Lic. Prof. Yehuda Ribco |
||
BeShem H' El Olam |
LaH' Haaretz UMeloa
Responsable: Licenciado en Psicología Prof. Yehuda Ribco / Darjey Noam
La Lógica de Purim
¿Por qué a lo largo de los siglos se identificó Purim
con mascaradas y disfraces?
¿Es la Meguilat Ester algo más que una trama de enredos palaciegos?
¿No es un típico relato oriental, muy barroco y superficial?
¿Cómo entender que un libro que no menciona siquiera una vez a Dios, esté
incluido en el Tana"j?
¿Encierra algún mensaje trascendente, más allá de la vulgar moraleja?
¿Bajo qué premisas el relato de Purim nos llegó a nosotros?
¿Cuál es la lógica detrás de Purim?
De hecho, ¿por qué Purim recibe este nombre?
El Baal Shem Tov, siguiendo conceptos talmúdicos, enseñaba
que el nombre propio es el vehículo por el cual la energía, que Dios envía al
ser, toma forma y se manifiesta.
Es decir, el nombre propio revela la naturaleza del ser, su esencia ligada a lo
divino.
Si revisáramos cada uno de los personajes del Tana"j,
veríamos como esto se confirma.
Podemos corroborarlo, también analizando el nombre de cada una de las
festividades judías.
Pero, cuando nos topamos con el nombre "Purim", estos planteos
parecerían trastocarse.
Pues, en realidad, ¿qué significa Purim?
En su origen ni siquiera es una palabra hebrea, sino persa, y significa
"dados", o "echar suertes".
¿Y esto de dónde?
Aproximadamente en el año 485 AEC fue echada la suerte
para determinar el día que los judíos serían asesinados, aniquilados,
exterminados y sus posesiones repartidas entre los asesinos.
Así que, en este caso, los "dados" es el método utilizado por el
maligno para determinar el momento de materializar su maldad...pero, que jamás
se cumplió.
¿Cuál es la relación esencial, íntima, entre el nombre Purim / Dados, y la festividad que nosotros gozamos?
Para responder a esto, debemos examinar algunos párrafos
de la Meguilá.
La Meguilá parece comenzar con una narración superflua,
innecesaria:
el nuevo rey persa (Ajashverosh) brinda un agasajo lujoso y extenso, de seis
meses, para los nobles de su imperio. Al final de ese período, una fiesta
popular de siete días comienza para todos los habitantes de Shushán, la ciudad
capital del magno imperio.
¿Qué motiva tamaña celebración?
Algunos eruditos suponen que Ajashverosh (presumiblemente Jerjes I) festeja su
ascensión al poder.
Es lógico que este hombre demuestre su inmensa algarabía, pues Persia era "El" imperio de aquella época. Por lo tanto, él era el hombre más poderoso sobre la faz de la Tierra.
Pero, para dentro del pensamiento judío, se halló una
causa más, incluso quizás más relevante que la anterior.
El profeta Irmiá (Jeremías) había profetizado que los judíos estarían en el
exilio durante 70 años, tras la destrucción del primer Beit HaMikdash.
Como está escrito:
"Porque así ha dicho Hashem: ''Cuando según mi dicho se cumplan setenta años para Babilonia, os visitaré con mi favor y os cumpliré mi buena promesa de haceros regresar a este lugar." (Irmiá / Jeremías 29:10)
Según calculó correctamente Ajashversosh, esos 70 años ya habían
transcurrido, y la mayoría de los judíos permanecían en la dispersión, por
lo tanto, el exilio sería perpetuo y el de la Divina Presencia también...nada
ni nadie podría opacar, entonces, la magnitud de su imperio.
Pero, Ajashverosh interpretó mal la profecía, pues lo que Irmiá profetizó, exactamente ocurrió:
En el 586 AEC fue destruido el Mikdash;
Y en el 516 AEC se terminó su reconstrucción:
¡Exactamente 70 años de una fecha a la otra! 1
Los judíos tenían derecho a regresar a su hogar, incluso tenían un Templo en
el cual congregarse, pero dijimos derecho, pues, lamentablemente la mayor
parte del pueblo permaneció en el auto-exilio, prefiriendo los placeres de
tierras que no eran suyas...pero eso lo veremos un poco más adelante...
Volviendo al rey (como llamaremos a Ajasheverosh de ahora en más), éste creyó
que la permanencia de los judíos fuera de su tierra nacional era síntoma de la
debilidad de su Dios, señal de que aquel Dios de proezas y maravillas hechas en
el pasado, ahora nada haría contra Persia.
Y, también por eso festejaba:
por creer que era vencedor sobre los judíos y sobre el que había sido todopoderoso Dios.
Algunos creen encontrar el desdén hacía los judíos (y Dios), explicitado en el comienzo de la Meguilá, cuando dice:
"Y conforme a la generosidad del rey, daban a beber mucho vino real en vasos de oro, vasos diferentes unos de otros." (Ester / Esther 1:7)
Pues, esos vasos de oro, diferentes unos de otros, hay algunos interpretes
que consideran que son los vasos que fueron robados por Nebujadnetzar del Beit
HaMikdash y llevados a Babel, y que luego fueron tomados como botín por los
persas.
Y, además, están los que dicen que las ropas que usaba Ajashverosh, que
demostraban "esplendor y gloria" no eran otras que las ropas que le
habían sido quitadas al Cohen Gadol - Sumo Sacerdote (ver Shemot /Éxodo 28 por
la identidad de términos).
Así pues, algunos comentaristas "nacionalistas" conjeturan con que
cada acto llevado a acabo en esta fiesta narrada al comienzo, nada tienen de
superficiales, por lo cual, esta sección es trascendente no solo por ser parte
integral de la trama, sino por ser incluso parte del marco, en el cual los actos
trágicos siguientes se desarrollaran.
En resumen, la fiesta que aparenta ser superficial, en lo oculto es una
celebración antijudía.
Bien, supongamos que esto es así, ¿el relato de Vashti (a partir de 1:9)
que tiene que ver?
¿Era acaso judía?
¿Aparece algún judío en la narración de la "rebelión" de Vashti y
su terrible castigo?
Nuevamente las apariencias nos engañan en esta Meguilá.
Tal parece que cuando entendamos quién era esta Vashti, y qué hacía ella, nos
encontraremos con un meta-relato que explica el relato.
Y nos encontraremos también con un paradigma, un modelo, que será el que se
aplique en toda esta historia: mida kenegued mida- "justa retribución
por los hechos".
Vashti no era una buena mujer, ni su obstinación a presentarse frente al rey
desnuda, solamente vestida con su corona, era por ser defensora del
"feminismo" (cosa ridícula de suponer en aquella atmósfera).
Según lo que nuestros jajamim explican era una mujer perversa y pervertida, en
bien poco la afectaba mostrar su desnudez, e incluso su procacidad frente a los
hombres, por lo que, su negativa en este momento no debe tomarse como un grito
de libertad frente al "machismo" opresor, sino como la rebelión
contra la autoridad y el descaro del orgullo.
Expliquemos esto.
Vasthi era la nieta del antiguo emperador babilónico Nebujadnetzar (Nabucodonosor),
el que había derrotado a Ierushalaim y destruido y saqueado el Templo, y había
heredado de éste su maldad y carácter furibundo.
Nos cuentan los jajamim (T.B. Meguilá 12b) que adrede hacía trabajar a jóvenes
doncellas judías en Shabbat. Y por si fuera poco, las obligaba a andar desnudas
por el palacio, a la vista de todos.
Y mientras las judías lloraban por estar pecando, y por la vergüenza y por el
miedo que les producía la reina, ésta gozaba de un éxtasis total. Cada lágrima
de dolor, era una gota de sádica satisfacción para ella.
Entonces:
"En el séptimo día, estando el corazón del rey alegre a causa del vino..." (Ester / Esther 1:10)
El "séptimo día", que es Shabbat, el rey la manda llamar a que se
presente desnuda frente a sus invitados.
En ese momento, Vashti estaba en su propio festín, rodeada de mujeres de clase
y alcurnia.
Y, seguramente, sintiéndose menospreciada (¡ella la nieta del emperador más
grande de los últimos tiempos de Babilonia!), y viéndose en un estado de
escaso esplendor físico, rechaza la rden del rey, quizás pensando: '¿quién
es este reycito para darle órdenes a una descendiente de la más fina casta
imperial?- ¡Que ese borracho se encuentre un mejor juguete para mostrar a sus
amigos borrachos!'
El rey monta en cólera al enterarse del rechazo por parte de Vashti, y tras
consultar qué era lo correcto en su reino, la destituye (algunos dicen que la
manda matar).
