Como las mujeres son de Venus y los hombres son de Marte,
Dios puso en medio a la Tierra.
De esta manera es posible que encontremos conexiones entre nosotros.
Aprendamos a conocer nuestras partes masculinas y femeninas,
desarrollemos al máximo nuestro potencial,
gracias a nuestras limitaciones,
entonces podremos estar más propensos a construir SHALOM armoniosamente
y no a través del conflicto.
Actuemos siempre en base a la bondad y a la justicia,
en pensamiento, palabra y acción.
El paraíso terrenal es cercano,
es posible.
Lindo. Gracias Moré.