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Respuestas a Preguntas
Comentario recibido
"Shalom
Mi cometario sobre que los hijos de Aaron fueron muertos porque se
hacercaron a D-s lo saque de nuestra parasha. Aqui esta el comentario del
Rebe...En mi sinagoga dieron en una yeshiva sobre este tema pero en un estudio de Kabalah por ser algo mistico... Nuestros Sabios explican que el acto de Nadav y Avihú de "ofrendar un fuego ajeno a Di-s" no fue un "pecado" propiamente dicho... Más bien, como escribe Rabí Jaím ibn Attar en su comentario Or HaJaím a la Torá, la suya fue "una muerte por el 'beso' Divino como el experimentado por los perfectamente justos, sólo que los justos mueren cuando el 'beso' Divino se acerca a ellos, mientras que [en este caso] ellos murieron por acercarse a él...". "Aunque avistaron su propia defunción, ello no les impidió acercarse [a lo Divino] en apego, deleite, satisfacción, camaradería, amor, beso y dulzura, al grado de
que sus almas partieron de ellos"[3]. En otras palabras, el fuego Divino que
consumió las almas de Nadav y Avihú fue el fuego que es intrínseco a cada
alma: el ardiente deseo del alma de librarse de las amarras físicas que la
distancian de su fuente Divina..."E.U.A.
Respuesta
(Si desean leer el artículo completo que utiliza esta inteligente persona para basar su duda, los remito al sitio de JaBaD Lubavitch de Buenos Aires, pues como corresponde, es necesario comprender el contexto, y sin dudas, expresar las palabras según su autor).
Mi apreciada señora, gracias por su amable e interesante pregunta, que nos permitirá continuar profundizando el tema ya tratado.
Gracias a Dios los judíos no estamos constreñidos en nuestro pensamiento, y tenemos la libertad de dejarnos llevar por aquellos senderos que nos parezcan personalmente más placenteros (en tanto no violemos ninguna ley -divina o humana-).
El Talmud Babli (Moed Catan 28b) nos menciona a Nadav y Avihu
como ejemplo de personas por las cuales se hizo duelo popular al momento de su
defunción, con las siguientes palabras: "...eso se refiere a Nadav y
Avihu, quienes no cumplieron más que una sola mitzvá, tal como está
escrito..."
Por este párrafo, difícilmente podríamos considerar a estos hijos del Sumo
Sacerdote como exponentes de tzadik (persona justa, que trasciende con su
meritoria conducta el promedio normal).
Más drástico aún es este midrash (estudio rabínico), en el mismo Talmud (Sanhedrin 52a): "... Moshé y Aarón andaban delante, detrás Nadav y Avihu, más atrás el pueblo. Entonces le dijo Nadav a Avihu: 'Cuando morirán estos dos viejos para que seamos nosotros los líderes de esta generación.' Dijo entonces el Santo Bendito Sea: 'Veremos quien entierra a quien'".
RaSH"I en su comentario en el sitio (Vaikrá / Levítico
10:2), tampoco nos deja intuir una imagen positiva de estos dos personajes. Nos
brinda dos versiones (basándose en el Midrash Vaikrá Rabbá y en Masejet
Eruvin 63a perek Adar). Por un lado menciona a Rabbí Eliezer comentando que
murieron por haber sido engreídos y no impartirle honor y respeto a su maestro
Moshé Rabenu. Luego nos enseña que según Rabbí Shimeon entraron ebrios al
Santuario, y que movidos por su inconsciencia temporal ejercieron funciones para
las que no habían sido convocados, provocándose así la muerte.
(Atención: ambas versiones, ambas conductas pecaminosas / erradas, provocaron
sus muertes, no como castigo de un Dios terrible, severo y vengador, sino como
resultado de una acción errónea que generó una reacción negativa sobre
ellos... por ejemplo, como si hubieran tocado los cables pelados del alto
voltaje).
Otra explicación talmúdica, (Zevajim 115b), parece darnos
una idea de cierta superioridad de estos sacerdotes muertos: "...le dijo
Moshé a Aarón: 'No murieron tus hijos sino para santificar el Santo Nombre'; y
como Aarón sabía que sus hijos eran conocedores del Eterno, enmudeció".
Sin embargo el gran comentarista RaMBa"N (Najmánides en su comentario a
Vaikrá / Levítico 10:3) no la considera del todo pertinente y acorde con el
texto.
Podemos nosotros suponer que ser conocedor de Dios es parte de lo que se
considera requerimiento mínimo e indispensable en un cohen que ejerce
sus funciones sacras, y que podríamos entender como, persona que conoce los
reglamentos, limitaciones, deberes y derechos de su estar en el Mundo. En el
caso específico, sabían que si ofrendaban lo que no era requerido por Dios,
las consecuencias no serían agradables para ellos.
Y, que murieron para santificar a Dios, puede ser entendido como que tanto por
la nobleza del hacer, como por el error, el ejemplo puede ser tomado por el
observador instruido, y aplicarlo con cordura y mesura en su propia existencia.
