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 Respuestas a Preguntas // Creencias

    ¿Somos parte de Dios?

Pregunta: 

Shalom....

En Parashat Koiraj 16:3 leo: "....ubetojám H´ umadu´a titnaseú..."H´ está ENTRE ellos.. y también en la parashá Shelaj leí:"...ki atá H´ bekéreb a-a´m azé...."(14:14)---que H´ está en el "seno" de esta nación.(la Torá dice que "ésta nación" somos nosotros; Israel).

De esto "YO" (tal vez me equivoco) deduzco el concepto que una vez leí, creo que en nombre del Rabí Shimeón Bar Iojai... que nosotros (los yidn) somos una PARTE de H´ en lo Alto...que tenemos esa parte de nuestro SER INALTERABLE(esencia) que ES H´.
¿estoy en lo correcto?;¿es esta "PARTE" lo que conocemos como nuestra neshamá?

saludos.
 

Fabián Bergman
Argentina

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Shalom,
"¡Bendito el que viene en el nombre del Eterno!" (Tehilim / Salmos 118:26).
Bienvenido y gracias por enviarnos su interesante misiva.

El Eterno no tiene partes, ni se divide, ni se fracciona en elementos.
Considerar un dios fracturado es sostener una creencia ajena a la Verdad, y por tanto contraría a la Torá.
Cuando el Eterno afirmó:

"Escucha, Israel: el Eterno nuestro Elokim, el Eterno uno es."
(Devarim / Deuteronomio 6:4)

no estaba solamente constatando una realidad matemática, sino también una verdad acerca de Su esencia inescrutable: Él es UNO, sin partes, sin límites, sin semejante, sin representación, sin par, sin igual, sin contrario, sin decadencia, sin perfeccionamiento,... UNO y ÚNICO.

Así pues, es incorrecto decir que somos parte de Dios, puesto que somos Sus criaturas, obras de Sus manos, y no partículas derivadas de Su "persona".

¿Queda comprendido esto?

Ahora bien, nuestra neshamá, como parte de la faceta espiritual universal, es un elemento creado, no existía antes de que el Eterno lo hiciera aparecer:

"En principio creó Elokim los cielos con la tierra."
(Bereshit / Génesis 1:1)

Los "cielos" aquí mencionado es el plano espiritual, en tanto que la "tierra" es el plano de lo material.
Ambos son creaciones, no elementos eternos ni partes o derivados de la esencia indescriptible Eterno.

En cuanto a pretender unificar a la nación de Israel con el Eterno, tal como si fuera la misma entidad, no es correcto.
Preste atención:

"Mira, desde Tu santa morada, desde los cielos, y bendice a Tu pueblo, a Israel y al suelo que nos diste, como juraste a nuestros padres: tierra que fluye leche y miel.'"
(Devarim / Deuteronomio 26:15)

Claramente se manifiesta la ubicación netamente trascendente del Eterno, en los "cielos", en tanto que Israel se encuentra en el "suelo".
Tenemos nuestro plano espiritual, nuestra neshamá que es un puente a lo trascendente, pero de ningún modo es parte de Dios.
Y por supuesto, la neshamá es pura y dada por el Eterno, tal como rezamos cada mañana:

"Elokai neshama shenatata bi tehora hi, ata berata, ata ietzarta, ata nefajta bi... - Mi Dios, el espíritu que me diste es puro, Tú lo creaste, Tú lo formaste, Tú lo insuflaste en mí..."
(Sidur, basado en TB Berajot 60a)

Creo que con esta plegaria se concluye de responder completamente a su duda, ¿no?

Ahora le explicaré muy rápidamente los versículos que usted menciona en su misiva.
El primero:

"Ellos se juntaron contra Moshé [Moisés] y contra Aarón, y les dijeron: -¡Basta ya de vosotros! Porque toda la congregación, todos ellos son santos, y el Eterno está en medio de ellos. ¿Por qué, pues, os enaltecéis vosotros sobre la asamblea del Eterno?"
(Bemidbar / Números 16:3)

¿Estas palabras fueron pronunciadas por un sabio o por un tzadik?
¿O son palabras emitidas por panfletarios, demagogos y rebeldes?
La respuesta es la segunda; fue Koraj y su caterva de revoltosos los que esgrimían este panfleto en contra de la autoridad de Moshé y de Aarón, y en definitiva en contra del Eterno.
Así pues, no podemos tomar estas afirmaciones como válidas de por sí, puesto que son argumentos de personas que buscaban confundir con sus sofismas, que pretendían con rebuscadas excusas sellar como kosher aquello que no lo era.
La afirmación: "en medio de los israelitas está el Eterno", ¿es correcta o no?
Por supuesto que sí, pero esto no significa que los israelitas sean parte de Dios, tal como se comprende perfectamente en este versículo:

"Que Me hagan un santuario, y Yo habitaré dentro de ellos."
(Shemot / Éxodo 25:8)

Si el espíritu del judío fuera parte de la esencia del Eterno, ¿le parece que estaría condicionada Su Presencia a la edificación de un santuario en medio del pueblo?

¿Qué quiere decir que el Eterno está en medio de Israel?

Pues, que la conducta de los judíos, cuando están dedicados al cabal cumplimiento de los Mandamientos, manifiestan Su grandeza, tal como comprobamos al leer:

"Guardad los mandamientos y ponedlos por obra, porque esto es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia ante los ojos de los pueblos, los cuales al oír de todas estas leyes dirán: '¡Ciertamente esta gran nación es un pueblo sabio y entendido!'
Porque, ¿qué nación hay tan grande, que tenga dioses tan cerca de ella, así como lo está el Eterno nuestro Elokim toda vez que le invocamos?
¿Qué nación hay tan grande que tenga decretos y normas justos como toda esta Torá que yo entrego hoy delante de vosotros?"
(Devarim / Deuteronomio 4:6-8)

Ahora, el segundo versículo que usted menciona en su misiva:

"Y lo contarán a los habitantes de esta tierra, los cuales han oído que Tú, oh Eterno, estás en medio de este pueblo; que te dejas ver cara a cara, oh Eterno, y que tu nube está sobre ellos. Han oído que Tú vas delante de ellos, de día en una columna de nube, y de noche en una columna de fuego."
(Bemidbar / Números 14:14)

Nuevamente, este versículo no expresa que el espíritu judío sea fragmento derivado de la esencia del Eterno, sino que claramente refleja que los otros pueblos, al escuchar los relatos de la Salida de Egipto, de las plagas que cayeron sobre los egipcios, de los maravillosos hechos que protegieron a Israel, admitirán que Israel tiene una alianza particular con el Todopoderoso.

Podemos aspirar a "adherirnos" al Eterno, tal como expresa el versículo:

"En pos del Eterno vuestro Elokim andaréis, y a Él temeréis. Guardaréis Sus mandamientos y escucharéis Su voz. A Él serviréis y a Él os adheriréis."
(Devarim / Deuteronomio 13:5)

Como ve, el mismo versículo nos brinda el método para alcanzar este altísimo grado de perfección espiritual: cumplir los mandamientos con fidelidad.

El tema es sumamente complejo, pero espero haber sido claro.

Si le quedan dudas pertinentes, hágalas llegar.

Iebarejejá H' - Dios te bendiga, y que sepamos construir Shalom.

Notas:

1- 

Moré Yehuda Ribco
E-mail: comentario@serjudio.com

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