Sr. Director de Semanario AURORA, en ISRAEL. B”H”
Melilla, (España), a 28 de febrero de 2007.
Estimado sr MARIO WAINSTEIN:
Soy suscriptor de su semanario desde hace muchos años. En este sentido, le quiero felicitar por su acción en pro de la divulgación de las noticias de Israel para los hispanoparlantes. Siempre me ha gustado el diseño y explicación de su periódico, aunque discrepo, pero respeto, sobre su línea editorial.
Como le dije hoy por teléfono, me identifico como sionista-religioso. O sea, soy judio practicante de nuestras sagradas leyes y costumbres, y a la vez, amo al Estado de Israel como Hogar Nacional Judio, pues según nuestra Tradición Biblica milenaria, es
Por tanto, hablamos entre personas que amamos Israel y a nuestro Pueblo sagrado. Le diré para mayor abundancia de detalles sobre mi persona y para que no se me prejuzgue como racista, que tengo en mi ciudad buenos y viejos amigos tantos cristianos como musulmanes. La condición religiosa no es handicap para una sana amistad.
Entraré ya en el fondo de asunto, sobre la publicidad que insertan sobre el llamado Yoshua Hamashiaj, en la página 15 de su edición del 22 al 28 febrero, aunque ya vienen publicando artículos similares desde hace unas 6 semanas. Mis argumentos contra esta publicidad son los siguientes:
1.- Respeto que un periódico se debe financiar con recursos publicitarios. Asimismo, no toda publicidad es válida, solo aquella que no daña los sentimientos o derechos de las personas. ¿Publicaría usted propaganda nazi?, obviamente no, pues hiere directamente la sensibilidad de todo nuestro pueblo. Por tanto, el periódico debe tener un código deontológico que oriente sobre qué es lo que se puede o no permitir anunciar.
2.- Usted me decía que este tema había suscitado debate en su editorial, y que se decidió publicar porque “no quería ser juez”. Estimado Mario: Todos actuamos como jueces a lo largo del día. Es inevitable tomar parte y elegir sobre numerosas actuaciones. Usted tiene la obligación, como director, de decidir lo mejor para su semanario, y por supuesto, que tiene que ser juez. De alguna forma, al publicar esta propaganda, se inclina favorablemente, aunque ello no significa que la comparta. Como expuse arriba, ¿publicaría propaganda nazi?, ¿Seria ahora juez?. La respuesta es clara. Entonces, ¿Por qué evitaría la publicidad nazi y no evita o no “enjuicia” la mesiánica?.
3.- Me permito tomarme la frivolidad de dar una posible respuesta: Desconoce quienes son los mesiánicos, de igual forma que conoce bien quienes son los nazis. Y con ello, no quiero ni deseo hacer ninguna comparación. Como le dije, conozco de cerca y directamente, por motivos que no vienen al caso, quienes son los mesiánicos. Brevemente: Son cristianos que creen en la vuelta de Jesús, el Mesías que traerá la redención al mundo entero.
Debe saber que no hay mayor logro para este grupo que el convertir a judíos. Ello demuestra que Jesús no estaba equivocado. Cuando Jesús dijo que era el Mesías de los judíos, y además, el hijo de Dios, el 95% de los judíos no lo aceptó. En una época de máximo resplandor de nuestra religión, con el Segundo Templo en pie, y toda la plana mayor de rabinos, filósofos y estudiantes de nuestra sagrada Tradición, no se aceptaron sus postulados. Obviamente, y bajo el prisma de los 3 primeros Mandamientos, la aceptación de Jesús como hijo de Dios o como Mesías, supone una autentica blasfemia al nombre del Creador y una forma de idolatría. NO lo digo yo, sino el 95% de los judíos de la época, todos observantes, mas los cientos de millones de judíos que a través de todas las generaciones siguen esperando la llegada (no la vuelta) del Mesías. De todas formas, ahondar ahora en este tema seria tocar la llaga herida, y discutir sobre lo que estoy seguro es
4.- Cada vez que un judío cree en Jesús como alguna forma de divinidad, ya sea Mesías, hijo de Dios, o cualquier otra forma lejos de su naturaleza puramente humana, el mesiánico consigue un punto, un premio para los suyos, pues ellos consideran la existencia de los judíos como una afrenta a sus teorías sobre Jesús. Ellos se preguntan: ¿Por qué los Judios no creen en Jesús?: Porque nosotros pensamos que este señor ni era el mesias, ni mucho menos el hijo de Dios, ni nada de nada. Solo un judio con ciertos conocimientos del Talmud que tuvo un día una visión espiritual equivocada. En resumen, mi existencia como judio desafía la supremacía de Jesús como divinidad, pues no olvidemos que el origen de Jesús era judio.