Como vemos, mida kenegued mida, la justa retribución divina, pues, la
mujer que se vanagloriaba de desnudar y hacer trabajar a las esclavas mujeres
judías en Shabbat; en un Shabbat debía "desfilar" desnuda, y ser
mostrada como un objeto en una colección de objetos.
Esta justa retribución incluso aparece mencionada en la Meguilá:
"...él se acordó de Vashti, de lo que ella había hecho y de lo que se había decidido con respecto a ella." (Ester / Esther 2:1)
Tal como hizo- se hizo respecto a ella.
Esto es: mida kenegued mida.
Vemos, pues, que tampoco el relato de Vashti es accesorio, y que también
envuelve una historia que no aparece a simple vista.
Los judíos podían vivir bien en Persia, pero, su condición era bastante
inestable, pendiente de los deseos del "amo" del momento.
Y, en Persia, en el exilio auto-impuesto, los judíos con ciertas conductas
se estaban haciendo merecedores a que Dios los considerara con mida kenegued
mida.
Porque, a todo esto, ¿dónde estaban los judíos cuando se celebraba su exilio
perpetuo?
¿Qué era de ellos durante esta fastuosa reunión?
Si sabemos contestar a esto, veremos como nuevos hilos surgen en lo que
aparecía ser una fiesta insulsa. Y comenzaremos a comprender cómo y por qué,
se estaba tramando la "solución final del problema judío".
Según rabí Shimón bar Iojai (en T.B.
Meguilá 12a), ¡los judíos prominentes (de Shushán) estaban participando de
esa fiesta! (A excepción de Mordejai el judío, quien estaba guardando luto
fuera del palacio).
Por si fuera poco tomar parte de una fiesta de victoria sobre ellos, estos judíos
demostraban qué tanto les importaba mostrándose públicamente, regodeándose
con sus opresores y burladores.
Pero, estos no eran todos los judíos, sólo unos pocos y de la capital, ¿por
qué Dios permitiría que cayera un castigo sobre todos?
Una respuesta sería: por que esos judíos parecían preferir el beneficio
material en el exilio, a la modestia en la propia "casa" - Eretz Yehudá.
Por dejarse estar en la opulencia (mayor o menor), y de esa forma permitir que
el Sacro Nombre fuera mancillado entre las naciones; en lugar de preferir lo
escaso pero digno de alabanzas.
Otra respuesta, porque los judíos de las 127 naciones del imperio recibían con
orgullo y beneplácito, las noticias de que hermanos suyos eran
"convidados" de lujo a la mesa del emperador más grande de todos los
tiempos...
Es decir, algunos derivaban placer directo, en tanto que otros mediatizado, pero
todos, despreciando SU propia identidad y esencia...
Y todo esto lo estamos aprendiendo de lo que se disfraza para aparentar ser un relato inútil, una anécdota palaciega oriental...
Y podemos aprender otra cosa.
Persia es símbolo de materialismo y consumismo, (al igual que en la visión
sobre la estatua que tuvo Nebujadnetzar, narrada en el libro de Daniel).
Se presenta a este imperio como un jolgorio constante.
Un derroche suntuoso.
Placeres sumados a placeres.
Todo administrado por una ley rígida, totalmente materialista.
Incluso las personas pierden la dimensión compleja y humana, para transformarse
en bienes de consumo, de desecho...
Cualquier semejanza con el capitalismo, neoliberalismo, comunismo real...no es
pura coincidencia...
Y este materialismo feroz, devoraba también la espiritualidad de los judíos
afincados allí.
Y veremos más adelante, mida kenegued mida, los judíos que SE permitían
tal estado de cosas, serían condenados a desaparecer físicamente, es decir, no
sus costumbres, no su patria nacional, no su creencia, sino sus cuerpos (que en
este mundo, significa final del espíritu también).
Con todo esto que ya planteamos, la derivación casi necesaria es el decreto
de Amán.
Amán y sus malévolos planes no surgieron de la nada.
Fueron producto de las circunstancias, de la historia, del futuro que pretendían
para sí los judíos, de los propios deseos de Amán y sus compinches, etc...es
decir, Amán no es emisario del "destino", sino, hijo genuino de su
tiempo y de su realidad y de su personalidad.
Esto no excusa a Amán, sino, todo lo contrario.
Lo califica como completo responsable (consciente y atento) de lo que serían
sus acciones y anhelos.
Amán no es dirigido como marioneta por Dios, ni mucho menos es víctima del
destino que se debía cumplir (que no existe tal, pero como forma de
expresión me parece válida en esta oportundad).
Amán, en todo caso, era "víctima" de su propia perversión, y el
instrumento ocasional de la historia, es decir, sin Amán, seguramente hubiera
aparecido otro Amán.
Amán, los persas e incluso la mayoría de los judíos de aquella época, vivían
de acuerdo a la "lógica del materialismo" y no de acuerdo a la
"lógica de Dios".
De Amán y los persas se puede comprender, ¿pero de los judíos?
Y es aquí donde regresa el mida kenegued mida, si los judíos buscaban
ser parte del "consumismo", entonces, probarían ser
"consumidos"...
Si los judíos no entendían que era por milagro que aún preservaban su
existencia y su identidad (tanto personal como colectiva), pues pueblos más
numerosos y poderosas ya habían sucumbido, y preferían sentirse como parte del
materialismo y de las leyes de la naturaleza; entonces, Dios les daría el
gusto...llevándolos hasta el mismo borde del abismo, de la aniquilación
total...
Volvamos a lo oculto de la trama.
A pesar de que para nosotros ahora resulta tan evidente y lógico lo que
sobrevendría, los judíos de Persia y Media no presagiaban nada.
Mordejai era un funcionario de la corte.
Hadasá (más conocida como Ester) sería pronto la reina.
Los sabios judíos deportados, eran parte del plantel de consejeros del rey.
Los negocios marchaban bien.
Mandaban generosos aportes a la Madre Patria, al Templo.
Incluso eran invitados al tremendo bacanal del rey.
Eran judíos-persas (aunque en realidad debemos decir que eran "persas de
mosaica", en su mayoría) con un respetable orgullo de sí mismo y de su
situación.
Ningún nubarrón parecía oscurecer sus jardines de placer material...
Y sin embargo, una señal para quien la quiera ver.
¿Cómo explicar que una mujer (que según el midrash era casada) judía
observante (y bastante mayorcita, según el midrash) se presente a un
"certamen de belleza" para convertirse en reina de Persia, esposa de
un borracho idólatra?
¿Cómo esclarecer que Ester desposara al rey?
Una explicación es que no todas las mujeres se presentaban por voluntad propia
al "certamen de belleza", sino que eran brutalmente arrancadas de sus
hogares, y llevadas al harem real, y allí mantenidas y embellecidas hasta que
pasaran una noche con el rey; luego de lo cual, el rey decidiría su destino.
Tal parece que Hadasa (alias Ester) no tuvo más remedio que ser parte de
"Reina de Persia 485 AEC".
Y su elección como reina, no fue casual, no fue suerte, ni la mera pasión
encendida del rey.
Ella era de sangre real, era descendiente del rey Shaul de Israel.
Fue educada con el esmero propio de su linaje.
Pues, un rey oriental podía poseer muchas concubinas, de diversos estratos
sociales y culturales, pero, la reina, era otro cantar.
La reina debía ser REINA.
No bastaba con una bonita figura, sino que detrás debía haber toda una
preparación y un refinamiento apropiados, además de una excelente educación
que debía incluir el manejo fluido de varios idiomas.
Condiciones que poseía Ester.
Así pues, sexualmente el rey fue atraído por ella, pero, algo en su misteriosa
personalidad la convirtió en reina de los persas.
"El rey amó a Ester más que a todas las mujeres, y ella halló gracia y favor delante de él, más que todas las demás jóvenes vírgenes. Él puso la corona real sobre su cabeza y la proclamó reina en lugar de Vashti." (Ester / Esther 2:17)
Reina en lugar de Vashti, que como dijimos, era de estirpe de reyes, al igual
que Ester.
Ésta sí se adecuaba naturalmente al rol de emperatriz.
Podemos apreciar que las leyes de la "naturaleza" - materialismo, se
cumplen también en esta extraña elección: el rey queda prendado de "una
reina".
El eunuco Hegai encargado de las mujeres, también reconoce algo
"especial" en esa mujer.
Lo que aparece evidentemente como una atracción "natural", a los ojos
de Mordejai no tiene lógica, pues, ¿como una mujer que no quiere ser elegida
por el rey, es finalmente la escogida?
