Es evidente que el enojo no es saludable, que altera el plano emocional, lo físico, lo social. Se impone como un escollo a lo intelectual. Incluso, obstaculiza el desarrollo pleno de nuestro plano espiritual.
De acuerdo a nuestra Tradición, aquel que se enoja pierde sus mejores capacidades, al sabio se le evapora su sabiduría, al profeta se le opaca su don profético.
Incluso en nuestra Tradición se nos señala que el de ánimo enojoso es similar al idólatra, puesto que no pone al Eterno en el centro de su existencia, sino al mal humor.
Es sabido que el que está llevado por el enojo, difícilmente cumple cabalmente con los precetos y por tanto, se aparta de la senda de la Vida.
Queda claro que es una característica lamentable, pesada, desechable pero muy difícil de manejar y mucho más de erradicar del repertorio personal de conductas.
Te daré algunos consejos que provienen de nuestra Fuentes y humildemente algunas pautas saludables que fui aprendiendo a lo largo de mi vida.
Espero que todo esto te sea de beneficio y bendición.
1- Dedica un tiempo para el estudio de Torá. Que no sea un tiempo casual, ni como entretenimiento, sino un tiempo fijo, dedicado, preparado para poder ahondar en la medida de tus posiblidades y capacidades en la Fuente inagotable de Vidas.
2- Hazte un tiempo para estudiar también las obras de los maestros del Musar, la ética instruída por sabios y maestros de Torá, de acuerdo a los parámetros trascendentes de la Torá.
Recuerda que el estudio sistemático de estilos de conducta facilita su puesta en práctica, y cuanto mayor te ejercitas en una determinada conducta, más se torna un hábito en ti.
3- Confía en el Eterno y pide que desde Arriba te sea enviada calma, serenidad, ánimo de justicia, misericordia. Eleva tu plegaria al Eterno para que puedas autocontrolarte y aprender a vivir con ecuanimidad, en pos de la justicia pero sin caer en conductas desagradables.
4- Da mucha, abundante tzedaká si tú eres rápido para el enojo. Abre tu mano con amplitud, asiste a los pobres y necesitados, brinda tu apoyo a los que enseñamos Torá. Todos debemos ser caritativos, pero es una ordenanza particular para los iracundos, que desprendiéndose de sus bienes materiales van aprendiendo a desvestirse de su ego para recibir mayor poder espiritual.
5- Guarda silencio si te ofenden y no se da ningún paso positivo al responder. El que silencia su respuesta ante las agresiones, es capaz de encontrar caminos más sutiles y afinados para obtener compensación por el daño que recibe.
6- Si has de responder a las agresiones, entonces hazlo con palabras mesuradas, sin insultos, sin agravios y especialmente sin levantar la voz. Habla en voz baja, hasta con dulzura con aquel que te provoca. Verás como eliminas tu propia amargura y tuerces el brazo del agresor.
7- Procura sonreír en todo momento.
8- Aplaza tu respuesta. No respondas de inmediato, no seas como cabeza de fósforo (cerillo) que se enciende al primer raspón. Si es posible, deja pasar una noche antes de dar tu respuesta. Da un paseo, toma aire, ventílate, vé a otro sitio, pero no respondas.
9- Pon por escrito lo que tanto te ha dolido. Léelo luego en voz alta. Verás como probablemente no encuentras motivo real para el enojo.
10- Cuando sientas el ardor subir a tus mejillas y sabes que pronto explotarás, mete tu mano a tu bolsillo y da tzedaká.
11- En vez de responder, repite versos de los Salmos.
12- Ten en tu armario la ropa del enojo. Solamente puedes expresar tu enojo cuando te has vestido con ese uniforme que tienes reservado.
13- Emplea la Comunicación Auténtica. (Busca acerca de ésta en nuestro sitio, serjudio.com, en la sección de CTerapia).
No guardes rencor, no atesores malos pensamientos, no escondas tus emociones, sino que mejor las expresas de manera constructiva.
14- Aprende a dialogar, a contradecir, a recibir negativas. Entrénate con gente de tu confianza, con personas que sabes que no te dañarán, para que de esa manera estés preparado para el momento de la tensión.
Si no tienes amigos, o amigos con los que puedas ejercitarte, recuerda que para esto también servimos los psicólogos.
15- Hablando de psicólogos, si te reconoces como una persona fácilmente irascible, es oportuno que tomes algunas sesiones de CABALA-TERPIA online. ¿No crees?
Así podremos trabajar extensa y profundamente el origen y sostén de esta pesada carga en tu vida
16- Sé agradecido. Reconoce las bondad que recibes del Eterno y los favores con que te agracia el prójimo. Una persona generosa y realmente agradecida difícilmente cae en el pozo del enojo.
Hasta aquí los consejos de esta ocasión.
Me gustaría recibir tus comentarios luego de que los pongas en práctica.
Gracias moré..Hashem te bendiga a ti y a tu familia. Que hermosos consejos!! Los he estado aplicando a mi vida y hasta me sorprendo al verme reaccionar…cada vez que he tenido una ocasión de enojo, de explosión.. sus escritos han retumbado en mi mente. Le agradezco profundamente y felicito su trabajo:-)
Estos son los consejos que necesitaba leer ademas de los obvios, para enfrentar y superar la situación que estoy viviendo muchas gracias.
El estar enojado es una respuesta desde el propio EGO; como respuesta a la falta de potencia o control. Eso esta claro. El estar enojado necesita un objeto de descarga (dios, una persona, una cosa, uno mismo) para canalizar la energia negativa que se acumula; eso produce el desastre en las ideas, las relaciones, la salud, etc. Eso esta claro tambien. Lo que cuesta aceptar es que se vive en una realidad donde la unica realidad es el de la impotencia. Se vive sumergido en el mar de la impotencia, como el feto vive en el liquido amniotico. He llegado… Read more »
interesante observación