5.- Como usted me dijo, los mesiánicos-evangélicos aman a Israel. Es cierto. Sus aportaciones economicas a nuestro Estado no son desdeñables. Pero no a costa de todo. Le dire lo mas importante de esta carta: EL UNICO PROPOSITO DE ESA PUBLICIDAD ES CONVERTIR JUDIOS AL EVANGELISMO. Como publicista que es usted, ¿cual es el motivo de anunciar algo?: Vender o convencer. Cuando en ISRAEL se publicita sobre las bondades de Yeshua, quieren vender el producto “creer en Yeshua” al pueblo judio. No lo parece, y le explicaré el motivo.
6.- Si se fija bien en su contenido observará lo siguiente: El texto parece escrito por judíos, pues usa nuestras fuentes bíblicas. De hecho, dice “si quiere profundizar en las raíces hebreas…”, amen de citar multitud de profetas como Isaías, Oseas, etc. Ese es el modus operandis: Somos como judíos, os respetamos y conocemos vuestra el Talmud y
7.- Como ve, sr. Wainstein, es toda una manipulación basada en el poco conocimiento que por desgracia, gran parte de nuestro pueblo (especialmente en sudamérica) tiene de nuestra milenaria, rica y sabia Tradición. Este pobre yehudi no conoce la herencia por la que millones dejaron su alma y sacrificaron su ser por transmitir intacto el legado judio del monte Sinai. Términos como Shabbat, Kosher, Succot, Pesaj, Talmud, Tefilim, Ahabá, Jesed, Tzedaka, Shalom, Berit Mila, Bar Mitzva, Kipur, Januca, todos son conceptos milenarios que nuestros abuelos nos transmitieron cuidadosamente, aun arriesgando su vida, y que este señor que acepta a Jesús ya perdió, y además, con anestesia.
Algo a tener en cuenta: Puede consultarlo en la pagina web www.serjudio.com, llevada magistralmente por el Profesor Uruguayo Yehuda Ribco. Cuando un judío (original) cree de alguna manera que Jesús fue el hijo de Dios, o bien el Mesías, o cualquier forma de divinidad, mas allá de su estricta naturaleza humana y mortal, se suspende sus derchos como judío, aunque no sus deberes, de cierta manera podemos afirmar que DEJA DE SER JUDIO. Es como jugar al fútbol con la mano. Un hebreo puede no ser kosher, comer cerdo en Kipur y trabajar en Shabbat, pero sigue siendo judío. Pero desde el momento en que rompe las reglas básicas del juego, no cree en UN SOLO DIOS (no tres, padre, hijo y espíritu), y cree, contra el Tercer Mandamiento, en INTERMEDIARIOS PARA LLEGAR A DIOS, o salvadores mesiánicos, entonces, está fuera del club. Ya no es judío, hasta que alguna vez alguien le haga ver su error y vuelva a su pueblo. NO lo digo yo, sino la absoluta totalidad de los más intelectuales sabios, rabinos y dirigentes judíos de todas las épocas. Incluso las corrientes judías conservadores y reformistas (que no comparto) reniegan de Jesús.
