Mis queridos amigos y amigas,
Pronto daremos la bienvenida a un nuevo año, lleno de oportunidades y posibilidades. En estos tiempos de cambios y desafíos, quisiera compartir con ustedes una historia que nos inspira a reflexionar y encontrar esperanza en medio de la incertidumbre.
La historia del «Rey Desnudo» nos recuerda la importancia de la autenticidad y la honestidad en nuestras vidas. En el cuento, el rey se engaña a sí mismo y a su pueblo, creyendo que está vestido con un traje magnífico cuando en realidad está desnudo. Solo un niño inocente se atreve a decir la verdad, rompiendo el hechizo de la ilusión.
En este nuevo año, les animo a ser como ese niño valiente, dispuestos a enfrentar la realidad con honestidad y humildad. A veces, podemos caer en la trampa de la vanidad y la apariencia, pero debemos recordar que la verdadera grandeza reside en la autenticidad y la sinceridad.
Enfrentemos los desafíos que nos esperan con valentía y determinación, reconociendo que la verdad y la honestidad son fundamentales para construir relaciones sólidas y una sociedad justa. No permitamos que el miedo o la complacencia nos impidan ser verdaderamente nosotros mismos y luchar por lo que es correcto.
Además, recordemos que la esperanza se encuentra en la capacidad de escuchar y responder a las necesidades de los demás. En este nuevo año, busquemos oportunidades para ser compasivos y solidarios, extendiendo una mano amiga a aquellos que más lo necesitan. Juntos, podemos marcar la diferencia y construir un mundo más justo y lleno de esperanza.
Al acercarnos al comienzo de este nuevo año, les deseo a todos ustedes una temporada de renovación espiritual, fortaleza interior y bendiciones abundantes. Que encontremos la valentía para enfrentar la verdad, la humildad para reconocer nuestras propias vulnerabilidades y la esperanza para construir un futuro mejor.
Shaná Tová Umetuká, un dulce y próspero año nuevo para todos.
Con cariño,
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