El primer día de consagración del Santuario vendría el líder de la tribu de Yehudá a ofrendar lo acordado como presente de cada presidente de tribu.
Al respecto dice la Torá:
«El que presentó su ofrenda el primer día fue Najshón hijo de Aminadab, de la tribu de Yehudá.»
(Bemidbar/Números 7:12)
Parece que no hay mucho para aprender.
Hasta que llegamos a la presentación del resto de los líderes, cada uno en su día.
Porque con ellos se dice:
«El segundo día presentó su ofrenda Natanael hijo de Zuar, jefe de Isajar.»
(Bemidbar/Números 7:18)«El tercer día presentó su ofrenda Eliab hijo de Jelón, jefe de los hijos de Zebulún.»
(Bemidbar/Números 7:24)
Y así sucesivamente hasta:
«El día duodécimo presentó su ofrenda Ajira hijo de Enán, jefe de los hijos de Naftalí.»
(Bemidbar/Números 7:78)
Prestemos atención, por cada presidente se dice que lo era, a excepción de Najshón de la tribu de Yehudá, con él solamente se dice que venía por su tribu.
¿Por qué?
Varios son los motivos que sabios e intérpretes de varias épocas y lugares han compartido con nosotros, a mí me gustaría mencionarte solamente uno ahora.
Najshón no precisaba esconderse detrás de títulos, o anteponerlos para sentirse importante.
Él era Najshón, el hijo de Aminadab, con ello estaba más que complacido y confiado en hacer su parte correspondiente.
Había logrado construir una personalidad sólida, equilibrada, saludable, que era un buen reflejo de su NESHAMÁ.
Por lo cual, había menos cáscaras y máscaras que ocultaban su verdadera identidad y mucho más de su esencia sagrada manifestada por su conducta cotidiana.
Por ello no recurría habitualmente a las trampas del EGO, porque recordemos que cuanto más próximo es nuestro Yo Vivido a nuestro Yo Esencial, menos intromisión del EGO y mayor dominio racional-afectivo-social de nuestras acciones (pensamiento, palabra y actos).
Por ello podía ser coherente con la construcción de SHALOM, pues irradiaba bondad y justicia, en la medida equilibrada y apropiada a la circunstancia.
¿Qué podemos aprender para nuestra vida cotidiana?
Es una importante lección.
Mmm… Sí, hay personas que antes de decir su nombre se presentan con sus titulos, y si tienes varios los anteponen todos. Es un afán de reconocimiento? Baja autoestima? Demostrar qué?
En fin…
como doctor en teologia, o cosas por el estilo
A mi se me ocurre otra cosa, el señor Najshón de la tribu de Yehudá tuvo que equivocarse mucho antes de llegar a ser él mismo. Lo que se nos contó en artículo anterior sobre el mar rojo, me pareció muy arriesgado. Ahí tal vez era el Jefe, lo que se esperaba del lider.
había otros líderes que no hicieron lo que el hizo