Sidrá 8ª sidrá de la Torá:  8ª del sefer Bereshit.

Entre 32:4 y 36:43.

Haftará en Hoshéa 11:7 – 12:12.

Perek 32: Iaacov retorna de sus peripecias en casa de Labán, y teme enfrentarse con su vengativo hermano (Esav), por lo cual manda mensajeros con regalos que tienen la intención de apaciguarlo. Los enviados le informan que su hermano está acompañado por un ejército de cuatrocientos hombres. Iaacov teme por su vida y la de los suyos, por lo cual se prepara de tres maneras: divide el campamento y reza; se alista para el enfrentamiento bélico y envía presentes vistosos a su hermano.

La víspera de su encuentro Iaacov lucha contra un misterioso personaje, que no se conoce a ciencia cierta su procedencia o sus características. Lo único certero es que ambos se agotan en el batallar hasta el amanecer, sin lograr uno superar al contrario plenamente.

Iaacov es herido en el tendón de la pierna izquierda, (por esto está prohibido ingerir el nervio ciático de un animal kasher).

El misterioso personaje le informa que Iaacov se ha hecho acreedor de un premio, su nombre ya no será Iaacov (el torcido o aferrado al tobillo), sino Israel (el que venció al hombre y a el misterioso personaje prominente; o también la persona recta).

Perek 33: A la mañana, el reencuentro no estuvo teñido de sangre, sino que los hermanos se reconcilian, se besan, se abrazan, y lloran, sin embargo no permanecen juntos, cada cual continúa su vida alejado del otro. El patriarca comienza a desplegarse por el territorio de la Tierra Prometida, y a entrar en contacto con sus habitantes.

Perek 34: Dina, la joven hija de Iaacov, es seducida por Shejem hijo de Jamor, un príncipe cananeo, y mantienen relaciones sexuales ilícitas. Shimón y Leví, dos de los hijos de Iaacov, engañan a la población regida por Shejem y los aniquilan a todos, tras circuncidarlos, como venganza por la conducta indigna hacia su hermana.

Perek 35: Hashem ordena a Iaacov ir a Beit El y erigir allí un altar.

Luego, Hashem le reitera a Iaacov su nuevo nombre: Israel.

Estando aún de travesía, la mujer predilecta de Iaacov pare por segunda vez, dando a luz a Binamin, y muere, siendo enterrada en Beit Lejem.

Iaacov erigió un monumento recordatorio sobre su tumba que perdura hasta nuestros días.

Itzjak muere a la edad de ciento ochenta años, y sus hijos le entierran.

Perek 36: Por último, se mencionan los descendientes de Esav.

EXTRAIDO DEL TANAJ DE YEHUDA RIBCO

DN: RESUMEN VAISHLAJ