8.- Ahora podemos comprender la gravedad de esta publicidad: Ellos. los evangelistas-mesiánicos, aparecen casi como judios, cercanos, conocedores de nuestra tradición. Dicen que nos aman. Y publican en ISRAEL, en nuestra casa, nuestra tierra milenaria, un articulo que se llama “CONOCIENDO AL MESIAS POR LAS RAICES HEBREAS”, donde NO SE IDENTIFICAN COMO CRISTIANOS, y hablan de Jesús, o peor todavía Yeshua, como Mesias, pidiendo claramente su llegada: “ven pronto Adon Yeshua”, (fíjese que no dice vuelve pronto, sino ven pronto, para mas engaño), colocan en el centro de articulo, en sombreado. ¿¿Ve ahora como venden su producto??
9.- Ahora, Sr. Wainstein, póngase en el lugar de un judío que siempre estuvo alejado de las fuentes, el típico laico con ciertos resentimientos hacia la clase religiosa (a la que erróneamente acusa de robarle el dinero a traves de los impuestos que financian a las yeshivot, no hacer el servicio militar, etc), que pasa kashrut, shabbat, etc, seguramente porque nunca lo vió en su casa, por pereza, por comodidad o sobre todo, por desconocimiento de sus obligaciones hacia su Padre Creador. Y este señor lee esta publicidad, que además, parece un artículo de opinión, pues solo al final y en letra muy pequeña, se lee “espacio publicitario”. Y decide contactarles. Y le cuentan todo ese rollo de que Jesús es amor, etc, que era judio como tú… bla, bla, etc. Y lo llevan al templo, donde no hay cruces ni símbolos cristianos, para no espantarlo. Y al final este pobre hombre cae en la trampa. Sabe que pasa: Pues que tenemos un yehudí menos. Un hermano suyo, un hermano mío, ha muerto, espiritualmente hablando.
10.- Los goyim no son nuestros enemigos. Pero no tengo que recordarle cuanta sangre judía se ha derramado en nombre de Jesús. Desde la expulsión de los judíos de España, persecuciones, las cruzadas, hasta la pureza de la raza aria cristiana, y un largo etcétera. Mil y una desgracias en nombre de la más pura ortodoxia cristiana: O te conviertes y aceptas a Jesús o mueres. Así era antes. Ahora los tiempos han cambiado, y ponen la cara amable, de amor, pero la intención es la misma: CONVERTIR A LOS JUDIOS.
Espero y deseo que después de estos argumentos entienda que sufro mucho cuando leo esta publicidad. A mi no me van a convencer de nada, pese a que tienen buenos oradores y embaucadores, pues conozco perfectamente quien fue este personaje, toda una desgracia para nuestro pueblo. Apelo a su responsabilidad como judío, como israelí, para que la retire de inmediato y escriba un editorial de aclaración.
Como medida para mostrar mi disconformidad con esta política, y si no se retira dicha publicidad, le ruego proceda a tramitar mi baja como suscriptor del semanario AURORA. Es mi derecho al pataleo y protesta. No me queda otra opción.
Con el deseo de que se produzca la oportuna rectificación, le saluda atentamente, y le deseo la mejor Bendición del Creador, para que tenga una vida saludable, larga, llena de satisfacciones y que pueda seguir con su labor informativa acercando Israel a los hispanoparlantes. Amen.
Le autorizo a publicar esta carta, siempre que se reproduzca integramente.
Fdo: ELIAS BENDAHAN HAMU, economista.
http://serjudio.com/rap3351a3400/rap3396.htm
Creo que a los noájidas nos corresponde hacerle frente también a este problema, dejar de mirar con indiferencia a los misioneros, decirles NO, de frente, no importan que sean muy amables, pero al mal se le trata así, con firmeza, no a la persona, lástima que a veces esten tan ligados el uno al otro.