Tu sistema de creencias determina tus ideas, así como te condiciona a tus sentimientos, lo cual da como resultado que actúes de tal modo que se confirmen tus creencias.
Relee el párrafo y explícalo con tus palabras y dando algún ejemplo.
Así, si tu sistema de creencias dibuja en tu mente la imagen del fracaso, entonces estarás atrapado por una red de frecuentes fracasos.
No sabrás explicarlo, quizás ni siquiera te des cuenta, pero de manera habitual se repiten los patrones básicos de conducta que no escapan de los parámetros dados por las creencias.
Si no tienes conocimiento de esto, quizás pienses que sucede un extraño destino que se ensañó contigo y te repite similares situaciones, porque con ellas se verifica el sistema de creencias.
Con cada repetición el sistema de creencias se afirma y cobra mayor dominancia.
Entonces, se va haciendo como de piedra, casi como si no pudiera modificarse. Un verdadero destino que vas fabricando sin saberlo.
Ocurre también que nos encaprichamos con nuestras creencias.
Pero, como estamos tan atados a/por ellas, aunque apareciera algo que las contradiga, finalmente nos apoyamos en ellas y renegamos de lo que pudiera crear una salida a nuestra calamitosa situación.
¿Comprendes esto?
Es como la persona golpeada por su cónyuge, que aunque llegue a denunciarle en la comisaria, igualmente vuelve a la casa a convivir, aumentando así la espiral de dolor y violencia.
Nuestros dramas sirven para alimentar entidades que adquieren energía emocional negativa.
Esa energía que nos resta a nosotros, a nuestra dicha, crecimiento, felicidad, estabilidad, prosperidad… energía y recursos que derrochamos en cavarnos un pozo de torturas, en encadenarnos a lo que nos agobia.
Por ejemplo, una persona gentil (atrapada por la religión del falso salvador del madero) me preguntó acerca del diezmo, porque sentía que los pastores cristianos se estaban aprovechando de él y de la comunidad a la que concurría.
Le explique del engaño de la religión, de toda religión, y le instruí a que no se debe seguir ninguna, sino conocer la propia identidad noájica y vivirla a pleno.
Además le informé que el mandamiento del diezmo era en la antigüedad para judíos y que como gentil no tiene obligación de sacar el diez porciento porque para Dios eso no tenía sentido; pero que con el dinero regalado a la religión no solamente no estaba cumpliendo sino que además estaba incurriendo en algunos pecados graves. (https://serjudio.com/exclusivo/respuestas-a-preguntas/resp-6099-doble-trampa).
¿Esto motivo que de inmediato se hiciera un replanteo de sus creencias?
¿Lo llevó a profundizar en los motivos que fundamental mi afirmación de la perversidad de toda religión?
¿Quiso indagar en ese pacto eterno y sagrado de los gentiles con Dios, llamado noajismo?
¿Preguntó cómo hacer para llevar una vida a la LUZ del Eterno?
Es decir, ¿se atrevió a confrontar su existencia, al menos un poquito, para mejorarla?
No, para nada.
Al menos no me dijo nada al respecto.
Sino que preguntó cómo es que los judíos cumplen con el mandamiento del diezmo.
Algo parecido es lo que nos pasa en multitud de aspecto a nosotros.
Nos demos cuenta o no.
Y por lo general, no lo hacemos.
Apresados por estas trampas mortales de las creencias convertidas en preceptos de vida, e incluso automatizadas.
La cuestión está en poder preguntarse y comenzar a raspar la coraza de protección que mantiene toda esa estructura pesada y mortal.
A través de los siglos, la religiones han sido como castillos de arena. Sucumben ante sus débiles bases, e irónicamente se vuelven a construir sobre mas castillo de arena. Los dioses griegos, romanos, egipcios, aztecas, mayas etc llegaron, pasaron y se fueron. A todas ellas solo ha permanecido la verdad, y nosotros los gentiles podemos encontrarla aquí, en Fulvida. Gracias a este medio no estamos restringidos para consultar, analizar, comparar, preguntar y decidir. A diferencia de siglos pasados, cuando con el terror y la amenaza se obligaba a los pueblos a seguir un determinado adoctrinamiento religiosos, hoy día podemos encontrar… Read more »
Muy amable, a compartir Luz
Gracias al Eterno por la Luz compartida y asimilada, ojala otros tengan oportunidad y sepan aprovecharla para el bien de sus almas.
amen, quiera el Eterno de que asi sea