Gracias por comunicarse.
Primero vayamos a las citas
en el Tanaj (lo que usted debe conocer, seguramente, bajo el erróneo
nombre de Antiguo Testamento):
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"En aquel día Hashem
castigará con su espada dura, grande y fuerte, al Leviatán, la serpiente
furtiva, al Leviatán, la serpiente tortuosa; y matará también al
monstruo que está en el mar." (Ieshaiá / Isaías 27:1)
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"Tú machacaste las
cabezas del Leviatán, y lo diste por comida a los moradores del
desierto." (Tehilim / Salmos 74:14)
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"Sobre él van los
navíos; allí está el Leviatán que hiciste para que jugase en él."
(Tehilim / Salmos 104:26)
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"Maldíganla los que
maldicen el día, los que se aprestan a instigar al Leviatán." (Iyov
/ Job 3:8)
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"¿Sacarás tú al
Leviatán con anzuelo? ¿Sujetarás con una cuerda su lengua?" (Iyov /
Job 40:25)
¿Qué explican nuestros
sabios al respecto de las citas (y otros sitios en el Tanaj)?
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Grandes peces (TB Baba
Batra 74b; RaSHI a Bereshit / Génesis 1:21; Ibn Ezra a Tehilim / Salmos
74:14) (cuando menciono pez, quiere significar bestia marina);
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Ballena (Ibn Ezra a
Bereshit / Génesis 1:20,24);
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Saurio o reptil (RaSHBam a
Bereshit / Génesis 1:21,24);
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Gran pez único, castrado y
sin descendencia, pues la hembra de la especie murió al comienzo del
Mundo (RaMBan a Bereshit / Génesis 1:21, basado en Baba Batra 74b);
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Gran pez similar a una
serpiente (Metzudat Tzion a Amós 9:3)
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Como representación de los
reyes de Egipto y Asiria (Targum
Ieonatan, RaSHI y RaDaK a Ieshaiá / Isaías 27:1);
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Ser fabuloso
(interpretación acerca de RaMBaM en Moré Nebujim 3:23)
¿Qué leyendas o tradiciones
se tejieron/trasmitieron al respecto?
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Servirá como parte del
banquete que comerán los justos en la época mesiánica (TB Baba Batra
74b, 75a; Vaikrá Rabba 13:3, 22:10; Tosafot Avodá Zará 10b)
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El Eterno se divierte
con él (no de
él) (Avodá Zará 3b)
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Por metonimia, el festín
con su carne describe la dicha del reino mesiánico
¿Y la legislación judía qué
dictamina?
¿Qué dicen algunos de los
intérpretes?
¿Cuál es su descripción?
"(25) ¿Sacarás tú al Leviatán con
anzuelo? ¿Sujetarás con una cuerda su lengua?
(26) ¿Pondrás soga de juncos en sus narices? ¿Horadarás con gancho su
quijada?
(27) ¿Acaso te colmará de ruegos? ¿Te hablará con palabras sumisas?
(28) ¿Hará un trato contigo, para que lo tomes por siervo perpetuo?
(29) ¿Jugarás con él como con un pájaro? ¿Lo atarás para tus niñas?
(30) ¿Negociarán por él los grupos de pescadores? ¿Se lo repartirán entre
sí los mercaderes?
(31) ¿Podrás llenar de arpones su piel o su cabeza con lanza de pescar?
(32) Pon sobre él tu mano: Te acordarás de la batalla, ¡y nunca volverás a
hacerlo!
(1) He aquí que toda esperanza del hombre se
frustra, porque ante su solo aspecto uno cae hacia atrás.
(2) Nadie hay tan osado que lo despierte. ¿Quién podrá presentarse delante
de él?
(3) ¿Quién me ha dado primero para que yo le restituya? ¡Todo lo que hay
debajo del cielo, mío es!
(4) No guardaré silencio acerca de sus miembros, ni de sus proezas, ni de
su gallarda figura.
(5) ¿Quién podrá levantar la superficie de su vestidura? ¿Quién se
acercará a él con su doble coraza?
(6) ¿Quién abrirá sus fauces? Hay terror alrededor de sus dientes.
(7) Su espalda está recubierta de hileras de escamas herméticamente unidas
entre sí.
(8) La una se junta con la otra, de modo que ni el aire puede pasar entre
ellas.
(9) Pegadas están unas con otras; están trabadas entre sí y no se podrán
separar.
(10) Sus estornudos lanzan destellos de luz; sus ojos son como los
párpados del alba.
(11) De su boca salen llamaradas; escapan chispas de fuego.
(12) De sus narices sale humo, como de olla que hierve al fuego.
(13) Su aliento enciende los carbones, y de su boca salen llamaradas.
(14) Su poderío reside en su cuello; ante su presencia surge el
desaliento.
(15) Los pliegues de su carne son apretados; son sólidos e inamovibles.
(16) Su corazón es sólido como una roca, sólido como la piedra inferior de
un molino.
(17) Cuando él se levanta, los poderosos sienten pavor y retroceden ante
el quebrantamiento.
(18) La espada que lo alcanza no lo afecta; tampoco la lanza, ni el dardo,
ni la jabalina.
(19) Al hierro estima como paja, y a la madera como a la corrosión del
cobre.
(20) Las flechas no le hacen huir; las piedras de la honda le son como
rastrojo.
(21) Al garrote considera hojarasca; se ríe del blandir de la jabalina.
(22) Por debajo tiene escamas puntiagudas; deja huellas como un trillo
sobre el lodo.
(23) Hace hervir el abismo como caldera y convierte el mar en una olla de
ungüentos.
(24) Tras de sí hace resplandecer un sendero; como si el océano tuviera
blanca cabellera.
(25) No existe sobre la tierra algo semejante; está hecho exento de temor.
(26) Menosprecia todo lo que es alto; es el rey de todas las fieras
arrogantes."
(Iyov / Job 40:25-32; 41:1-26)
Iebarejejá H' - Dios te bendiga, y que sepamos construir Shalom
Yehuda Ribco
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