Es que, Mordejai se maneja con la lógica dada por Dios, la de la Verdad, la
Justicia y la Rectitud, y no le entra en la cabeza que alguien que no quiere ser
reina, deba ser la reina.
Esto no parece lógico...¿cómo podemos responder a esto?
A pesar de que Mordejai se adhiere con firmeza al estilo de vida judío, de que no quiere caer víctima del materialismo, y de que está muy orgulloso de su condición de judío, le aconseja a su prima (y esposa según algunos) que no revele su identidad nacional, su pueblo. Incluso el nombre judío de Hadasa (Mirta), es reemplazado por el muy idólatra y persa: "Ester".
¿Qué razones tuvo Mordejai para este extraño proceder?
Algunos opinan que fue "la mano de Dios" que tejía esta historia,
preparando el remedio antes de que se manifestara la enfermedad.
Otros consideran que incluso personas fieles al judaísmo, como Mordejai, no
pueden permanecer indemnes, sin ser influidos por el medio circundante.
Así pues, si el judaísmo era una "cosa" más que uno podía usar o
no usar, como un ropaje, entonces, que Ester no vistiera sus ropas judías por
un tiempo no la afectaría mucho...eso pensaban quizás...
Corto tiempo transcurre, y el remedio sigue siendo elaborado, en tanto
que el germen del mal esta listo para empezar a actuar.
Ahora, Mordejai merced a sus conocimientos de idiomas diversos, y a que se
apostaba en las cercanías del palacio imperial, consigue salvar la vida del
rey, en uno de esos habituales intentos palaciegos de golpe de estado.
Salva la vida del emperador, y como recompensa obtiene...nada.
Ni siquiera las gracias.
Ni un apretón de manos.
Mucho menos una fortuna.
¿No es extraño el proceder del rey?
¿No es más que provechoso para el rey beneficiar a quien le es fiel?
¿No es una buena política de estado agraciar a los aliados?
Al igual que frente a la elección de Ester, que no quería ser elegida, nos
encontramos ahora frente a un Mordejai dejado sin recompensa, cuando su proceder
fue más que meritorio...
Todo esto que aparece como ilógico, quizás lo entendamos más adelante.
Ahora, en la Meguilá aparece Amán (Cap. 3).
Ya algo dijimos acerca suyo, pero, agreguemos un poco a su caracterización.
Amán había sido elevado a un puesto de privilegio en el imperio, el cargo de
gran visir no era poca cosa.
Como tal, consiguió que se decretara que se lo tratara con los privilegios
propios de un monarca oriental, que los súbditos se prosternaran ante él, que
lo reverenciaran y temieran ¡como homenaje!
Una personalidad saludablemente constituida no siente la imperiosa urgencia del
halago externo, mucho menos del temor ajeno, o del goce ante la humillación del
Otro.
Sin embargo el poderoso Amán (que lo era y mucho), interiormente era muy
endeble.
Con el acto de menospreciar a todos los súbditos del reino, él conseguía un
fugaz sentimiento de ser superior, porque muy en el fondo, en un lugar
quizás inaccesible a su conocimiento, él sabía que era inferior.
Moralmente inferior, incluso prácticamente inferior a muchos de sus congéneres.
Y ese profundo conocimiento latente era una sombra imposible de eludir, pues,
era su esencia íntima.
Como no se puede huir de quien se es (exceptuando los que están en coma, y los
delirantes), Amán halló un método para mitigar su "dolor", cuando
las masas se arrodillaban a su paso, sus más íntimos temores no emergían
frente a sus ojos, permanecían operando "desde la clandestinidad".
Por lo que podemos cotejar, él no pretendía ser un dios, ni un héroe, tan sólo
ser de una raza superior, y ser él mismo superior al resto (incluso que el
mismo rey, aunque esto, claro está, jamás osó decirlo...sin dudas recordando
a Vashti...)
Y ante este ser enfermizo (ni orate, ni enfermo) surgió patente, a todas luces
y constantemente un estigma de su debilidad interior.
¿Qué o quién era el estigma, la marca?
Pues, indudablemente, Mordejai el judío, quien no se arrodillaba ni rendía
homenaje al perverso líder.
¿Por qué causa?
¿Acaso todos los judíos rechazaron inclinar la rodilla frente a Amán, o sólo
Mordejai?
Por lo que sabemos el único fue Mordejai, el resto de sus compatriotas hacía
como todos los súbditos.
Y la causa.
Podemos citar dos causas posibles (entre otras) y una que seguramente no es válida,
a pesar de ser la esgrimida comúnmente.
Empecemos por esta última.
Es común mal explicar esta negativa a arrodillarse afirmando que para el judío
está vedado el arrodillarse frente a otro ser humano.
Sin embargo, no hay ninguna prohibición para un judío de inclinar la rodilla
frente a un rey o a un líder extranjero, si esa es la ley del país, y si está
bien en claro que se hace como señal de respeto frente a un líder humano y no
como parte de una adoración a un dios falso.
Tomemos como ejemplo los faraones que se consideraban como dioses. Ante uno de
estos, un judío respetuoso de la Torá, ¿debía prosternarse o no? La única
respuesta es no, antes es preferible la muerte, pues, se estaría adorando con
el gesto de arrodillarse a un falso dios.
Pero, por ejemplo, si en Francia hubiera sido obligatorio inclinarse frente a
los reyes, no hubiera pesado prohibición alguna al respecto, pues todos,
incluidos los reyes, sabían que ellos no eran más que personas, quizás
puestas en el trono por algún dios, pero ellos no pretendiendo ser dioses.
Amán no pretendía ser dios, sólo un personaje digno de homenajes reales.
Por lo tanto, en principio decir que los judíos, o más precisamente Mordejai,
no se inclinaban porque es lo que dice la Torá, es una explicación incorrecta.
Veamos entonces dos de las correctas.
La primera. Mordejai sabía la ascendencia de Amán, sabía que era del pueblo
de Amalec, y como veremos un poco más adelante; jamás Mordejai (ni ningún
otro judío) debería mostrar la más mínima señal de respecto por un
amalecita.
La segunda. Amán llevaba colgado de su cuello, en su pecho, la imagen de un
dios pagano. Cuando las personas se arrodillaban ante Amán, también lo estaban
haciendo ante su dios. Mordejai era estricto en lo relativo a la adoración
pagana, y por eso, se negó a arrodillarse.
Los otros judíos no fueron tan estrictos, porque como ya vimos, no contaba para
ellos con tanta validez la Torá y las mitzvot, siendo más significativo
agradar a las autoridades, que buenos beneficios materiales eso reportaba.
La mayoría del pueblo judío de aquel entonces, estaba enfrascado en un
pertinaz proceso de asimilación, hasta el punto de encontrar excusas para
homenajear a un amalecita, e inclinarse ante sus dioses.
Existen otras evidencias de asimilación, pero, quizás en otro momento las
mencione. Pero, lo que no debemos dejar de lado, es que parece que siempre que
se intenta asimilar el Pueblo judío, las reacciones de sus conciudadanos son
contrarias, les niegan a los judíos el derecho a dejar de ser diferentes...
Volviendo a la débil estructura de personalidad de Amán, mientras todos se
arrodillaban frente suyo, sus angustias permanecían ocultas, pero la
"arrogante" actitud del judío Mordejai lo denunciaba como lo que era,
un advenedizo y débil sujeto.
Esa denuncia involuntaria provocó en Amán en principio la negación del
asunto, pues si leemos la Meguilá, los que se percatan de las actitudes de
Mordejai son los guardaespaldas de Amán y no éste.
Pero, cuando estos guardias interpelaron directamente a Amán, es decir, cuando
la realidad lo golpeó de lleno, su angustia se transformó en odio, sus temores
en violencia, su miedo íntimo en seudo arrojo extremo...
Antes de continuar con las reacciones de Amán, estudiemos un poco más el
tema de las relaciones entre Amán y Mordejai.
Ellos no son figuras simbólicas extrañas entre sí.
Amán desciende de Agag el rey de Amalec.
Y Amalec son por definición los que odian a los judíos. Y como todo odio, no
está fundamentado en razones, sino en sí mismo. Odio por el odio. Ataques por
el placer de destruir a quien se odia. Y quizás se lo quiera racionalizar (como
pretenden los nazis actuales o los desgraciados del pasado) e incluso
justificar, pero, el odio, es odio, sin razones, sin razón, ni bases
justificables...
Por su parte, Mordejai es de la estirpe del rey Shaul de Israel.
Shaul, desoyendo las órdenes directas de Dios, y lo ordenado en la Torá (Shemot
/ Éxodo 17:14-16), le perdonó la vida a Agag (I Shemuel / Samuel 15:8,9).
