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Muchas veces es necesaria y oportuna la crítica que lleva a tomar conciencia de los errores y entonces emprender el camino del crecimiento.
Pero, ¿cuántas veces has recordado señalar los aciertos y aplaudirlos?
Ambas posturas, bien empleadas, resultan herramientas sumamente provechosas para el bienestar.
Corrige pero también elogia con propiedad.
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