Recibimos este texto:
Saludos Sr. Yehuda,
Le transcribo una crónica aparecida en un periódico español, lo que se
describe no es que se trate -por desgracia- de un comportamiento
infrecuente, pero lo novedoso es que este tipo de noticias empiezan a
aparecer en la prensa española con mayor frecuencia -incluida la TV-, y
empiezan a mostrar que no todo es tan claro o tan oscuro como algunos
parecen creer, este es el fragmento (del periódico ABC):
"Desprecio más allá de la muerte J. C. Los palestinos acusados de colaborar
con Israel son despreciados incluso más allá de la muerte. No sólo ellos.
También sus familias. La de Mohamed Deifallah, ejecutado en Belén, un claro
ejemplo. Mohamed fue detenido por facilitar información a los servicios
secretos israelíes para el asesinato selectivo de uno de los jefes del
Tanzim, Husein Abayat. El juicio de Mohamed Deifallah, televisado en directo
por el canal de Belén, fue denunciado por asociaciones de derechos humanos.
Ningún abogado quiso ejercer su defensa. Fue torturado en la cárcel para
confesarse culpable. Hace un mes, Deifallah fue trasladado de la cárcel de
Belén a otro centro menos expuesto a los bombardeos e incursiones del
Ejército israelí. Varios miembros encapuchados de la Brigadas de los
Mártires de Al Aqsa asaltaron el edificio y se llevaron a Mohamed y a otro
presunto colaboracionista, Mahmud Sabatin. Ambos fueron ejecutados en Beit
Sahour, en el mismo lugar en el que cayó Abayat. Sus cuerpos fueron
arrastrados por la Plaza del Pesebre ante el jolgorio de los testigos. La
familia de Mohamed acusó a la ANP de no proteger su vida. Su cadáver no
descansó en la morgue del hospital de Beit Jala, que se negó a acogerle.
Tampoco pudo ser enterrado en el cementerio musulmán al ser vetado por los
imanes. Su madre y su padre han perdido sus trabajos. También dos de los
hermanos. Huda dice que ninguna de sus cinco hijas podrá casarse ahora. Su
hijo pequeño ha sido agredido en el colegio por sus compañeros. Un
desprecio, para Mohamed y para toda su familia que, en efecto, va más allá
de la muerte."
Es lamentable que tales noticias sigan produciéndose, esperemos que la
cordura acabe imponiéndose incluso en tan adversas circunstancias, tarde o
temprano los caminos del fanatismo acaban mostrando lo esteriles, brutales y
absurdos que son, la cuestión es ¿cuanta sangre costará todavía llegar a esa
conclusión? Saludos cordiales
Jorge Romero
Barcelona
España
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