Hay una sección de nuestro cerebro que no diferencia el origen de los estímulos recibidos y procesados.
Da lo mismo si está sucediendo actualmente, si está siendo imaginado, si lo está viendo en una película, si lo está recordando; cualquiera que sea el origen esa zona lo recibe como un hecho verídico y actual. Para nuestro pesar es una región que acciona de inmediato, con un procesamiento de los estímulos muchísimo más veloz que la región más evolucionada, la prefrontal, la que efectivamente puede discernir entre imaginación, rememoración, acontecimiento actual, etc.
Es por esto que cuando estamos viendo una película de terror, saltamos en la silla y nos sentimos angustiados, como si los ataques siniestros estuvieran aconteciendo en nuestro entorno, fueran una real amenaza, ya que esa sección del cerebro es incapaz de dirimir la irrealidad de los eventos y asumirlo como una fantasía.
¿Recuerdas cuando el relato de miedo en un campamento a oscuras generaba oleadas de terror irrefrenable, por el mero hecho de estar imaginando la historia contada por el líder u otro compañero?
Te aseguro que el importante estudio que está en este link: https://belev.me/2019/01/27/de-mente-y-tropezar-con-una-misma-o-parecida-piedra/
tiene muchísima bendición para ti y tu familia.
Por ahora es GRATIS y SIN COMPROMISO.