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Si quisiéramos encontrar un tema en común en la Torá, y especialmente en la parashá de esta semana (Ki Tavó), podríamos decir que es el de la conectividad, con el Creador, con el prójimo, con el lejano, con uno mismo.
Siendo así, tanto la Torá como las mitzvot nos sirven como guía y directriz para lograr las mayores y más profundas capacidades de nuestro ser, individual y colectivamente.
No es casualidad que uno de los simbolismos del toque tradicional del Shofar nos sirve para tomar conciencia de esto también.
La tekiá, el sonido sostenido, estaría representando la conexión que se mantiene, que está firme y establecida.
Pero luego, las vicisitudes de la vida forman bloqueos, inconvenientes en nuestra comunicación. Para representarlo están el toque de shevarim, que son tres consecutivos y medios. Ya no hay un lazo estable, sino que se ve interrumpido, vaya uno a saber por cuáles impedimentos. Tanto desde lo emocional, social y mental se va quebrando aquello que parecía incorruptible.
Pero, allí no termina el drama, porque las dificultades van cortando todavía más la armonía del ser, lo que está signado por el sonido de teruá, una sucesión rápida, como una ráfaga, de al menos nueve toques. Es cuando ya perdimos el control, no comunicamos ni siquiera estamos siendo coherentes con nosotros mismos. Estamos en exilio, siendo nuestro Yo Vivido extranjero y ausente del Yo Esencial. Es un estado doloroso, amargo, confuso, debilitante, de impotencia que nos ahoga.
Pero después, dice la tradición que hagamos sonar nuevamente el shofar con el sonida de la tekiá, de la conexión, y cuando es la última de la serie la costumbre es que sea tan extenso el sonido como capacidad tenga el ejecutante de sostenerlo. Para decirnos que tenemos esperanza, hay un destino bueno para nosotros, donde reestablecemos la conexión y podemos vivir en paz.
El asunto sustancial es aprender a construir SHALOM y realizarlo.
Llevando una constante conducta de bondad y justicia, en pensamiento, palabra y acción.
Quiera Dios que este mensaje ayude a fortalecer tu conectividad fabulosa.
