por Shabbat: Tevet 13, 5768; 22/12/07
Un comentario de la Parashá Vaieji (Bereshit 47:28 – 50:26)
*Una sonrisa*
¡Bienvenido lector apreciado!
Llegamos con esta parashá a la finalización del primer tomo de la Torá, Bereshit/Génesis.
Hemos recorrido una larga historia, plena de misterios y enseñanzas.
Comenzamos con los escasos datos que vislumbramos de la creación ex-nihilo; pasamos por diferentes fases de crecimiento y destrucción de la humanidad; nos encontramos con el pacto eterno entre el Eterno y la humanidad (el pacto noájico); presenciamos el nacimiento de Israel; fuimos testigos de las peripecias de nuestros ancestros, hasta llegar finalmente a su radicación en la tierra de Egipto.
El libro de los comienzos, del universo, de la humanidad y de la nación judía, se cierra con esta parashá; pero, nuestros estudios nunca terminan, pues la Torá es una fuente inagotable de sabiduría.
En este encuentro te quiero hacer notar una instrucción sencilla pero poderosa para perfeccionar nuestra vida.
Presta atención a estas palabras correspondientes a una parte de la bendición del patriarca Iaacov a su hijo Yehuda:
«Sus ojos están brillantes por el vino, y sus dientes blancos por la leche.»
(Bereshit / Génesis 49:12)
Nuestros Sabios (TB Ketuvot 111b) comentan al respecto que en las relaciones interpersonales es más beneficioso y provechoso que uno sonría con franqueza y calidez, que darle de beber al prójimo un vaso de leche.
Cuando sonreímos, provocamos una respuesta positiva en nuestro interlocutor, un ambiente de armonía nos circunda.
Piensa en las veces que vas por la vida con cara de enojo, de poco amigos, de amargura, de protesta, de resentimiento. Recuerda esas ocasiones, tenlas en mente en este momento. Dime, ¿acaso las respuestas que recibes son cálidas y satisfactorias?
¿O te devuelven miradas de hostilidad, palabras secas, evasivas contestaciones, «malas vibras»?
Pero, si tu pudieras mantener una sonrisa en tu rostro, o al menos una actitud positiva, favorable, optimista (aunque no necia), ¿cómo crees que sería la reacción de quien tratares?
Pruébalo la próxima vez que te encuentres con alguien.
Esboza una sonrisa, aunque debas esforzarte un poco.
Sé firme en esta actitud positivista, porque de a poco la irás automatizando en tu vida, y surcará tu rostro una franca y mágica sonrisa, en lugar de un ceño fruncido.
Ten presente que en las relaciones humanas sucede algo similar que con las cuerdas de un violín. Si haces vibrar una de sus cuerdas y en la habitación hay otra cuerda de idéntica frecuencia de onda, ésta también comenzará a vibrar, en armonía con la que tú tocas.
Si sonríes, si miras el mundo a través de colores de armonía y entendimiento, prontamente entrarán en tu frecuencia las otras personas, permitiendo establecer un lazo de shalom.
Pero, no debes tener una mueca de sonrisa perpetua en tu rostro, como los tontos. Tampoco haz de reír o sonreír con la desdicha ajena.
Pues la risa del burlador es una cosa nefasta y deplorable.
Comprende que estamos hablando de una sonrisa cálida, que armoniza el rostro con el corazón.
Una sonrisa de confianza y seguridad, pues tienes presente al Eterno y sabes que todos Sus caminos son de bendición y vida.
Una sonrisa de pureza.
Como te dije, aunque debas esforzarte un poco al principio en entrenarte para manifestarla, para provocarla, para hacerla surgir de las fuentes profundas de tu ser.
Allí está inalterable tu neshamá, tu espíritu, que sonríe constantemente a la Luz del Eterno. Desde allí que surja la espirituosa sonrisa, o al menos trata de que emerja.
Por si fuera poco, cuando regalas sonrisas, que no sean solamente una mueca hipócrita, permites que las otras personas se sientan mejor. Esto en sí mismo es un acto de bondad, un jesed, que si lo acompañas con palabras edificantes y actos nobles, son de gran valor e importancia.
Como solía enseñar el Salanter: «Nuestro corazón es de dominio privado, pero nuestro rostro es de dominio público».
Si nuestra actitud es positiva, más pronto que tarde estaremos guarecidos en un ambiente de Shalom.
Hazlo, te lo recomiendo.
¡Te deseo a ti y a los tuyos que pasen un Shabbat Shalom UMevoraj!
¡Qué sepamos construir shalom!
Moré Yehuda Ribco
Su apoyo constante nos permite seguir trabajando
Otros comentarios de la parashá, resumen del texto, juegos y más información haciendo clic aquí.
bellizimo! y la verdad tal como mencionaste ,nuestro rostro es de dominio publico ,cuando le sonreis a alguien,o te preocupas por su bienestar,practicam. le haces el dia..la persona se siente importante,y eso le trae fuerzas positivas,por el contrario si saludas a alguien y no te devuelve el saludo,o mira despectivo etc..eso quita energias y trae negativismo y peleas.esa persona posiblem. te arruino un momento posiblem. lindo q’ tenias anteriorm. y te creo dudas..y porq’ me miro asi ,o no saludo ,acaso le hice algo etc.. cuando en realidad es siempre el problema del q’tiene esa actitud negativa … el q’… Read more »
yep, es increible como nuestro rostro puede influir en aquellos q nos miran, y somos retroproyectores ( creo q asi se dice ), so, es decir proyectamos ya sea lo positivo o tambien lo negativo,
para nosotros es una mitzva el permanecer siempre en simja, gozozos, y en donde manifestamos ese gozo, so, es decir como lo reflejamos, automaticamente lo hacemos atravez de la sonrisa,
asi q a sonreir se ha dicho! right ?
i’m sorry x opinar nuevamente, me gusto mucho lo q dice orah,
q si uno no devuelve el saludo es un ladron, pienso q tiene razon,
a parte de ser un maleducado, pienso q aunq no lo hagan los demas, nosotros debemos de tomar la iniciativa de saludar y por supuesto con una agradable y muy respetable y maravillosa sonrisa !
bue,en realidad son palabras q’ se me grabaron cuando lei el libro de la rebbetzin jungreis the commited life,ella menciona q’ si q’ es como un ladron,y tbn dice lo q’ vos decis!o sea q’ vale saludar primero!aunq’ sea dificil y casi imposible porq’ tenemos nuestro ego claro..
muy bien nina