Esto le valió a Shaul perder su trono, y que su descendencia no siguiera
gobernando sobre Israel. (Como vemos por la acción tan equivocadamente generosa
de Shaul, a pesar de que es una mitzvá para el judío aniquilar todo lo que sea
Amalec, no se fundamenta sobre el odio, es decir, sobre lo irracional y dañino
en sí mismo, sino en razón a la auto-defensa, a preservarse de un enemigo
real. A veces ser bondadoso es muy malo).
Al parecer, quedó como tarea pendiente para la familia de Shaul, hacerse
cargo de los descendientes de Agag. Nuevamente decimos, no por odio hacia
Amalec, sino como defensa, y ya la Meguilá se encarga de mostrar esto
claramente.
¿Sobre qué motivo basó Amán su deseo de aniquilar a TODO el pueblo judío?
Si leemos el relato, veremos como el odio no tiene razones, y cómo sí busca
excusas para hacerse más "limpio" frente a la opinión pública.
"Cuando Amán vio que Mordejai no se arrodillaba ni le rendía homenaje, Amán se llenó de ira. Pero tuvo como poca cosa echar mano sólo sobre Mordejai, pues ya le habían declarado cuál era el pueblo de Mordejai. Amán procuró destruir a todos los judíos, el pueblo de Mordejai, que estaban en todo el reino de Ajashverosh." (Ester / Esther 3:5,6)
¿Cómo sabemos que es odio?
Pues, un judío hace algo que lo disgusta (por decir algo) y Amán transforma su
enojo personal en deseo de destrucción colectiva.
¿Qué impulsaba a Amán en esa masificación del "castigo" sino el
odio?
El odio, como dijimos, no cuenta con sustento en la lógica ni en la razón.
El odio se apoya en sí mismo.
Así pues, tenemos a un temeroso Amán, que es enfrentado con su yo débil por
las actitudes de Mordejai.
Surge la angustia ocultada a gran costo, transformada en odio a una persona.
Pero, si ese odio personal fuera dirigido exclusivamente contra Mordejai, el
estigma representado por éste sería visible para todos los persas. Pues, nadie
dejaría de preguntarse: '¿qué temor tiene Amán para ensañarse así contra
un sujeto amable? ¿No será que temía no alcanzar el nivel de ese judío? ¿Es
que Amán es tan digno de homenaje para que todos lo reverenciemos?'
Y dudas por el estilo que terminarían por hacer público y visible, lo que Amán
incluso se ocultaba a sí mismo...
El odio ancestral de Amán se sumó a su miedo personal.
Y encontró la forma de "matar dos pájaros de un tiro".
Ensañarse sólo con Mordejai no le era personalmente conveniente.
Pero, eliminarlo a él, en tanto que eliminaba a los judíos, era doble
ganancia.
Y esto, no es una justificación, pues, ¿dónde está la justicia en aniquilar
a toda una nación para mantener encerrado en el inconsciente la propia
impotencia?
Ya vimos que las conductas de muchos judíos no eran las más adecuadas a su
condición de tales, pero, eso no ameritaba una destrucción total.
Ni era Amán el más indicado para decidir que era judaicamente correcto o no.
Eso es cuestión de Dios y de los judíos.
Por lo que, debemos considerar el tema del "castigo" desde al menos
dos perspectivas.
Una es el de la relación especial que existe entre Dios y el Pueblo de Israel.
La otra, es la de Amán.
Sobre Dios, no sabemos que opinaba sobre el auto-exilio de los judíos, pero, la
advertencia de Amán sobre ellos es una señal muy clara para nosotros, que
vemos las cosas con la perspectiva que nos dan los siglos. Los judíos no
estaban haciendo como correspondía las cosas, por eso, las advertencias sonaban
con fuerza, y los miedos golpeaban a las puertas. Su asimilación a la cultura
persa los estaba matando "judaicamente", y eso aproximaba la
aniquilación corporal también.
Y, para Amán, la cuestión no era castigar a los judíos por su falta de
"hacer judío", sino, por el hecho de "ser judíos".
Para los ojos de Amán, haber nacido judío ya implicaba ser meritorio a la pena
capital.
Recurre entonces Amán a un dios de su creencia, al dios que nosotros
conocemos gracias a los romanos como "la diosa fortuna".
Echa suertes, para que sea ese dios el que decida la mejor oportunidad para
aniquilar a los que indican (con su mera existencia) su falta.
Amán quiere que sea una "batalla cósmica", todo la corte de sus
dioses contra el Dios solitario de los judíos.
Y Amán prefiere recostarse en un dios para acometer la titánica tarea de
acabar con el Pueblo de Dios.
Su odio, que ya dijimos es irracional, no opera irracionalmente, sino que con método
y cierta "lógica".
Primero, confía en sus dioses.
Luego, la fecha del exterminio es decidida para cuando mejor sea factible, es
decir, cuando "el destino" lo disponga. (Incluso la fecha para echar
la fortuna fue premeditada, pero, eso lo estudiaremos más adelante).
Y más tarde, elabora la propuesta para presentarle al rey. Pues, si va con ira
y enojo a reclamar esa atroz matanza ante Ajashverosh, sabe que no obtendrá
nada. No. En su odio el reconoce que precisa método, disciplina, orden y
planeamiento "científico".
Esta es la forma que verbaliza su odio profundo, cómo intenta justificarlo racionalmente y los métodos para hallar adherentes a su causa maldita:
"Luego Amán dijo al rey Ajashverosh: --Hay un pueblo disperso y diseminado entre los pueblos en todas las provincias de tu reino, cuyas leyes son diferentes de las de cualquier pueblo. Ellos no observan las leyes del rey, y el rey no tiene ventaja en dejarlos vivir. Si al rey le parece bien, decrétese por escrito que se los destruya, y yo pesaré en manos de los administradores de las obras públicas 10.000 talentos de plata, que serán traídos a los tesoros del rey." (Ester / Esther 3:8,9)
Ajashverosh escucha una exposición aparentemente lógica.
Existe el "problema judío", y Amán conoce "la solución
final".
Según Amán, ¿cuál es el problema judío?
- Que es UN pueblo.
- Que está disperso.
- Que está diseminado.
- Con leyes propias.
- Con leyes diferentes.
- Irrespetuosos de las leyes reales.
- El rey nada gana con que ellos vivan.
Lo único cierto en todo esto es que los judíos tienen diferente estilo de
vida al del resto de las naciones.
Es decir, el único crimen es ser diferentes.
¡Buen pretexto éste! Y sin embargo, aunque suene tan estúpido, permitió el
genocidio perpetrado por los nazis sobre los judíos, el apartheid, la matanza
de cientos de miles de armenios, limpiezas étnicas, esclavitud...
El odio a lo que es diferente es suficiente pretexto para el que odia.
¿Es que odia al diferente, o es su odio fundado en el temor a reconocerse él
mismo como diferente e inferior?
Aquellos judíos de Persia, como dijimos, eran extremadamente respetuosos de las
leyes persas, amaban al imperio persa, a su rey, a los súbditos.
¡Si hasta preferían Persia en lugar de Yehudá!
¡Si hasta festejaban en la celebración de su propia derrota, en honor del rey
persa!
No, sin dudas que los judíos eran fervientes persas. Incluso la historia lo
demuestra, pues fueron algunos judíos los que ayudaron a los persas a
conquistar Babilonia, pues Babilonia había destrozado a la nación judía, los
aniquiló y esclavizó; pero Persia, era para los judíos una liberación.
Pero, como dijimos, la lógica del odio, es ilógica.
Proyecta en el objeto odiado los propios sentimientos.
Sin dudas era Amán el que menospreciaba las leyes del rey.
Era Amán el que se sentía diferente a lo que el pueblo del rey era.
Era Amán el que en nada beneficiaba al rey, mientras se aprovechaba en cada
ocasión que podía.
Es decir, Amán creó un mito, utilizando la peor de las mentiras: medias
verdades.
Usó la verdad de que los judíos eran un pueblo distinto.
Usó la verdad de que poseían leyes propias.
Incluso de que había judíos que no respetaban ciertas leyes del rey, como lo
era Mordejai que no se inclinó ante él, como era orden del rey.
Pero luego, achacó a los judíos cosas que se aplicaban a su persona, que ya
mencionamos, creando así esa enorme distorsión de la realidad.
Y este método de generalizar una particularidad de una persona o de un grupo
específico sobre todo un pueblo es parte habitual de todos los
"racismos", de todos los odios.
Los antisemitas de todos los tiempos dirán: "todos los judíos son
usureros"; "todos los judíos hieden"; "todos los judíos
esto o aquello", etc.
