Recibimos el siguiente texto:
Hola
Vale la pena leer este articulo sobre el Medio Oriente, especialmente en el
dia que se esta discutiendo en Suecia, de sacarle el Premio Nobel a Shimon
Peres. Este articulo fue escrito por un no judio.
Kike
En el día de hoy, cuarto del mes de abril del 2002 de la era cristiana
según el calendario gregoriano, el mundo dispuesto a hacerlo se rasga las
vestiduras porque el ejercito israelí cerca la Basílica de la Natividad, en
la que se han
refugiado tres centenares de milicianos palestinos armados, los que, desde
la Basílica,
hacen frente los soldados israelíes. En la Unión Europea se hacen oír las
protestas de
los muy humanos "pacifistas unilaterales" por las precarias condiciones de
vida de
los encerrados y cercados en la Basílica, que al parecer y según tales
fuentes
ya carecen de alimentos y agua.
Curiosamente nadie protesta, ni siquiera las iglesias cristianas, por el
hecho de que tres centenares de milicianos palestinos, armados hasta los
dientes, hayan
profanado una Basílica cristiana ocupándola militarmente quizá en la
presunción de que,
por tratarse de una Basílica de especial importancia para el mundo
cristiano, las
tropas israelíes se abstendrán de usar de toda la fuerza de la que
disponen.
Los medios de comunicación (prensa, radio y televisión) bien engrasados
por los petrodólares islámicos, protestan y condenan las acciones del
ejercito
israelí y por el bloqueo al que tienen sometido al jefe de los terroristas
palestinos,
Yasir Arafat.
También protestan y condenan el cerco a la Basílica de la Natividad y, en
general, lo hacen globalmente por la política de defensa y de lucha contra
el
terrorismo islámico-palestino que está llevando adelante el gobierno de
Israel. En tanto que
pocas y muy tibias son las condenas a las acciones terroristas que han
motivado la
respuesta militar israelita.
La Unión Europea, dependiente del petróleo que nutre de fondos al
terrorismo islámico, se alinea vergonzosamente con el bloque árabe y
condena las acciones de
autodefensa a las que se ha visto obligado el gobierno de Israel para
defender a su pueblo. Curiosamente esa misma Europa colaboró y aplaudió la
justificada
intervención de los EE.UU. en Afganistán. Lo que haría pensar que para los
gobiernos de
la Unión Europea hay un terrorismo con el que es lícito acabar, usando de
todos los
medios militares que sea necesario, y un terrorismo con el que sí, pero
no... no
vaya a ser que se enfaden los jeques del petróleo y nos hundan la economía.
Actitud igual a la de cierto pacifismo que al condenar la violencia, venga
de donde venga, equiparan la violencia del agresor terrorista con la del
Estado que
defiende legitimante a sus ciudadanos de esa violencia terrorista que se
ejerce
contra civiles indefensos ante las acciones terroristas.
Desgraciadamente, tal y como ya comenté hace meses, Israel ha perdido la
batalla de la opinión pública, así como de la publicada. La fuerza de los
petrodólares a la hora de crear opinión es muy superior al interés por
publicar e informar sobre la
verdad de la situación. Yasir Arafat, padre del terrorismo moderno, va
camino de
convertirse en un mártir tan artificial como lo fue el Che. La Unión
Europea no tardará en
romper relaciones con Israel y acordar sanciones económicas. En tanto que
los
EE.UU. guardan silencio esperando a que la situación se complique aun más
y, con
un poco de suerte, Israel sea agredido por Irak, Irán o Siria, dando así al
Imperio
el pretexto para intervenir militarmente contra ciertos países que amenazan
a occidente y
sirven de refugio y base a los terroristas islámicos. Pero eso sí, sin
molestar a su
aliado Arabia Saudita, país primer financiador del fundamentalismo islámico
del que nace
y se nutre el terrorismo de esa ideología.
Y, mientras tanto, Israel en cierta forma nos saca las castañas del fuego
a todos, enfrentándose solo e incomprendido contra el terrorismo islámico
que
amenaza y socava los cimientos de la civilización occidental o
judeo-cristiana.
Duros tiempos se anuncian.
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