Una síntesis con cierta explicación de la parashá KORAJ.
Koraj era primo de Moshé, un hombre poderoso, acaudalado, referente social y con un cargo muy importante dentro de la organización del Templo; igualmente quería más, especialmente honor, sentía que era merecedor del cargo de Cohén Gadol y no Aarón.
Se rodeó de gente y seguidores, todos ellos ansiosos por obtener cada uno sus propios beneficios, estaban los que perseguían venganza, otros fama, algunos riqueza, aquellos eso otro, en fin, gente que tenían algunas cosas en común y no positivas precisamente.
Como por ejemplo estaban Datán y Abiram, dos que ya eran conocidos por ser revoltosos y generadores de conflictos, verdaderos pozos abiertos en el camino del peatón incauto así como también chispas en el bosque reseco.
Entonces, usando los instrumentos habituales de la demagogia, provocaron la incertidumbre, el descontento, el rencor, la esperanza vacía, el deseo agobiante para levantarse en contra del liderazgo político/espiritual de Moshé y ritual/social de Aarón.
Finalmente, cuando se ponen a prueba ellos contra Aarón, terminan siendo algunos de los perversos tragados por la tierra y otros incinerados por obra del Eterno.
Igualmente, la corrosión ya hizo efecto en partes del pueblo, que siguen provocativos hasta que una plaga cae nuevamente y mata a algunos. Es la intervención de Aarón la que detiene la mortandad auto provocada (16:1-17:15).
Para dejar bien en clara la elección de Aarón por parte de Dios, cada jefe de tribu deposita en la Tienda del Testimonio su bastón. Éstos eran palos secos, desconectados del árbol, no había modo de que volvieran a la vida y plenitud. Sin embargo, al otro día, el de Aarón (jefe de la tribu de Leví, además de Cohén Gadol) había florecido y surgían de él almendras. Era un milagro a la vista, que dejaba asentado cuál era el hombre que había seleccionado Dios para el cargo de líder de los cohanim (17:16-26).
Hablando de cohanim, éstos y sus hermanos los levitas fueron designados para ser responsables de manejar las donaciones que recibiera el Santuario. Además, como mecanismo para proveerlos de sustento se estableció que todos los primogénitos eran para los cohanim en tanto que se declararon ciertos diezmos para los levitas (18:1-32).
Pienso en dos cosas al leer la actitud de koraj: la concentración excesiva en el deseo de tener más poder, y demostrarlo; la clara intención de sublevarse contra una autoridad sin motivos éticos, sino personales.
Pienso además sobre la propia vida, que vacila entre la impotencia y la destrucción; el poder y la construcción.
U que piensa de ello?
trato de ver si, personal y objetivamente, tengo las actitudes de koraj para casos específicos. Porque sería una existencia humana falsa el que le dice «sí» a la vida, pero su incosnciencia no la ama
Este tipo de textos me provocan varias preguntas pero trato de enfocarme en alguna que aporte algo para la vida, por ejemplo, qué pudo haber hecho Koraj para controlar su afán de figurar un poco más siendo que ya era alguien relevante.
Cabalaterapia