Día 14, que corresponde a dos semanas del Omer (29 Nisán).
Trabajamos sobre Maljut en Guevurá.

Maljut, es la cualidad emocional de la nobleza, el mando, la administración de los recursos.
Guevurá, es de la restricción, la severidad y la disciplina.

Analiza los aspectos en tu conducta total (pensamientos, palabras, sentimientos, deseos, actos) que reflejen tu ejercicio de autoridad actuando con severidad.

Respóndete, si quieres y puedes: Cuando eres estricto, con el prójimo o contigo mismo, ¿humillas o ennobleces?
Tus medidas disciplinarias, ¿buscan poner al otro en su sitio, o impulsarlo a crecer y mejorar?
¿Te sientes partícipe de los logros de tus subordinados, o poseedor de los derechos sobre ellos?
¿Diriges porque tienes miedo a los otros, o porque realmente tu mando es en beneficio de todos?

Cuando los límites rigurosos son puestos con autoridad en procura de metas positivas, las personas (normales) se sienten liberadas en lugar de restringidas. Sin límites y sin ejercicio justo de poder, no hay crecimiento posible. Y este hecho aunque conscientemente pueda pasar desapercibido, el alma lo sabe, conoce y ansía. El alma encarnada en persona anhela los límites precisos que le dan conciencia de existencia material. Es lo que se llama: arraigo.
Así pues, la disciplina que ennoblece es una de las herramientas más efectivas cuando un padre o un maestro educa a sus educandos, pues enseña y posibilita el crecimiento integral y compartido.
Pero, cuando el ejercicio de poder se transforma en despotismo, y el líder es un tirano; entonces los límites son una tortura real, lacerante; y la rebelión es una saludable muestra de un alma que lucha por su libertad.

Durante este día, examina tu existencia, si notas que tus críticas no persiguen alentar la mejoría y el crecimiento, sino que buscan denostar y disminuir injustamente; entonces debes saber que hay aquí un aspecto tuyo que debes trabajar con ahínco.