Tu Bishvat: Celebrando la Naturaleza y la Vida

Tu Bishvat es una festividad judía que se celebra en el día 15 del mes de Shevat. Es conocida como la «Fiesta de los Árboles», aunque en realidad deberíamos mencionarla como «Año nuevo del Árbol», pues esa es la denominación clásica en las fuentes.
En su origen y durante milenios no fue ninguna festividad, sino una fecha necesaria en el almanaque de las tareas agrícolas y de los impuestos relativos a la explotación agrícola en la tierra de Israel.
Luego, a influjos de corrientes místicas muy mínimas, fue adquiriendo un cariz de semi festividad, que se celebraba específicamente en el hogar, comiendo frutos de los que son directamente vinculados a la tierra de Israel.
Es en tiempos recientes, que se ha dado un sentido ajeno por completo a la esencia de la fecha, convirtiéndose su objetivo en conmemorar el ciclo anual de la vida y la creación del mundo, como una oportunidad para reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza y con la vida en general. De hecho, en el Estado de Israel se comenzó a estilar que los niños salgan a los campos y se dediquen a tareas en el mismo, más particularmente, la plantación de árboles.
Como hemos dicho, esto es un invento moderno y que va ganando terreno, pero sin sustento en las fuentes tradicionales.
Aquellos que hacen sus celebraciones, está muy bien que no olviden el sentido original y la responsabilidad hacia el ambiente, más que innovar en liturgias y rituales que Dios no ha pedido de nadie.

Igualmente, cabe destacar que los seres humanos a veces pareciera que olvidamos que somos parte integral de la naturaleza y debemos trabajar juntos para cuidar y proteger la vida en el planeta. Debemos ser conscientes de nuestro impacto en el ambiente y hacer lo posible para minimizarlo y preservar la vida para las generaciones futuras.
En esta fecha recordamos que todos estamos conectados y que la vida es un regalo precioso que debemos cuidar y proteger. Debemos ser agradecidos por todo lo que la naturaleza nos brinda y hacer nuestra parte para mantener un equilibrio sostenible entre la vida humana y la vida en el planeta.

En estos momentos en los cuales en Uruguay y países cercanos se está padeciendo de una fuerte sequía, quizás es relevante que tomemos conciencia y nos pongamos en campaña para hacer un uso empático de los recursos naturales, cuidar el agua y otros bienes que generosamente Dios nos provee a través de la naturaleza.
Aquellos menos activos quizás se conformen con plañir o rezar, que está bien, pero realmente es insípido e insuficiente teniendo tanto por hacer y aprender a hacer.
Así pues, les invito a realizar obras de bondad, con el prójimo y la naturaleza, porque ello redunda en grandes bendiciones y en el beneplácito del Padre Celestial, muchísimo más que cualquier palabra santa que se crea con poderes para invocar la clemencia Divina.

¡Feliz Tu Bishvat! Y que sepamos de buenas noticias pronto.