Y puede ser cierto que haya judíos usureros, hediondos, estos o aquellos, pero,
¿son todos?
Para el que odia, SÍ lo son.
Como dijimos, el odio se basa en sí mismo, todos los pretextos que da, son
precisamente eso: pretextos. Así que, cuando nos encontramos con una persona
que generaliza un carácter o un vicio sobre todo un pueblo, una raza, una nación,
un conjunto heterogéneo de personas, podemos concluir 3 posibles razones:
1- lo hace por ignorante;
2- por imbécil;
3- por odio.
Y generalmente las 3 causas se juntan en la misma persona.
Así pues, el que doce por ejemplo: "todos los negros...", "todos
las rubias...", "todos los gallegos...", "todos los judíos...",
etc., o es un ignorante que habla por el placer de oír su voz; o es un imbécil
que habla por el placer de oír estupideces; o es una persona cargada de odio,
que habla para dañar...
Amán, sin dudas, era del tercer tipo.
Y como no tenía un pelo de tonto, tuvo que agregar un elemento al "lavado
de cerebro", pues, si la espuria historia sobre los judíos apátridas no
convencía al (a veces brillante) rey, había algo que lo llamaría a su bando:
la promesa de riquezas.
Amán era como si le dijera al rey: este es el problema, y esta es la solución.
Pero, si no te interesa, déjame hacer lo que quiero, y a cambio te llevarás
mucho dinero...
Y ocurrió algo que quizás en un primer momento resulte ilógico (otra cosa
más en la Meguilá): Ajashverosh apreció las razones "racistas" -
"lógicas" de Amán, en lugar del dinero ofrecido.
Veamos si lo podemos entender.
Ajashversoh no precisaba realmente el dinero, era inmensamente rico.
Pero, él, de modo similar a su delfín Amán, era bastante endeble
interiormente.
No podía tolerar la idea de que su palabra fuera desobedecida, pues eso
implicaba que no era lo suficientemente poderoso. (Recordemos a Vashti
nuevamente).
Y quizás, tenía una cierta inquina hacia los judíos, como ya pudimos advertir
al comienzo de este artículo. Lo suyo contra los judíos no era algo "genético",
al estilo de Amán, sino que se asentaba en el mismo sentimiento de inferioridad
suyo recién mencionado. Pues, los judíos, aunque mejor sería decir, el Dios
que defendía a Israel, era una fuerza poderosa que podía disminuir su propio
poderío, por lo cual, sin odio y sí con temor, él consideraba a los judíos
como una señal de que en el Mundo había un Rey sobre todos los reyes, incluido
Ajashverosh.
Así pues, al rey lo venció la lógica "consumista", que afirma que a
veces es preferible perder un peón que recibir un jaque mate...'que mueran los
judíos, no me molesta, no es lo que yo hubiera preferido, pero...'...y...'no,
no quiero dinero, lo mío no es un juego sucio, sino otra cosa...', tales
pudieron haber sido los pensamientos íntimos de Ajashverosh.
Que no por ser débil y torpe a veces es menos culpable por estas terribles
decisiones...tan terrible como darle carla libre a Amán para hacer lo que
quiera, al entregarle su anillo real.
Tenemos entonces, que el campo se está configurando para hacerles una
macabra broma a los judíos.
Ellos quieren asimilarse (ya desde la época de Babel, e incluso antes),
entonces se los acusa de ser diferentes.
Ellos prefieren Persia, entonces añorarán haberse quedado en su Patria.
Ellos aceptan inclinarse frente a Amán y su dios, entonces el amalecita los
quiere eliminar.
Ellos aman el dinero fácil de Persia, entonces el rey los "vende"
gratis.
Ellos aman al rey, entonces son acusados de odiarlo.
Ellos no se meten en problemas, entonces son considerados "EL"
problema.
Ellos prefieren la lógica materialista en lugar de la de Dios, entonces son
juzgados por Dios bajo los términos de la ley materialista (y salvados bajo la
ley de Dios).
Los métodos de Amán son prototipo de los que aún utilizan los que odian a
los judíos, y en general de las personas que basan su vida en el odio a cierto
grupo distinto (sean negros, orientales, latinos, gays, etc.)
Si analizamos a cada esbirro nazi de los actuales, por ejemplo un skin-head,
veremos comúnmente (no siempre) que es una especie de Amán.
Personalidad débil detrás de símbolos exteriores de fortaleza.
Agrupación entre similares para reforzar sus murallas contra la angustia del
"estigma".
Elección de uno o varios grupos antagónicos, tomados como chivo expiatorio,
por ser, en principio, los que indican la angustia escondida en ellos mismos
(los nazis, del ejemplo), y que ellos temen a ultranza.
Generalización de defectos del grupo "expiatorio" (reales o ficticios
de alguno de sus miembros, pero que suelen ser corrientes dentro del grupo de
los que odian).
Desvalorización sistemática de ese grupo (lo que no vale, parece que no
afecta, por lo tanto, no acusa la propia condición endeble).
Uso de la violencia (de esa forma no se enfrentan a sus temores, los espantan o
los aplastan).
Uso de consignas, signos, himnos, frases, "mágicas" que los dotan del
poder íntimo del que carecen.
Deseos de aniquilar físicamente y moralmente a sus enemigos (aunque por otra
parte los precisan como estímulo para la propia supervivencia como grupo unido
por el odio).
Proyección masiva sobre los "chivos".
Quizás la enorme posesión de riquezas y de salud, y de todo tipo de bienes,
pero la constante insatisfacción cuando presentifican a lo que odian...pues
recordemos, lo que odian en realidad no es algo externo a ellos, sino su propia
bajeza y debilidad...lo que odian en el mundo material, no es más que un símbolo
de eso interno, en definitiva "un chivo expiatorio"...
Falta de lógica interna en sus acciones, aunque puedan operar calculadoramente
y metódicamente.
Todos estos son algunos de las características habituales entre los
"racistas", que como dijimos, no le faltaban a Amán...
Volviendo a la historia.
El temor, o la malicia, o la torpeza, de Ajashverosh lo mueve a entregarle todo
el poder, representado en su anillo, a la persona que realmente lo desprecia en
grado sumo.
¿Esto es parte del designio de Dios?
Sin dudas.
Pero también es el paso necesario y lógico en la trama que estamos develando.
Nuevamente podemos apreciar que no existe un "destino" que esté
llevando a los personajes como títeres, sino que es una compleja historia en la
cual, todos los participantes tienen su parte en la creación de la misma.
El día elegido por Amán para convocar a la "fortuna" para que decidiera la "suerte" de los judíos, ¿fue casual?
"Entonces fueron llamados los escribas del rey, el día 13 del mes primero, y conforme a todo lo que mandó Amán se escribió..." (Ester / Esther 3:12)
El mes primero es Nisán.
El día 13, ¡dos días antes de Pesaj!
¿Es casualidad?
La respuesta evidente es: NO.
Pesaj es la festividad que rememora la liberación física de los israelitas de
su primera esclavitud (en Mitzraim).
En general, dos días antes de Pesaj en las casas se corre para preparar los
numerosos aspectos de esta fiesta; y a pesar de la fatiga de la labor, se puede
reconocer un espíritu de gozo en los judíos. ¡Recordar la Liberación y el
comienzo de la aventura de ser un Pueblo, es grato!
Pero, gracias a Amán:
"Los mensajeros salieron apresurados por mandato del rey. El decreto fue promulgado en Shushán, la capital. Luego el rey y Amán se sentaron a beber, pero la ciudad de Shushán estaba consternada." (Ester / Esther 3:15)
en la ciudad de Shushán, para los judío reinó la consternación...de
pronto se había decretado sobre ellos la muerte, la aniquilación, el
exterminio de TODOS los judíos.
Cosa ilógica, ¿consternación? ¿Tribulación? ¿Pesar?
¿No sería una reacción más humana el llanto? ¿El grito desesperado? ¿El
estremecimiento? ¿El terror?
Pero, no. La Meguilá dice nabojá, "consternada".
Es que, realmente esa debía ser la reacción de aquellos judíos.
¿Por qué?
Pues, porque jamás hubieran esperado ese indigno decreto.
Ellos eran los persas más patriotas y fieles de todos.
Leales en grado sumo a su rey y sus leyes.
Y ya lo habían demostrado.
Es más, tan leales a Persia que incluso festejaban su propia humillación.
Tan leales a Persia que incluso preferían asimilarse completamente a su
cultura, y abandonar las diferencias que los distinguían del resto de sus
conciudadanos.