(Para que se entienda esto: no es necesario que cada uno beba veneno para saber
que nos puede dañar...)
Para ir concluyendo, el texto de la Torá:
"(1) Nadav y Abihú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario, pusieron en ellos fuego, pusieron sobre él incienso y ofrecieron delante de Hashem fuego extraño que Él no les había mandado.
(2) Entonces salió fuego de la presencia de Hashem y los consumió. Y murieron delante de Hashem.
(3) Entonces Moshé [Moisés] dijo a Aarón: --Esto es lo que habló Hashem diciendo: ''Me he de mostrar como Santo en los que se acercan a Mí, y he de ser glorificado en presencia de todo el pueblo.'' Y Aarón calló.
(4) Luego Moshé [Moisés] llamó a Mishael y a Eltzafán, hijos de Uziel, tío de Aarón, y les dijo: --Acercaos y llevaos a vuestros hermanos de delante del santuario fuera del campamento.
(5) Ellos se acercaron y los llevaron con sus vestiduras fuera del campamento, como dijo Moshé [Moisés].
(6) Entonces Moshé [Moisés] dijo a Aarón y a sus hijos Eleazar e Itamar: --No dejéis suelto el cabello de vuestras cabezas, ni rasguéis vuestras vestiduras, para que no muráis ni haya ira sobre toda la asamblea. Pero vuestros hermanos, toda la casa de Israel, llorarán a los quemados, a quienes Hashem quemó.
(7) Tampoco salgáis de la entrada del tabernáculo de reunión, no sea que muráis; porque el aceite de la unción de Hashem está sobre vosotros. Ellos hicieron conforme a la palabra de Moshé [Moisés].
(8) Entonces Hashem habló a Aarón diciendo:
(9) --Ni tú ni tus hijos contigo beberéis vino ni licor, cuando hayáis de entrar en el tabernáculo de reunión, para que no muráis. Esto será un estatuto perpetuo a través de vuestras generaciones,
(10) para hacer diferencia entre lo santo y lo profano, entre lo impuro y lo puro,
(11) y para enseñar a los hijos de Israel todas las leyes que Hashem os ha dicho por medio de Moshé [Moisés]."
(Vaikrá / Levítico 10)
Con los diversos comentarios que hemos
vertido en esta ocasión, más una lectura comprensiva del texto de la Torá,
¿no es más factible argumentar que la muerte de Nadav y Avihu debe ser tomada
como ejemplo de conducta errónea, en lugar de elevarla a modelo a seguir?
Tan sólo tres pistas para esta conclusión:
Moshé reclama que se haga duelo por los fallecidos (por lo que parecería que no se lo estaba haciendo en ese momento, de modo natural). De ser una muerte de tzadikim, ¿no se pediría del Pueblo una actitud menos plañidera, tal como Rabbí Shimon bar Iojai hizo ante su propia muerte?
¿Por qué prohibir la ingesta de alcohol a los cohanim antes de entrar al servicio del Santuario justamente en este lugar, si no tuviera relación directa con lo que acaba de ocurrir?
Si hubieran muerto por su ardorosa búsqueda de Dios, ¿por qué se reitera que fue Dios el que los quemó, si ya son mencionados como que han sido quemados?
En todo caso, si murieron por su amor a
Dios, por querer desamarrarse de las ligaduras de la materia: ¿es eso lo que la
Torá nos pide que hagamos... o nos pide que vivamos tal y como
Él manda y desea?
El repudio de lo físico es una concepción que -me parece- no se afianza en las
enseñanzas clásicas de la Torá, pues, la Torá reitera que es por medio de
elevar lo cotidiano y convertirlo en consagrado, como se consigue la superación
y la trascendencia... y no muriendo por ideales... (Vaikrá / Levítico 18:25;
25:26; Devarim / Deuteronomio 5:30; 8:3; 30:16)
Tal como nos fue declarado:
"(Las mitzvot) Son para que reverencies a Hashem tu Elokim, tú con tu hijo y el hijo de tu hijo, guardando todos los días de tu vida todas Sus leyes y Sus mandamientos que yo te mando, a fin de que tus días sean prolongados."
(Devarim / Deuteronomio 6)
Como dijimos, quizás estamos errados en
nuestras interpretaciones, quizás no.
Seguramente que el conocimiento del extinto rebe de Lubavitch (ztz"l)
comparado con el escaso nuestro, es como la luz del sol cuando alumbra la
pálida llama de un minúsculo cerillo, sin embargo, lo escuchamos, y aún así
pensamos lo que hemos expuesto.
Alabemos al Eterno por la posibilidad de encontrar tantas facetas en Su Verdad.
Pero, no olvidemos algo que está explícito en esta sección de la Torá:
pretender encontrar a Dios por medios que Él no desea, en lugar de
aproximarnos, nos separa de Él, nos devora nuestra posibilidad de trascender.
Shalom, bienestar y larga vida para todos nosotros.
Yehuda Ribco - Sivan 8, 5761
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