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 Lic. Prof. Yehuda Ribco // Jeshvan 25, 5764 - 20/11/03

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             Tu BiShevat: Dios de la naturaleza

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Necesito material acerca de TuBishvat.

Gracias.

Bernardo B.
País: Uruguay

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Shalom,
gracias por escribirme.

Sobre Tu biShevat, (que en hebreo quiere decir el día 15 del mes de Shevat) ya habíamos escrito en otras oportunidades, por ejemplo en el texto que se abre haciendo clic aquí.

Pasemos a explicar brevemente esta festividad menor.

El momento en el cual la savia vuelve a recorrer las ramas de los árboles (en la zona de Israel) ha sido marcado como una fecha particular en el calendario anual por los Sabios de Israel.
Esto se basa en que el apego que la Tradición tiene por la naturaleza no es menor, ya que se reconoce su importancia para la vida human, así como se reconoce la huella de Dios en ella.

Por ejemplo, si recorremos las líneas de la Torá nos encontramos que cuando Dios habla de premios o castigos por la conducta personal, casi invariablemente éstos remiten a aspectos vinculados con la naturaleza. Así, si el pueblo se extravía y abandona las mitzvot -los preceptos- el Eterno enviará sequía, o malas cosechas, o plagas a los campos o cuestiones de similar índole.
Por el contrario, cuando el pueblo está apegado a los quehaceres de Dios, y es fiel al cumplimiento de los 613 mandamientos, entonces Dios provee de lluvias buenas en su tiempo, de fertilidad en la producción, de buenas cosechas y agradable pasar en un entorno natural.
(Debemos advertir que el lenguaje empleado por la Torá está para ser comprendido por la gente que personalmente la recibió de parte del Eterno, es decir, judíos conocedores de cuestiones campestres de hace 3300 años. El contenido del mensaje, su esencia y médula, es el mismo, aunque las palabras no parezcan concordar con nuestro estilo de vida actual).

El Todopoderoso, que ha creado el Universo, no rehuye de la que también es Su obra, de la naturaleza, ni encuentra que el bienestar material sea antagónico con una vida de santidad.
Al revés, Dios exige que lo que la naturaleza brinda sea elevado, sea convertido en un medio para desarrollar mayores y más profundos niveles de pureza y santidad.
En el judaísmo lo material es una herramienta más (en realidad, podríamos decir que la única herramienta, pues el judaísmo se basa en acciones, en eventos que modifican la realidad) que el humano dispone para encontrarse con Dios, con el prójimo y con su esencia personal, y por lo tanto, lo material ha de ser cuidado y utilizado con sabiduría y primor.
Preservar y no derrochar los bienes materiales se constituyen en un precepto, en una ordenanza que posibilita una vida más equilibrada.
Gozar y compartir los bienes material se constituyen en un precepto, en una ordenanza que facilita una vida de armonía y paz.

Es por todo esto que los Sabios no podían dejar pasar inadvertida una ocasión de tanta relevancia, como lo es el comienzo del renacer anual de los árboles.
Por lo cual implantaron un día en el cual se recuerda nuestra relación de dependencia con la naturaleza, y nuestra obligación de respetarla, cuidarla y hacerla producir bienestar.

Hay que tener en cuenta un aspecto fundamental: a diferencia de otras culturas, no se idolatra a la naturaleza ni a sus elementos. Tu biShevat NO es un día para adorar a la "madre naturaleza", ni para venerarla, ni siquiera para evocarla con amor y devoción. No se debe poner a la naturaleza en un lugar que le es ajeno, en el sitial de una deidad (tal como hacen, por ejemplo, los del New Age, los de las religiones naturalistas, los ateos materialistas, los panteístas, etc.).
Hacer así es perjudicarla, y perjudicarnos.
Ya que, la naturaleza no es más que otra de las creaciones del Eterno.
Es Dios el creador del Universo, y de todo lo que hay en él, el que determinó con precisión las que denominamos leyes de la naturaleza, así como el que constantemente le brinda la energía para que continúe cumpliendo su vital función.
Naturaleza sin Dios, es nada.
Y es precisamente en el 15 de Shevat cuando Dios determina el destino de árboles y frutos durante el año que se inicia.

Así pues, Tu biShevat es un día de apreciar nuestro entorno natural y de regocijarnos por el.
Y obviamente que es también un día para agradecer al Eterno por los bienes con los que nos provee, y por la Sabiduría Bondadosa con la que ha diseñado el Universo.
De paso, no está demás rogar al Eterno para que bendiga el año que comienza con buena abundancia de frutos del árbol.

En la práctica, el año se calcula desde el 15 deShevat en los asuntos referentes al diezmo de los frutos del árbol y reglamentos similares.
La única costumbre particular de este día es comer alguno de los frutos con los cuales Israel ha sido bendecida.
El fruto del algarrobo es usualmente consumido en esta fecha.
Además, se omiten algunos rezos diarios, y está prohibido hacer ayuno.
Los que siguen lineamientos cabalísticos, se reúnen en este día para ingerir muchas frutas diferentes, 15, 30 o incluso hasta 100.

En tierra de Israel se procura que los niños y jóvenes salgan a excursiones a un medio natural, así como que participen en plantación de árboles, es por esto que actualmente algunos llaman a este día como "jag hanetiot" - "festividad de las plantaciones".
Recordemos que el Talmud (Guitin 57a) enseña que en cada ocasión de regocijo (nacimiento de un hijo, boda, obtención de título académico, etc.) es buena señal plantar árboles (a estos efectos, actualmente el Estado de Israel cuenta con los oficios del Keren Kayemet LeIsrael).
Y no dejemos de lado el mandato de la Torá: "Cuando hayáis entrado en la tierra y plantado toda clase de árboles frutales..." (Vaikrá / Levítico 19:23).

Quedo a sus órdenes.

Que el Uno y Único Dios bendiga a quienes le son fieles servidores, y que sepamos construir Shalom, Iebarejejá H'.

 Yehuda Ribco

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