Una frase del Rav Kook, uno de los líderes espirituales y filósofos judíos más influyentes del siglo XX, es: «La verdad es la luz de Dios«.
Esta frase refleja la creencia del Rav Kook de que la verdad es una manifestación divina en el mundo y es esencial para la realización de la justicia y la paz en la sociedad.
El Rav Kook enfatizó que la Verdad (con mayúscula) es sinónimo de Dios, tal como encontramos está declaro en nuestra más antigua Tradición.
Aquello que nosotros humanamente conocemos como «verdad» no es algo estático o absoluto, sino que evoluciona y se desarrolla a medida que las personas y la sociedad crecen y se desarrollan. Es el infinito desarrollo de nuestra cualidad humana para alcanzar nuestra infinita personalidad esencial, que es la NESHAMÁ.
Por tanto, no existen muchas verdades, sino una sola Verdad. Luego, tenemos el esfuerzo que cada uno hace para acercarse a esa Verdad, cuyos resultados llamamos (con atrevimiento) verdad.
Si entendemos bien el planteo, por más de que no existen muchas verdades, hay algunas que son más verdaderas que otras.
Siempre es importante buscar y apoyar la verdad, incluso cuando no es cómoda o fácil de aceptar.
Esta frase del Rav Kook es un recordatorio de que la verdad es un valor fundamental en la vida y que debemos esforzarnos por alcanzarla y abrazarla en todas las situaciones. Al hacerlo, podemos crear un mundo más justo y equitativo para todos.