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Hemos mencionado
en otro texto la Comunicación Auténtica (CA),
que está sostenida en cuatro soportes imprescindibles:
Por medio de la CA
se desarrolla la asertividad, que es una parte de las
habilidades sociales básicas.
La asertividad es la habilidad que reúne las conductas y pensamientos
que nos permiten defender los derechos de cada uno sin agredir ni ser
agredido. Es una afirmación positiva, que no busca el conflicto, sino la
resolución adecuada.
Pongamos un
ejemplo.
Está en un restaurante y le traen la sopa con una ostensible mosca.
¿Cuáles son las tres reacciones posibles?
-
Estilo
pasivo: Tomarse la sopa sin decir nada.
-
Estilo
agresivo: Tirar la sopa en la cara de
camarero, amenazar con demandar, armar un escándalo.
-
Estilo
asertivo: Pedir con amable firmeza que le
corrijan el inconveniente.
El primer y
segundo estilo no promueven una modificación saludable de las
condiciones, ni permiten resolver efectivamente el trastorno.
En lugar de reducir las tensiones y encontrar el equilibrio quebrado por
un suceso desagradable, se alienta el aumento del desorden.
Para empeorar las cosas, con ambas conductas no asertivas se entra en un
círculo vicioso, que genera mayores presiones y conflictos.
Es habitual encontrar personas que
emplean los dos primeros estilos, y más difícil hallar gente que se
comunique asertivamente. Esto se debe a que para expresarse
asertivamente es necesario una adecuada autoestima, cualidad que suele
serles escasa a los agresivos y a los pasivos.
Es decir, para defender los derechos propios y ajenos con adecuación,
uno debe percibir, sentir y creer que uno mismo tiene derecho a tener
creencias, derechos u
opiniones y a expresarlas sin temor, en tanto no ataquen el derecho o
integridad de una persona inocente.
Sin embargo, como la autoestima
saludable no es lo que abunda, y las personas tenemos intereses y formas
de ver el mundo distintos, el conflicto interpersonal es frecuente; o en
su defecto, se enquista dentro de uno sentimientos nocivos, que
solamente sirven para ir dañando la propia salud e integridad.
Debemos saber que cuando no canalizamos asertivamente lo que deseamos
expresar, se promueve la frustración y la insatisfacción propia, y
habitualmente ajena.
Por otra parte, personas que padecen depresión, ansiedad
y estrés vinculados por las relaciones interpersonales suelen
tener un gran avance cuando aprenden métodos de CA, pues nos
ayuda a conocernos y de ese modo respetar a los demás y a nosotros mismos.
Lo bueno es que es posible aprender a
comunicarse asertivamente.
Para comenzar en este aprendizaje, les daré algunas
pautas que se deben tener siempre presentes a la hora de intentar una
Comunicación Auténtica:
-
Escuche a su interlocutor y trate de
comprenderlo.
-
Procure no interrumpir el discurso
del otro, en tanto el mismo no sea agresivo/intrusivo por demás.
-
Trate de usar el nombre
(o título si corresponde) de su
interlocutor al comienzo de sus frases.
-
Respete sus tiempos, y los tiempos
de su interlocutor.
-
Agradezca cuando sea oportuno.
-
Reconozca las virtudes, logros o
potenciales del interlocutor, con ánimo de entablar un puente de
comunicación, pero nunca como lisonja rastrera.
-
Pida explicaciones de los puntos que
no le quedan claros, o que usted no comparte.
-
Pregunte lo que no entiende.
-
Pregunte para confirmar aquello que
cree entender pero que puede llevar a confusión.
-
Sepa que tiene derecho a ser
escuchado y respetado en sus creencias, en tanto éstas no sean
lesivas.
-
Tiene derecho a mantener sus puntos
de vista y a expresarlos con libertad y corrección.
-
Tiene derecho a recibir apoyo
emocional.
-
Cuando algo no le agrade, le asiste
derecho para decir "no me agrada".
-
Usted es dueño de decir "no", cuando
sea correcto.
