Día 8, que es una semana y un día del Omer (23 Nisán).
Trabajamos sobre Jesed en Guevurá.
Jesed, es la cualidad emocional de la generosidad sin restricciones, del amor profundo que liga sin límites.
Guevurá, es de la autodisciplina, las limitaciones, el estricto rigor, la justicia, el vigor.
Analiza los aspectos en tu conducta total (pensamientos, palabras, sentimientos, deseos, actos) que reflejen tu generosidad que se manifiesta por medio de la autodisciplina y la severidad.
Respóndete, si quieres y puedes: Cuando juzgas a otros, ¿los haces fundando tus apreciaciones en el amor?
¿Reconoces que lo que tú consideras negativo en otro, realmente es parte de tu conducta habitual que temes reconocer en ti mismo?
¿Tiendes a ser más inquisitivo con el otro que contigo?
¿Te molesta cuando otros te señalan tus problemas, pero te deleitas acusando y sometiendo a juicio a los demás?
¿Hasta dónde las sombras que encubren la luz de tu existencia son proyecciones de tus oscuridades?
Si cuando actúas juzgando al prójimo, lo haces impulsado por algo diferente del amor, siempre encontrarás fallas y errores en el otro, de modo tal de ayudarte a cegar los mismos errores y fallas en ti.
Si te falta amor verdadero, entonces ves en el otro lo que realmente te está faltando, pero temes reconocer.
Para amar al otro, es necesario corregirlo, enmendarlo, incluso se puede llegar al grado de tener que distanciarse de modo tal que pareciera que no se lo ama, cuando en realidad se busca lo mejor para él y para ti.
Por ejemplo, un padre que prohíbe al hijo jugar con un cuchillo, y lo hace de modo severo, ¿está demostrando amor o indiferencia por su crío?
El niño sentirá que se lo reprende, que no se lo quiere… pero, ¿no es eso el pensamiento de un niño pequeño?
Igualmente, en el fondo el niño agradece el límite, recibe con beneplácito el regaño justo y amable, porque lo precisa, porque le ayuda a crecer, porque es la pata que precisa para avanzar en su camino de manera saludable y no a los sobresaltos.
Amar no es meramente sentir amor, ni dejar que las cosas sucedan porque sí; amar implica límites, rigor, incluso juicio… mientras sea basado en consideración por el prójimo y en pos del amor verdadero, es decir, de descubrir lo mejor que el amado (y uno mismo) tiene escondido en su interior.
Durante este día, examina tu vida, si reconoces que actúas proyectando tus zonas oscuras en el otro (, y todavía presumes de que lo amas); entonces debes saber que hay aquí un aspecto tuyo que debes trabajar con ahínco.
(http://serjudio.com/cabalaterapia/omer008.htm)