Claro, había "extremistas" entre los judíos, como Mordejai, pero era
las excepciones que hacían más valiosa y visible la regla.
Por eso, sí que es lógica la reacción que menciona la Meguilá: los judíos
nunca hubieran esperado esa infame ley en su contra...
Volvamos a los mensajeros del rey que salieron "apresurados", para
que en cada poblado de las 127 naciones la noticia llegara con prontitud, y no
hubiera judío que para Pesaj no supiera cual era el "destino" que Amán
les había preparado.
Amán en su odio, y en su bajeza moral, y en su debilidad estructural, ya estaba
gozando...con once meses de adelanto su victoria ya hacía sonar sus redoblantes
triunfales.
No habría para los judíos gozo y luz y alegría en estos once meses que los
separaban de la terrible masacre, por lo tanto, no habría posibilidades que se
descubriera quién era realmente Amán...
Entonces, inmediatamente, el mismo día:
"Mordejai supo todo lo que se había hecho..." (Ester / Esther 4:1)
¡Que brillante Mordejai! Porque es tan difícil saber lo que se había
hecho, diría quien lee la Meguilá por arriba...
Mas, nuevamente la apariencia esconde algo.
¿Qué supo Mordejai?
"Todo lo que se había hecho".
Se le "prendió la lamparita" y descubrió de pronto lo que la trama
estaba ocultando, a saber:
- la verdadera razón por la que Ester fue hecha reina;
- las verdaderas motivaciones que escondía el edicto del rey (edicto de Amán)
(que ya vimos hasta este punto: asimilación, tensiones antijudías previas,
personalidad enfermiza del premier Amán, etc.);
- la mida kenegued mida que estaba operando y que aparecía al ojo que la
quería ver ;
- la solución a este "presagio" perverso.
Y ¿cual es esa solución?
Mordejai supo que era desechar la lógica materialista, y comenzar a conducirse
plenamente dentro de lo que Dios requiere del judío.
Y, sugerentemente, no sólo este cabal hombre entendió lo que le cabía de
responsabilidad a Israel por esta cruel sentencia, sino, los propios judíos,
quienes:
"...tenían gran duelo, ayuno, llanto y lamentación; cilicio y ceniza eran la cama de muchos." (Ester / Esther 4:3)
Abandonaron espontáneamente el lujo, el gozo de la materia vacía de
contenido, las fiestas bochornosas, la tranquilidad del estómago lleno y el espíritu
seco...y se pusieron de duelo.
Duelo, seguramente por su futura masacre.
Pero, ¿no habrá sido también por su vida despilfarrada?
No sólo un duelo por lo que vendría sino por lo que fue y no fue...
Y, ¿cómo sabemos que abandonaron la lógica materialista basados en este
breve pasaje?
Porque ninguno acudió a la reina judía en busca de auxilio.
Sus hermanos judíos conocían su origen, sabían de su dignidad imperial, y
hubiera sido "lógico" recurrir a su poder...pero nadie lo
hizo...pues, reconocieron que debían volverse al Eterno en busca de perdón y
salvación y no a Ester...
Es más, incluso Ester era ignorante de lo que estaba desarrollándose bajo sus
propias narices.
Y ni siquiera pudo aproximarse su tío Mordejai a contarle las cuitas del
pueblo, pues, adrede había vestido ropas de duelo, impropias para apersonarse
en la corte...pero más que propicias para constreñir el corazón en busca de
la misericordia de Dios...
Tan ilógica era la conducta de Mordejai (desde el plano materialista), que según
el Midrash (Ester Rabbá IX:4 4), en esos momentos de enorme crisis, lo
que hizo fue enseñar a 22000 niños las leyes para las ofrendas de alimentos en
el Templo, mientras lloraban y ayunaban dolorosamente.
¿Para qué servía eso?
El Templo estaba muy lejos, de nada auxiliaría a los judíos saber esas leyes
en esta situación.
¿Por qué no enseñó acerca de Teshuvá (digamos: arrepentimiento), o de
Tzedaká (digamos: caridad), o de Tefilá (rezos), que son más propicias para
recibir la misericordia divina?
¿Qué ganaban con aprender acerca de ofrendas?
Ganaban aproximarse al Eterno.
Pues, si sus padres hubieran permanecido fieles a Él, ahora ni uno de ellos
estaría en este predicamento.
Así pues, era hora de aprender Torá lishmá, Torá por sí misma, sin
esperar retribución a cambio. Porque, el que nada (absolutamente nada)
espera a cambio del cumplimiento de las mitzvot, es el que recibe beneficios por
parte de Dios.
Y, en nada los beneficiaba materialmente las leyes sobre ofrendas, estaban
estudiando Torá, por el placer del estudio de la Torá...mientras sus inocentes
llantos quebraban el corazón de Dios (¡es una metáfora!).
Al mismo tiempo, Ester se preguntaba qué andaba mal con Mordejai. Él nada
le había comunicado, así pues se hizo informar a través de Hataj.
Según algunos, Hataj es el famoso Daniel, el mismo que un libro del Tana"j
lleva su nombre. El siervo de Dios. El que profetizaba. Y ahora fue
intermediario entre el Mordejai y su prima, para hacerle llegar a ésta las
noticias aterradoras.
Y Ester responde con lógica palaciega: ella nada puede hacer, sin que el rey la
llame a su presencia.
Parece que Ester no entiende cabalmente la importancia de su situación.
Pero, su entendimiento no está alterado, su comodidad en el palacio no afecto
su moralidad, y rápidamente entendió cuando Mordejai la increpó:
"(13) Mordejai mandó que respondiesen a Ester: ''No te hagas la ilusión de que porque estás en el palacio del rey, serás la única de todos los judíos que ha de escapar. (14) Si te quedas callada en este tiempo, el alivio y la liberación de los judíos surgirán de otro lugar; pero tú y la casa de tu padre pereceréis. Y quién sabe si para un tiempo como éste has llegado al reino!'' (15) Ester dijo que respondiesen a Mordejai: (16) ''Ve, reúne a todos los judíos que se hallan en Shushán, y ayunad por mí. No comáis ni bebáis en tres días, ni de noche ni de día. Yo también ayunaré con mis damas e iré así al rey, aunque no sea conforme a la ley; y si perezco, que perezca.'' (17) Entonces Mordejai se fue e hizo conforme a todo lo que Ester le mandó." (Ester / Esther 4)
Y ahora Ester abandona su lógica materialista y comienza a actuar ilógicamente,
es decir, de acuerdo a la voluntad de Dios.
En lugar de embellecerse para atraer la atención pasional del rey, ayuna y hace
duelo durante 3 días.
Si Ester hubiera seguido confiada en la lógica materialista, se hubiera
arreglado, puesto hermosa, y no afeado con el ayuno.
Lo que ocurre es que prefirió engalanar su espíritu entregándose a Dios, en
lugar de caer en el recurso ya oxidado del materialismo...
Y es menester que consideremos otro aspecto falto de aparente lógica en este
tramo.
Al ser decretado por Ester un ayuno colectivo de tres días, estaba implicando
que debían ayunar en un día en el cual está terminantemente prohibido
hacerlo: el primero de Pesaj.
No sólo no está permitido ayunar, sino que es una orden de Dios comer.
¿Cómo se permitían pecar de esta manera si buscaban el perdón de Dios?
¿Pretendían cambiar las palabras de la Torá?
¿Preferían ser apostatas en este momento de crisis?
Absolutamente no.
Su intención era ser fieles a Dios, como hasta ahora no lo habían sido.
Por lo cual, debemos hallar lógica en esta sinrazón.
El Midrash (Ester Rabá VIII:7 7) dice que Mordejai efectivamente objetó que se
ayunara en Pesaj. Y Ester le enseñó que si desaparecían los judíos,
desaparecía Pesaj.
Mordejai tuvo que aceptarlo, pues, no era la muerte de un puñado de personas,
ni el sufrimiento de todo el Pueblo, sino la eliminación total, algo que
ameritaba incluso estas medidas drásticas, imposibles de aceptar en cualquier
otra situación.
Y así, con el paulatino retorno de los judíos a Dios, Éste los liberó
nuevamente, tal como había ocurrido más de mil años antes en ese mismo día...
Es que nada hay de casua-lidad, sino todo es causa-lidad, y Purim, la fiesta de
"las suertes", nos viene a mostrar que no existe tal cosa como
"el destino" o "la suerte"...
En el mismo midrash se nos muestra una faceta psicológica de Mordejai, muy
saludable por cierto.
¿Acaso no sintió culpa por ser el "responsable" de los designios de
Amán?
