Resp. 3510 – El ser original

Shalom,
«¡Bendito el que viene en el nombre del Eterno!» (Tehilim / Salmos 118:26).
Bienvenida y gracias por enviarnos su interesante misiva.

Con todo respeto, ¿a quién puede interesar lo que ajenos e ignorantes opinen sobre el santo texto que el Eterno entregó por heredad exclusiva a Israel?
No entiendo que gana repitiendo lo que esas personas vociferan desde su prisión de ignorancia.
¿No sería mejor que se dedicara usted a beber de la fuente de Vidas, en vez de seguir esgrimiendo las palabras de falsedad de las religiones ajenas a Dios?

No sé porque usted, después de tanto tiempo siguiendo estás páginas de serjudio.com, está aún repitiendo los falsos conceptos de religiones que desconocen a Dios y Sus cosas.
Tengo el sentimiento que usted es una persona, buscadora de la verdad, que ha podido vislumbrar la Luz de la Torá, pero que aún no se atreve a echar al abismo las viejas ideas de la religión ajena a Dios.

¡Hágalo por favor!
Súmese a la Luz, alumbre usted dentro de su familia, en su lugar de trabajo, entre sus amistades. Ilumine con la Luz de la Verdad, la de la Torá, en lugar de seguir inspeccionando las creencias que tergiversan la pureza y santidad.

Le aconsejo que cuando quiera preguntar, solamente pregunte. No tiene necesidad de argumentar, y mucho menos con argumentos viciados, como son los que provienen de la idolatría.

Espero que sepa tomar para bien mi consejo, que es de maestro y de hermano.

Ahora en cuanto a su pregunta, el vocablo empleado por la Torá es «tzela», que significa tanco costilla como costado.
Si usted atiende, incluso en castellano ambas voces provienen de la misma raíz COSTilla y COSTado.
Es que las costillas son el costado del cuerpo.

En cuanto a lo que usted menciona de que un midrash explica que hombre y mujer estaban unidos y fueron separados, también hay un midrash que expresa que la mujer salió de una costilla.
Como sea, si atendemos al texto de la Torá, comprendemos que el hombre y la mujer eran un único ser al momento de la creación, eran Adam.
Vea usted:

«Creó Elokim, al humano a Su imagen; a imagen de Elokim lo creó; hombre y mujer los creó.»
(Bereshit / Génesis 1:27)

El santo texto dice que creó el Eterno un solo ser, pero que era hombre y mujer. ¿No es así?

Espero que mis palabras le sirvan para aproximarse más a la Luz, que pueda caminar con firmeza por el camino de los noájidas, como le corresponde, y que pronto podamos fundar una filial de FULVIDA en su ciudad.
De usted depende.

Si le quedan dudas pertinentes, hágalas llegar.

Iebarejejá H’ – Dios te bendiga, y que sepamos construir Shalom.

Moré Yehuda Ribco