Ayer decidí no estudiar por un día.
“No quiero estudiar por hoy nada” le dije al maestro cuando pase a saludarlo.
Me sentía malhumorado y enojado; y decidí sentirme así lo que restaba del día, mientras cumplía con las obligaciones laborales que me exigían tiempo y dedicación.
Y mientras cumplía con el trabajo y me sentía como había decidido estar, note un nuevo artículo publicado; el anterior a este.
Entonces decidí leerlo y ya. Ni comentarlo ni reflexionarlo ni nada. Mi decisión estaba tomada para ese día, no estudiar, trabajar y sentirme malhumorado y enojado y nada iba a cambiar mi decisión.
Mientras leía el artículo, recordé algunos otros decenarios artículos publicados acá, sobre vidas parecidas a las de Koraj, donde tenían mucho pero deseaban aún más.
Y pronto me vi en revisión personal concienzuda.
Pero, lejos de confesar los resultados arrojados de mi revisión o la modificación de mi ánimo, quisiera compartirles mis ideas sobre la actitud hacia el estudio.
Como noajidas, no estamos obligados a estudiar; estamos obligados en actuar; de ser constructores por medio de acciones correctas. Las acciones correctas tienen su base en el Código de Ética Noajida, y de ahí se multiplican, ramifican y complejizan.
Como noajidas, no estamos obligados a especular sobre los objetivos de tales acciones. Nuestro Código no dice nada sobre objetivos, así que especular sobre ellos resulta un hábito religioso automatizado en creencias.
Así pues, resulta para el noajida indiferente su ánimo o sus estudios, el pilar son sus acciones.
Pero como ser humano, tengo el deber de crecer; de humanizarme cada vez un poquito más porque hay consciencia de no ser un producto evolutivo acabado, ni físico ni psíquico. La humanización significa descubrir, cada vez un poco más, lo que nos compone como seres separados de otros, únicos en nuestra especie, para expresarlo al mundo.
Para ello si hay el deber de estudiar, de las fuentes que tengamos, pero más de nuestra vida y de nuestras experiencias. Volverse un estudioso de la vida y las experiencias; no perder tanto el tiempo en naderías o persiguiendo objetivos que carecen de valor aunque los presenten como de inestimable precio.
Decide si quieres a no leer un día, o un año, o el tiempo que quieras. Pero no renuncies al estudio, porque estudiando no solo podrás decidir sobre las acciones correctas a circunstancias específicas, sino que tambien descubrirás de a pocos tu humanidad e irás ganando sobre el automatismo.
Muy bueno. Gracias por compartir con nosotros
Gracias moré por el comentario, y por el día de licencia para estudio de ayer, aunque el artículo parashat koraj 5777 estaba muy tentador para no reflexionarlo.
gracias, parecia bastante obvio y simplon mi texto que ud menciona