La burla sobre un inocente,
proviene del desesperado intento del impotente
por sobreponerse a su propia debilidad.
Es una agresión,
no un motivo de placer o satisfacción.
Si está acompañada por risotadas,
no reflejan ninguna alegría,
solamente una máscara más que brota del EGO,
y ocultan el verdadero rostro del ser.
El burlador, no es necesariamente alguien malo o arrogante,
pero seguramente está en caos interno, en conflicto doloroso, en exilio de su ser,
tratando de llamar la atención para obtener un poco de sentido y amor.
¿Esto lo disculpa?
¡NO!
Como toda manifestación automática del EGO que no colabora para salvar a la persona de una real situación de peligro,
debe ser evitada y aprenderse a dominar la reacción inconsciente para suplantarla con la construcción de SHALOM.
Pero, cuando el objeto de la burla es la mentira, la falsedad, la idolatría, el tráfico de la fe, la maldad disfrazada de santidad, la corrupción,
entonces la burla es una herramienta más en la caja de utensilios a las órdenes del constructor de SHALOM,
igualmente, en lo posible evitarla al máximo.
Y yo pido publicamente perdon por mis las acciones burlescas y ególatras.
yo no recuerdo ninguna!
Nunca me han gustado los burlones, tampoco los que lo aplauden. Los primeros siempre me parecieron personas carentes de atención, los segundos personas miedosas buscando protegerse del burlón.
Muchas gracias Moré, hay muy buen pan servido esta semana!
solo esta semana?!
hmmmm
gracias!
No entiendo el ultimo párrafo esta bien redactado?
Ya en entendí…
que?