Shabbat I Adar 13, 5763 - 15/2/03
Comentario de la Parashá Tetzavé:
Su parte en la Menorá
En el
comentario de la semana pasada aprendimos acerca de las contribuciones
con las cuales los Hijos de Israel hicieron su parte en la edificación del
Mishkán -Santuario.
Aprendimos que el contribuir materialmente con obras trascendentes es un
camino para encontrar la propia elevación, la ascensión en pos de aquello
que al Eterno agrada.
En definitiva, la Torá nos enseñó un camino para redimirnos y redimir al
mundo.
Ahora bien, de lo enseñado puede surgir la
pregunta: ¿Cuándo se puede decir: 'Ya he contribuido bastante, ya no es
necesario mi aporte que me asocia con las obras de construcción del mundo'?
La respuesta a esto nos lo brinda el primer
versículo de la parashá de esta semana:
"Tú mandarás a los Hijos de Israel que te
traigan aceite de olivas claro y puro para la iluminación, a fin de hacer
arder continuamente las lámparas."
(Shemot / Éxodo 27:20)
La edificación del Santuario no culminó con su
inauguración, ya que a diario es preciso hacerlo funcionar, hacer que tenga
sentido. Encender las luces que alumbran a los fieles al Eterno no se hace
un día, y se deja de hacer. ¡No! Es una obligación de esfuerzo cotidiano y
sostenido.
Las contribuciones para mantener el servicio de Dios no cesan cuando el
Templo está construido, sino que deben sostenerlo continuamente.
El trabajo por crecer y desarrollarse, y por ayudar al prójimo en esta sacra
tarea, no debe cesar hasta el último momento de vida.
Cada día las lámparas de la Menorá debían re-encenderse, y para esto el
aporte de cada miembro de los siervos del Eterno era necesario.
Actualmente no tenemos Templo, pero sí
contamos con numerosas instituciones y con abnegadas personas que trabajan
para difundir el imperecedero mensaje de la Torá, y de este modo educan en
el verdadero servicio al Eterno y amor al prójimo.
Es a ellos, a los que encienden la Menorá de la educación basada en Torá, a
quienes debemos ayudar con nuestra contribución, con nuestra provisión de
aceite puro para iluminación.
El trabajo por aprender y enseñar Torá es constante, tal como lo debe ser la
provisión material que lo posibilita.
Así que, es bueno saberlo,
cuando
usted colabora con sitios como SerJudio.com, por ejemplo, está haciendo
su parte en la obra redentora del mundo. Y si se mantiene fielmente en su
soporte, está sirviendo de cimiento para construir una sociedad más
armoniosa, justa y generosa.
Y así, usted pasa a ser parte de los que alumbran con amor, justicia y
verdad a este mundo que parece poblado por sombras de caos y oscuridad, "...continuamente
desde el anochecer hasta el amanecer. Esto es un estatuto perpetuo, a través
de vuestras generaciones" (Vaikrá / Levítico 24:3).
¡Shalom iekarim! ¡Les deseo Shabbat
Shalom!
Moré Yehuda Ribco
Otras interpretaciones de este pasaje de la
Torá, y más estudios los podrá hallar
HACIENDO CLIC
AQUÍ.
De la Parashá
Tetzavé
|