-
Usted decide cuando prestará ayuda a los
demás y cuando no.
-
Sepa a dónde quiere llegar, y en la
medida de lo posible, no se desvíe de su meta.
-
Sea firme en sus metas, pero
recuerde que la flexibilidad es demostración de poder, en tanto la
rigidez es muestra de quebranto.
-
Sea simple, directo y conciso.
-
Argumente pero NO debata.
-
Exprese con corrección sus puntos de
vista.
-
Dialogue y hasta procure convencer,
pero no apabulle.
-
Acepte los puntos razonables del
interlocutor.
-
Tiene derecho a equivocarse, tanto
como el interlocutor lo tiene.
-
Trate de evitar generalizaciones.
-
Trate de evitar expresiones
negativas (por ejemplo, en lugar de decir "día
sin sol", mejor puede decir "día nublado").
-
Trate de evitar las determinaciones
categóricas.
-
No responda con enojo.
-
Modere su tono de voz.
-
No ladre.
-
No ordene.
-
No menosprecie.
-
No ataque.
-
Si el otro responde con pasividad o
agresividad, señale usted las dificultades que encuentra para el
diálogo y proponga un encuentro en otro momento
(si es posible).
-
No es de cobarde evitar las
situaciones en las cuales corre
peligro de ser violentado, o
de violentar la legalidad.
Entrenarse para
Comunicar Auténticamente
Como cualquier
otra habilidad humana, la asertividad es susceptible de
aprenderse, entrenarse y mejorarse. No es cuestión sencilla y
rápida de conseguirse, pero es posible mediante un constante
ejercicio de ciertas técnicas de entrenamiento en la
CA.
A
continuación les presento un procedimiento eficaz que consta de
seis fases:
1º
Identifique su estilo básico de comunicar y
actuar.
¿Es usted de los que emplean regularmente el estilo
agresivo, pasivo o asertivo?
¿Es pasivo, o pasivo agresivo?1
¿Es directamente agresivo?
¿Emplea la manipulación como estrategia habitual en
sus relaciones?
Aprenda a reconocer
sus errores al comportarse.
2º
Identifique
las situaciones en las cuales
pudo haber comunicado auténticamente, pero no lo
hizo.
Recuerde situaciones en las que no comunicó
auténticamente, y por tanto hubo fallas, disturbios,
en la comunicación.
Debe poder analizar el grado en el que su
participación generó o amplificó los efectos de una
situación interpersonal, generalmente sentida como
negativa.
3º
Identifique los componentes de sus comunicaciones no
auténticas.
Reconozca y describa los
quién, cuándo, qué y cómo intervienen en su falta de
CA.
Descubra cuáles podrían ser los motivos que le
llevan a actuar así, y cuáles las posible
ganancias (falsas, por
cierto) para no usar la CA.
4º
Delineé una conducta o comunicación alternativa.
Tómese el tiempo, tras haber dado los pasos
anteriores, para idear una propuesta alternativa a
lo que ya hizo y le resultó en fallo.
Planifique futuros encuentros, no para marcar un
guión, sino para entrenarse en CA.
5º
Ensayo.
Frente al espejo, desarrollé un diálogo imaginario,
y preste atención a sus gestos, tonos de voz,
posturas, etc. Trate de reconocer lo que induce a
error, o a debilidad en la comunicación, y practique
nuevas actitudes.
6º
Puesta en práctica.
Comience a comunicarse auténticamente, primero con
asuntos no muy sensibles, y con personas que puedan
ser de respuesta centrada y no lastimosa.
Adquiera confianza en sus habilidades, y vaya
dejando de a poco la presión por seguir estas seis
fases, hasta que la CA se integre a su modo de ser.
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Notas:
1- El pasivo agresivo no ataca directamente, pero se queja, vive
enfurruñado, pone trabas constantemente, critica sin fundamentos, destila "mala
onda", le dan la espalda y enseña los dientes, etc.
El agresivo directo, es aquel que sea emocionalmente, intelectualmente o
físicamente ataca a su interlocutor. |