Claves: Placer, gozo,
espíritu, dimensión, espiritual, amor, paz, armonía, crecimiento,
desarrollo, Cabalá, Kabbalah, misticismo, psicología
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Shalom.
Gracias por participar.
(No sé si comprendo bien su pregunta pues no especifica a qué
categorías se refiere usted, por lo cual le ruego que me diga si siente que
no le estoy respondiendo con este texto.)
Podemos discernir cinco modos de gozo, que se
corresponden con
las
cinco dimensiones de recepción espiritual. Le mencionaré ahora el gozo
principal de cada plano, según un orden de menor a mayor refinamiento
espiritual:
-
Físico.
Este es el goce que se conduce a través de nuestros cinco sentidos: beber,
comer, abrazar, ser abrazado, buen perfume, un paisaje, relaciones íntimas,
etc.
El ápice de cada placer sensual se halla dentro de los límites establecidos
por la Torá y la Tradición, por fuera de éstos, se encuentra displacer.
-
Emocional.
Su punto más alto es el amor (el
verdadero, y no el romanticismo vacío de contenido trascendente).
-
Intelectual.
Este gozo no se refiere exclusivamente al regocijo emanado de logros de
nuestro pensamiento, sino también (y especialmente) a
los que surgen como efecto de realizar buenas acciones desinteresadamente.
Esto es así porque desde la perspectiva de la Torá la finalidad del
intelecto es actuar acorde a lo que es el Bien (Mishlei /
Proverbios 9:10).
-
De voluntad y creatividad.
Este gozo es efecto del uso positivo/constructivo/generoso del
poder/dominio/superioridad/creatividad.
(Por ejemplo el líder que conduce al bienestar a sus
dirigidos. O los padres que traen vida a este mundo, y educan adecuadamente
a sus hijos. O el maestro que instruye bondadosamente los caminos correctos
a sus discípulos.)
-
De adhesión a Dios.
Cuando todos los gozos anteriores se han experimentado sanamente, queda un
plano que trasciende lo personal, y que es el vínculo directo con el
Creador. Éste vínculo se establece cuando se reconoce Su Presencia a cada
instante y en cada lugar, y se Le agradece por Su perfecta bondad más allá
de toda comprensión.
Cabe notar seis aspectos a tener en cuenta:
-
El gozo sentido en cada plano es
cualitativamente distintivo de ese
plano y no se reduce al gozo de otro plano. (Por ejemplo, el
placer que obtengo al comer una manzana es distinto al de bendecir por
ella antes de comerla, o al de repartirla entre los que tienen hambre).
-
El gozo de un plano superior tiene una
fuente espiritual más refinada, por lo tanto, nutre de mayor y mejor
energía a la persona.
-
Por cada gozo verdadero existe al menos uno
que se le asemeja pero es falso, y que por lo tanto produce perjuicios.
(Pornografía no es intimidad sexual; gula no es saborear los alimentos.
Romance no es amor; emocionarse con una película no es extraer
saludablemente el jugo de la vida. Actuar para que otros opinen bien, no es
actuar bien. Abusar del poder no es liderar. Idolatría no es servir a Dios).
-
Es preciso esforzarse para conquistar cada
gozo, no hay gozo verdadero que sea gratis, heredado o de regalo.
-
La plenitud del gozo no se obtiene a medio
camino, en la estación de la comodidad. Cuando se llega a la comodidad, al
agradable sentimiento de bienestar, es preciso continuar avanzando, pues de
lo contrario el gozo se esfuma rápidamente.
-
La única guía precisa, acertada y al alcance
de la mano para conducirnos al máximo placer en cada una de las dimensiones
es la TORÁ. Su estudio exhaustivo y profundo, acorde con la Tradición; así
como el cumplimiento de los preceptos que de ella emanan; es la clave que
asegura gozar constructivamente (tanto en momentos de penuria
y limitación, como en épocas de expansión y dicha).
Si este texto le ha sido de provecho, no
olvide que este sitio se mantiene gracias a SU colaboración
económica. No cierre su mano, y abra su corazón bondadoso.
Que el Uno y Único Dios bendiga a quienes le
son fieles servidores,
y que
sepamos construir Shalom, Iebarejejá H'.
Yehuda Ribco
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