Judaismo conversion Israel Mashiaj Tora Dios amor paz

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 Lic. Prof. Yehuda Ribco (Kislev 12, 5763 - 17/11/02)

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    Judaísmo y Cristianismo

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No soy judio. pero me gustaria saber cual es la diferencia con un cristiano.
Saludos y mis respetos

Manuel Desconocido
País: Ecuador

(Deben incluir en todos sus mensajes para nosotros su nombre completo, el nombre de la ciudad y país donde vive)

Shalom.
Gracias por participar.

Creo entender que usted pregunta diferencias entre judaísmo y cristianismo.
Si es efectivamente esa su inquietud, permítame decirle que son decenas, quizás centenares las diferencias, por lo cual me limitaré a exponerle unas pocas y substanciales. (En verdad es una tarea totalmente difícil, pues dentro del cristianismo hay cientos o miles de denominaciones, doctrinas, iglesias, etc.; y entre ellas no se ponen de acuerdo ni siquiera en lo fundamental, como por ejemplo el número que compone su deidad, lo que agrada a su deidad, etc. Así que me permitiré ser muy laxo en mis apreciaciones.)
Encontrará mayor información en las secciones: "Elegido", "Otras Creencias" y "Naciones".

Judaísmo Cristianismo
Es una familia extensa, y/o una nación, y/o un pueblo, y/o una etnia.
La creencia religiosa es uno de sus aspectos, pero no el único que lo caracterice (si bien es fundamental y singular del judaísmo).
Es una religión, fragmentada en diversas iglesias.
Los judíos son una cadena in-interrumpida de descendientes de la familia patriarcal (Avraham, Itzjac y Iaacov con sus respectivas esposas), por su línea materna.
A la familia biológica judía se han sumado personas que son adoptadas legalmente como hijos de la familia judía (los llamados conversos formales, y que incluyen personas de toda raza, nacionalidad, creencia previa, etc.).
Está formado por personas provenientes de diversas naciones y familias de origen, que profesan similar fe en sus dioses y redentores.
La creencia fundamental es la existencia de un Dios, que es uno, único, eterno, creador y sostén de todo, juez, padre, inmaterial, incorpóreo pero que es activo y vinculado directamente con Su obra.
Nada está fuera de Su poder y dominio, y nada hay que se le oponga realmente.
Se cree en un dios bueno que es tripartito, con una parte materializada llamada "el hijo".
El dios tripartito tiene repartidos sus dominios, siendo cada una de sus personalidades regente sobre alguna.
Y se cree en la existencia de una fuerza negativa opuesta, poderosa y capaz de tentar incluso a la deidad, que se acostumbra denominar Satanás (por ejemplo, ver en 1ª Juan capítulo 3, verso 10).
 
La creencia en dioses humanos, o Dios humanizado, o siquiera materializado es considerado totalmente como idolatría.. Al menos una parte de la deidad fue humana.
La relación entre la persona y Dios está libre de intermediaciones. La persona con sus actos, pensamientos, rezos, etc., transita los puentes de comunicación directa con la divinidad. Hay una impresionante gama de intercesores, que van desde "el hijo", que se lo considera el "único camino al padre"; y se cree en santos, en la madre "del hijo", y en otras fuerzas que tienen poderes divinos y/o de intermediación.
Dios ha revelado Su deseo explícitamente al pueblo judío reunido en Sinai, y esta revelación ha sido puesto por escrito en la llamada Torá, y se ha mantenido una porción de modo oral.
Se confía en la validez de la Torá, pues tres millones de personas fueron los testigos de la Revelación incuestionablemente divina.
La deidad de los cristianos, y sus dignatarios, han tomado prestado el texto sagrado de los judíos, y le han añadido sus propios comentarios, ideas, mandatos, etc.
Los cristianos aceptan sus libros sagrados por fe, y no por testimonio de los ancestros que presenciaron la revelación de los mismos.
A Dios agradan las acciones buenas, justas, acordes a lo que Él ha revelado.
Tanto judíos como gentiles son merecedores de su porción de vida eterna, en tanto hayan vivido de acuerdo a los mandamientos divinos.
Existe un paraíso para los creyentes en la deidad del "hijo"; y un infierno para el resto, para los no creyentes.
Se aceptan las diferencias culturales, y se las promueve como positivas y beneficiosas en el divino Plan, en tanto no sean atentatorias contra el cumplimiento de los mandamientos.
Por lo tanto no se buscan conversos, ni se procura hacer judíos a los gentiles; ya que el gentil que actúa como gentil de acuerdo a lo que Dios manda, es tan valioso como el judío que actúa como Dios manda.
Dios retribuye de acuerdo a las acciones, y no a la fe, por lo cual incluso el ateo que se conduce rectamente, está andando parcialmente por la senda correcta.
Se busca convertir por cualquier medio a los que no son creyentes en "el hijo".
El que no es creyente, está condenado eternamente a los peores tormentos  (por ejemplo, ver en 1ª Juan capítulo 5, versos 11 y 12).
El Eterno es el señor que debe ser servido, sin esperar recompensas de Su parte.
 
La deidad está al servicio de sus fieles, incluso llegó a sacrificar la vida de "su hijo" para perdonar los pecados de la humanidad que en él cree.
El Eterno escogió a la familia judía para que Le sirviera particularmente, y para que actuara como guía de las naciones hacia Él.
Es decir, un pueblo elegido para servir a Dios y a la humanidad.
 
Su deidad escogió a "los fieles" para darles salvación y vida eterna.
Este Mundo es un lugar en el cual laborar para conseguir perfeccionarlo, y así mejorarse a sí mismo.
Es el camino al Mundo Venidero, que puede y debe ser gozado dentro de los parámetros establecidos.
El Mundo es el reino de Satanás, y los goces son pecaminosos.
El gozo de la carne es oponerse a la deidad (por ejemplo, ver en Santiago capítulo 4).

Si en algún aspecto descrito del cristianismo he errado, lo siento sinceramente, pero como ya he dicho, no es mi temática, ni me interesa que sea tampoco.
Y si en alguna cosa he sido ofensivo injustamente, pido mis más sinceras disculpas a las personas de sincera fe.

Para finalizar, cabe recordar algo que ya hemos dicho. Si bien las diferencias son inmensas entre ambos sistemas de vida, es indudable que en ciertos aspectos ambos caminos se entrelazan y siguen direcciones paralelas.
Quiera el Eterno que pronto, en la Era Mesiánica, desparezca la idolatría de nuestras vidas, y entonces más podremos compartir en común judíos y gentiles que desean ser fieles a Dios.

Si este texto le ha sido de provecho, no olvide que este sitio se mantiene gracias a SU colaboración económica. No cierre su mano, y abra su corazón bondadoso.

Iebarejejá H' - Dios te bendiga, y que sepamos construir Shalom

 Yehuda Ribco

email: comentario@serjudio.com?subject=Rap1653


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