Pues, sí, pero entendía que esa culpa no tenía razón de existencia, pues fue
guiado por los dictados puros de su corazón en pos del cumplimiento de las
mitzvot, y no por jactancia u orgullo.
Mordejai actuó como debía hacerlo, y si sus actos provocaron la manifestación
del odio de Amán, es plena responsabilidad de Amán y no de Mordejai...de lo
contrario, es como si dijéramos que la culpa del robo al banco fue del banco, y
no de los ladrones, por tener tanto dinero junto...
Pasados los tres días, y ya con la plena atención del rey, Ester nuevamente
actúa fuera de la lógica materialista, porque cuando podía apelar a favor de
su pueblo, prefiere invitar al rey y al perverso Amán a un banquete.
Y tras cautivar completamente el corazón del rey, y tenerlo a su disposición,
incluso para liberar a su pueblo de la masacre, lo único que pide, oh ilógica
mujer, es que se reúnan nuevamente mañana, para un nuevo banquete...
¿A qué tanta demora?
¿Por qué hace todo lo posible por agradar al ego "fláccido" de Amán?
Precisamente para esto último.
Para que el yo débil pero inflado de Amán muestre su verdadera naturaleza
"racista", y despectiva ante el rey...
Ester supo ser una buena sicóloga de Amán, y encontró cual era el origen de
la crisis, y su modo de solucionarlo.
Así que, por una parte el retorno de los judíos al "camino de Dios";
por el otro, que Amán no tuviera excusas y se mostrará sin careta frente al
rey...
Y como los caminos de Dios son misteriosos, y Sus milagros
"naturales" más misteriosos aún, esa noche Ajashversosh (quizás
demasiado lleno de los manjares ofrecidos por la reina) no pudo conciliar el sueño.
Y recurrió a la lectura de sus crónicas reales. Esta acción nos permite
suponer otra razón válida para su falta de sueño, él buscaba en los hechos
del pasado la causa de sucesos actuales.
Como dijimos, el rey a veces era sumamente torpe, pero a veces era brillante.
Ahora fue, inconscientemente, brillante.
Pero, ¿qué lo había perturbado para pretender hallar respuestas en el pasado?
La ilógica respuesta de Ester que no aceptó recibir como regalo la mitad de su
reino.
En la lógica materialista de Ajashverosh, ese era un ofrecimiento imposible de
rechazar.
¿Quién, en su sano juicio, rechaza ser dueño de la mitad del mundo?
Es esa acción no materialista de Ester la que provocó el nerviosismo nocturno
del rey.
Quien encontró en las crónicas del pasado que en verdad existen personas con
valores superiores al materialismo, que son capaces de ser dignos servidores del
rey sin recibir nada a cambio, como Mordejai.
Pues, "el destino" (que en realidad no existe y Purim es su demostración,
por lo que debemos leer aquí "la Providencia") hace que sea leído el
pasaje en el cual se refiere la salvación de su vida por parte de Mordejai el
judío. El cual, nada recibió por su noble acción. En tanto que otras personas
sólo sirven a cambio de beneficios personales, como Amán.
Comprendió el rey que Ester había actuado más como judía que como amalecita.
Comprendió que la materia es importantísima pero puede ser trascendida.
Así que, ya tranquilo con su conciencia, decidió premiar al merecedor de
premios, de la única manera que el conocía, a través del materialismo...
Ajashverosh entonces decidió premiar a aquel que nunca exigió nada por serle
fiel siempre, a Mordejai.
Mientras tanto, el orgulloso Amán ordenaba la construcción de una horca, para
colgar bien alto y a la vista de todos a su más odiado enemigo, al estigma
entre los estigmas, a Mordejai...
A la mañana siguiente el presuntuoso Amán supone que está por alcanzar la
gloria con las manos, pues es convidado de lujo en los aposentos reales, está
listo a colgar a su enemigo, y el rey parece querer elevarlo aún más en
dignidad y en rango.
Y es entonces, cuando la historia tejida en el silencio, se comienza a expresar
a grandes voces...
En el fragmento quizás más famoso de la Meguilá, Amán debe pregonar que
Mordejai era el personaje más querido del rey, mientras lo llevaba sobre el
caballo del rey, vestido con toda la dignidad real...
Curiosa y burlesca escena.
El que por angustia pretendió liberarse de lo que lo señalaba como inferior,
debe exhibir el estigma engalanado, anunciarlo a viva voz, publicar su propia
flaqueza y debilidad...ese, parece ser "el destino" de los que se
esfuerzan en acallar por la violencia las fuerzas del odio en su inconsciente...
Y el midrash refuerza esta visión íntima del drama de Amán.
La hija de Amán quería también burlarse del odioso Mordejai, para lo cual,
subió al segundo piso de su casa, con heces y orines en una jarra, dispuesta a
lanzarlo sobre la cabeza del judío.
Ella supuso que el engalanado como rey era su padre, en tanto que el pregonero
era el judío.
Así pues, lanzó la inmundicia sobre la cabeza de su padre.
Como vemos, lo que más teme el que odia, es lo que finalmente surge con todo
esplendor...
Y ¿qué pasó con la hija?
Cuando reconoció la cara de su padre embadurnada en mugre, se lanzó al vacío
pereciendo...
Ellos se labran su propio "destino"...ese es el mensaje de Purim...y
ocasionalmente lo pueden verbalizar, como hiciera Zeresh (esposa de Amán) y sus
amigos en el "racismo".
¿Alguna vez consideraron los 2 banquetes ofrecidos por Ester como sedarim de
Pesaj?
Pues, eso eran realmente.
En el segundo seder, Ester cuenta la historia de Pesaj en primera persona,
cumpliendo fielmente lo que es parte de Pesaj, "revivir cada uno la Salida
de Mitzraim", bebe vino, come lo que debe comer, se reclina en su
asiento...cumple con los rituales de Pesaj, pero ya no como símbolo o mero
recordatorio, sino que es verdaderamente parte de la vida actual de Ester, y de
su pueblo.
Pueblo de pertenencia que le es revelado en este momento al rey.
Y, simultáneamente el dedo acusador, lo que tanto temía Amán, cae con todo su
peso sobre él.
Así que Amán en el mismo día sufre dos embates de lo que lo angustia.
Primero paseando públicamente a Mordejai, luego, siendo acusado ante el rey por
Ester.
Un dejo de piedad nos puede recorrer ante el sentenciado Amán, pero, él lejos
de amilanarse, pedir clemencia, o reconocer su impotencia, persiste en su
perversión, en su odio:
"Cuando el rey regresó del jardín del palacio a la sala donde estaban bebiendo vino, Amán se desploma sobre el diván en que estaba Ester. Entonces el rey le dijo: --¿También ha de violar a la reina, estando yo en la casa? En cuanto salió la palabra de la boca del rey, le cubrieron la cara a Amán." (Ester / Esther 7:8)
Veamos la acción que se desarrolla ni bien regresa el rey luego de meditar y
ya casi aplacado el primer impacto: Amán se desploma sobre el diván, es decir,
sobre Ester que estaba recostada en el mismo.
¿En que tiempo verbal está?
Presente (si bien en traducciones no muy fidedignas de la Meguilá puede estar
escrito en alguna forma activa o pasiva del pasado).
Amán en ese momento cae sobre Ester.
El midrash dice que un ángel lo empujó.
Nosotros sabemos que "ángel" es una forma de expresión, que bien
puede representar una fuerza interior de la persona.
¿Qué fuerza es esta que está operando exactamente en ese momento?
El inconsciente de Amán.
Puede que lívido haya rogado clemencia, pero, su desprecio guardado en el
interior de su personalidad es más poderoso, y se desploma sobre Ester, y no
ante ella.
El rey sabe muy bien identificar qué es un gesto sexual, de uno accidental, y
no duda en atribuir a la acción de Amán el sentido de violación sexual, de
violencia...
Amán, incluso en la derrota, no puede con su "genio", y en lugar de
buscar enmendarse, lo que encuentra es mayor odio que le brota
inconteniblemente.
Y el final del odio es la perdición.
Inmediatamente que fuera desenmascarado en toda su maldad, es su rostro
cubierto.
Indudablemente, la viva imagen de la maldad, del odio, es insoportable para
quien también carga latente algo de odio, tanto como lo es para la víctima del
mismo.
Algunos quieren entender este gesto de cubrirle el rostro, como una sentencia de
muerte.
Pero, de seguro que el aspecto simbólico de querer ocultar el rostro de la
maldad detrás de un antifaz de olvido y negación es bastante más apropiado
con lo que venimos estudiando.
El final de Amán es justamente el que tenía planificado para el bondadoso
Mordejai.
Mida kenegued mida. La justa retribución.
