por Ajarei-mot – Kedoshim – "Y no cargarás por él pecado."
Síntesis de la Perashá:
Este Shabat se leen dos Parshiot: Ajarei-Mot y Kedoshim. Ajarei-Mot habla del servicio de Yom-Kipur (de hecho esta parte se lee en ese solemne día), y después habla la Perashá de dónde se pueden hacer servicios a Hashem, y termina hablando de las prohibiciones de la inmoralidad sexual. Perashat Kedoshim trata muchas y muy diversas mitzvot (trae 51 preceptos), tanto de carácter interpersonal, como aquellos de aspectos entre Di-s y el hombre.
Mensaje:
Como ya dijimos, Perashat Kedoshim trae variados tipos de mitzvot. Muchas de ellas hablan acerca de la conducta con respecto al semejante, como la de amar al prójimo, no guardar rencor, no vengarse, no andar de chimoso, salvar a otro de un posible peligro, y varios otros. Al versículo al cual quiero enfocarle especial atención en el comentario es éste (19:17):
"No odiarás a tu hermano en tu corazón, reprochar reprocharás a tu hermano y no cargarás por él pecado."
Conforme a cada exégeta de la Biblia (en este caso me refiero a Rashí, Rambán y Únkelos) se le da a este pasuk una explicación diferente de las cuales aprendemos distintas cosas:
Explicándolo conforme a Rashí: Al reprochar a tu amigo por su falta, ten mucho cuidado de no avergonzarlo. A esto agrega Maimónides (Hiljot Deot 6:8): El que hace avrgonzar a su prójimo, sobre todo en público, pierde su parte en el mundo venidero.
Explicándolo conforme a Únkelos: Reprocha a tu prójimo por su falta, y no cargarás con su culpa. ¿Pero si el otro es el que está haciendo la falta, por qué he de yo cargar con la culpa? Todo yehudi es "arev" ("arev" se puede traducir: responsable, abal, garante, o involucrado) uno por el otro. Por eso, si el otro hace una falta, uno también corre con culpa, y al parecer, conforme a este pasuk, al reprocharlo se libra uno de dicha responsabilidad.
(Un pasaje del Talmud dice: ¿Hasta cuánto se reprocha? Hasta recibir insultos, y otra opinion dice golpes, de parte del reprochado. Cabe recalcar que el aspecto Halájico del reproche es algo bastante delicado, y al parecer no cualquiera lo puede hacer [ver Arajín 16b, Mishléi 9:8])
Explicándolo conforme a Rambán: Reprocha a tu amigo por algún resentimiento que tengas acerca de algo que él te haya hecho, para que se aclaren y arreglen las cosas, y asi no cargues tú con el pecado de odiar a tu prójimo en el corazón, guardándote el problema.
Aquí vemos porqué la Torá es Torat Jaím (un instructivo de vida, o también un instructivo viviente), porque tan sólo tres o cuatro palabras de un pasuk, por medio de la Torá Oral (los comentaristas), se nos dan múltiples variadas, profundas e importantes lecciones para la vida.
Tuvia Krawchik (Kraviahu).
Petaj Tikva
Israel
