnos, acercarnos, ¿cómo?
Cumpliendo lo que ÉL manda en Su perfecta y completa Torá, tal como Él mismo dijo: (Dev 8:6) "Guardarás los mandamientos de Hashem tu Elokim, andando en sus caminos y teniendo reverencia de él."
Es decir, aquellos que se apartan de los mandamientos de Dios, son los que no andan por Sus caminos, ni lo reverencian a Él.
Así que, por más que alguien pregone ser mandado de Dios, o seguidor de Dios, o amante de Dios, o revelación de Dios, o mensajero de Dios, o comentarista de Dios, o etcétera de Dios, pero, forcluya incluso uno sólo de Sus mandamientos, una sola de las letras de la Torá, sabremos que no anda por el camino de Dios, ni guía a transitar por Su camino.

Aunque la creencia en Dios no es indispensable para integrar el Pueblo de Israel (ni la creencia en Dios por parte de un no judío lo convierte en judío), la creencia y aún más la adoración de otros dioses, o intermediarios con Dios, descalifica a la persona como judía, y como seguidora de los caminos de Dios (aunque haga todo el resto de las mitzvot). Para no abundar en halajot, solo mencionaré dos textos tanájicos:
(Dev. 9:16) "Miré, y he aquí que habíais pecado contra Hashem vuestro Elokim. Os habíais hecho un becerro de fundición, apartándoos rápidamente del camino que Hashem os había mandado."
(2 Mel. 21:21,22) "Anduvo en todo el camino en el que había andado su padre, rindió culto a los ídolos a los que su padre había rendido culto, y se postró ante ellos. Abandonó a Hashem, el Elokim de sus padres, y no anduvo en el camino de Hashem." 

Para concluir.
Del futuro esperamos con optimísmo que "Preguntarán por el camino de Sion, hacia donde volverán sus caras, y vendrán y se unirán a Hashem en pacto eterno que jamás será echado al olvido." (Irm. 50:5)

Pero entonces, y para alcanzar ese "mundo" mejor, recordemos y hagamos: "El libro de la Torá que nunca se apartare de tu boca; sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él esté escrito; porque entonces hará Dios prosperar tu camino y todo te saldrá bien." (Ieo. 1:8)

Si les quedan interrogantes, comentarios o sugerencias, háganlas llegar que son siempre muy bienvenidas.

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