El castigo justo, pues fue planificado con esmero para atormentar al inocente,
pero la ulterior víctima fue el poseedor del odio.
Y esto es parte del naafoj hu, del hecho que la historia se dio vuelta.
Lo que aparecía para ser un día negro y de luto, se transformó en día
perpetuo de gozo y luz para los judíos.
Quien preparara la horca fue ahorcado.
Quien buscaba la victoria pérfida, sufrió la derrota más memorable.
Quien se manejaba de acuerdo a parámetros de una lógica materialista, fue
ajusticiado de acuerdo a la lógica de la Plena Justicia.
Los inocentes que irían al matadero supieron como defender sus vidas, y no se
vengaron, sino que consiguieron devolver golpe por golpe, tajo por tajo; pero
los tajos que recibían eran originados en el odio, en tanto que los cortes que
los judíos propinaron se basaban en la defensa, en el derecho a vivir siendo
diferentes y respetados, sin temor, ni miedo al odio de los
"irracionales".
¿Y cómo sabemos que entre la mayoría de los judíos no había sed de venganza
u odio contra los que los odiaban?
Por tres razones.
La primera, porque solamente mataron a quienes intentaron materialmente
asesinarlos.
Segunda, porque no tomaron botín, ni se beneficiaron en nada (aparte de
preservar su integridad física y material).
Tercera, porque la reina Ester que podía haber ordenado la destrucción
completa de todos los enemigos de los judíos, tan sólo pidió el permiso para
la auto-defensa, y la cabeza de los 10 hijos de Amán, tan culpables como su
padre en la planificación del exterminio masivo de los judíos.
Y en este pedido de auto-defensa, nuevamente nos hallamos ante la ilógica
desde el materialismo, pues, ¿cómo haría un reducido grupo de
"burgueses" judíos para defenderse de TODOS sus enemigos?
Y más ilógico, Mordejay y los judíos comenzaron a festejar incluso antes de
haberse liberado realmente.
¿Qué pasa aquí?
Pues, es obvio, si seguimos la línea de pensamiento hasta aquí.
No es el número ni el poder material lo que gana las batallas, sino el Poder de
Dios.
Si Dios del lado de los judíos, ¿quién podría contra ellos?
Y en ese momento todos los judíos de Persia reconocieron que sinceramente habían
regresado a Dios, y que Dios en efecto "pelearía sus batallas por
ellos". El regreso de los judíos a Dios es el verdadero
milagro de Purim, ni la salvación de los enemigos, ni el
desenmascaramiento de Amán, ni la ascensión de Ester son tan milagrosos como
el hecho de que los judíos reconocieran que para ellos la libertad no proviene
de asimilarse a la cultura que los alberga, sino en ser buenos ciudadanos de sus
países, pero plenamente identificados con su judaísmo (pues, patriotismo e
identidad judía no son contradictorios, sino accesorios).
La misma Meguilá (9:27) dice: "...los judíos establecieron y se
comprometieron a aceptar para ellos mismos...", según el Talmud no
aceptaron únicamente el festejar Purim por las generaciones, sino que
reafirmaron el pacto que habían sellado sus progenitores en Sinai, mil años
antes, cuando la entrega de la Torá. En aquel entonces sus padres no tuvieron más
remedio que aceptar el pacto eterno con Dios, pero ahora, fue su vivencia
apartada de la manifestación visible de prodigios y milagros, sino de los
milagros "naturales", los que los llevaron a con humildad y honestidad
reconocer que ellos aceptaban por completo el Pacto Eterno entre Dios e
Israel...
Y eso fue causa suficiente para conformarse con pedirle a Ajashverosh el derecho
a la auto-defensa, y más que sobrado para comenzar a gozar...no por la perdición
de los enemigos, sino por la vuelta al "seno" de Dios.
Y lo que desde el punto de vista material aparecía como falto de fundamento, se
manifestó en la realidad: los débiles vencieron, las ovejas llevadas al
matadero sobrevivieron y los que perecieron fueron los malignos llenos de odio
en su corazón.
Fue su propio odio el que los consumió...mida kenegued mida...pues hay
leyes que NUNCA fallan...
Para concluir, como pudimos apreciar Purim no es un nombre tomado
"al azar", es parte del espíritu de esta festividad: de burla y de
ironías.
Purim - Echar suertes en realidad no hace alusión al valor y validez del
azar y el destino; sino a la Providencia y a la propia acción basada en la
libertad de elegir de las personas.
Nada se basa en la fe o en el impersonal designio predestinado,
sino que todo lo contrario, hay un Dios personal, interesado en las personas, en
las naciones en el Cosmos; y la predestinación no es más que eventos que los
propios humanos van tejiendo en un entramado verdaderamente complejo y
misterioso (aparte de los elementos naturales que se añaden).
Purim es el nombre irónico y satírico para afirmar que todo lo que
ocurre está bajo el control y el conocimiento de Dios, y que nada se hace por
casualidad, sino que siempre hay una o varias causas actuando; que nosotros no
las sepamos, ni las lleguemos a conocer, no implica que no existan.
Dios está, aunque no se lo nombre.
Dios actúa, aunque nadie se entere.
Dios nos habla, aunque no lo escuchemos.
Dios sabe, aunque nosotros no sepamos ni creamos.
Dios espera nuestra "teshuvá", regreso o arrepentimiento, a pesar de
que lo neguemos y obviemos.
Dios no opera milagros (maravillosos y publicitados) a diario, sino que espera a
que nosotros hagamos nuestros pequeños milagros (en la Meguilá fue el
arrepentimiento, la vuelta a Dios; en Mitzraim fue el reconocerse como colectivo
y sufriente).
Por eso, Purim se llama Purim.
Este nombre en verdad indica la esencia burlona de la festividad, y la
profundidad de su mensaje.
Nada es lo que aparenta, debemos escarbar un poco para hallar la esencia de las
cosas. Esta es una de las varias razones para que Purim sea
vulgarmente conocida por los disfraces y las caretas, cosas que parecen ser,
pero que no son más que coberturas...
Así pues, nada hay de superficial en Purim, que quizás es la festividad
más actual y vigente de todas. Incluso, quizás, la más educativa y profunda
de todas.
Nada hay de antiguo ni de cuento en la Meguilat Ester, que sin dudas es la más
cruel y cotidiana realidad de muchas personas.
Y si la lógica del nombre de Purim no sigue el patrón denominativo de
las otras festividades, pues, es parte de su ilógica intrínseca, que nos hace
comprender que la Majestad de Dios triunfa, incluso superando el absurdo del
materialismo y del odio.
Purim, finalmente, nos recuerda que el odio puede vencer en muchas
batallas, pero que finalmente Dios prevalece, y el Bien supera a la maldad, tome
ésta el disfraz que tome. Y que a veces, el mal mayor para vencer puede
provenir desde el lugar menos esperado...
Las burlas que nos depara la vida...
Y una última visión al respecto de la lógica de Purim.
Es halajá de esta festividad embriagarse hasta el punto de no poder distinguir
entre "maldito Mordejai y bendito Amán".
Las razones que se dan son varias.
Pero, nosotros que aprendimos algo de este artículo, ¿no podemos decir que
quizás se espera que nos liberemos un poco de la mentalidad galútica,
materialista, predestinada; para hallar un poco de VERDADERA lógica?
1- Otra interpretación posible es la siguiente: los 70 años
eran de exilio judío TRAS la caída de Babel, si contamos 539 (año de la
caída babilónica) - 70 (años de exilio mínimo posterior) = 469 AEC.
Jerjes I subió al trono en 486 AEC, el edicto de Amán fue en el año 12 de su
reinado = 474 AEC, es decir, los tiempos del retorno judío a Dios se estaban
cumpliendo como fuera profetizado por Irmiá, en tanto que de esta forma
Ajashverosh había calculado mal, y festejaba basado en un error matemático o
de interpretación.
Aunque hay algo más para tomar en cuenta. Según la mayoría de los jajamim
Ajashverosh no puede ser el histórico Jerjes, pues los jajamim lo ubican en una
época algunos años anterior a la de este rey, siendo quizás Cambises o alguno
no registrado por los anales históricos. regresa
Si les quedan interrogantes, comentarios o sugerencias, háganlas llegar que son siempre muy bienvenidas.
Las citas tanájicas son extraídas del CD "DARJEY NOAM - TANAJ"
y de promover este sitio entre sus allegados.
TODOS LOS DERECHOS SON PROPIEDAD
DE SUS AUTORES,
en tanto puedan ser considerados autores,
en tanto puedan ser considerados autores,
en tanto puedan ser considerados autores