En este momento Iaacov era el patriarca de una familia dispersa: Iosef (su perdido hijo dilecto, a quien suponía extinto) moraba en Mitzraim; Shimón estaba encarcelado como rehén en el mismo país; mientras que el resto de sus hijos (que habitualmente permanecían en la tierra de Quenaan), ahora luchaban por su "libertad" en ;Mitzraim
En esta parashá se concretará el desenmascaramiento (que estábamos intuyendo la semana anterior) que posibilitará el reencuentro de Iosef con sus hermanos. Luego, Iosef invita a sus hermanos y padre a vivir en Mitzraim y se compromete a mantenerlos en la actual época de feroz crisis, así como en la de próxima prosperidad.
Los hijos de Iaacov vuelven a donde Israel y le transmiten la buena noticia de que su querido hijo Iosef el cual creyó muerto, vive, y es renombrado y reputado adalid en Mitzraim.
La reacción del anciano Iaacov fue: "Iré a verlo antes de morir".
Esto es, el anciano que vivió muriendo durante decenas de años en la infructuosa espera de la aparición del que se fuera y no regresara, ahora reencuentra un rayo de esperanza, pero, aún teñida de lóbrega perspectiva…"verlo antes de morir". Pareciera como si a nuestro sufrido patriarca las buenas nuevas no pudieran hacerlo despegarse de su sufrimiento, y que hasta el día de su muerte permanecería anclado en la misma.
Es decir, la falaz muerte de su hijo predilecto lo atrapó y no lo liberó hasta su propio deceso.
El paradojal sendero del progenitor de un hijo desaparecido en las incongruencias inexplicables de este mundo y que los humanos calificamos como "destino", pero ¿será destino?
Tras la noticia, Iaacov comienza a recorrer el camino hacia Mitzraim, pero antes de cruzar la frontera, se detiene. ¿Reflexiona si el paso que dará es el correcto?
¿Piensa que un pequeño paso, de un lado de la frontera al otro, es en realidad el quiebre en la continuidad histórica que producirá futuros inesperados?
Y más pragmáticamente, quizás razonara si ¿es correcto abandonar la tierra sagrada por el hambre que en ella existe?
¿Está primero el amor a la Tierra o la supervivencia?
Pero, en la multidimensionalidad de las problemáticas él no podía dejar de sentir que el dilema se complicaba con esta otra interrogante, ¿acaso tiene derecho de dejar la Tierra (la cual su padre nunca abandonó), para tener la satisfacción de reencontrase con su hijo? Es que Iaacov no es un cándido turista. Él ya sufrió y conoce la experiencia de la Diáspora, de salir de la tierra de Israel, por lo cual tiene buenos fundamentos para dudar de lo que es éticamente correcto y beneficioso para él y toda su familia, hacer.
Pero, también quizás Iaacov se coloca en el lugar de padre de pueblo, y se separa de su personaje de padre sufrido de un hijo perdido, y ahora, con una perspectiva amplificada, teme por el futuro del pueblo de Israel en Mitzraim. El sabe que su responsabilidad es muy grande, no sabiendo quién velará por el pueblo de Israel tras su muerte. Iaacov se detiene, opacado por la miseria de los pecados terribles de Mitzraim, por la impureza que prestamente invadiría las entrañas de su familia, si nadie se enfrentaba con un escudo de Verdad y Justicia. Y permanece en la frontera, dubitativo e indeciso, para retornar a su camino cuando Hashem le ordena ir a Mitzraim, y le promete convertirlo en un gran pueblo y velar por él también en Mitzraim. Tal como le prometiera tantos años ha a aquel joven Iaacov que dormía (también temeroso y ensimismado) en el lugar llamado Luz – Beth El.
Hashem mismo sale junto al pueblo hacia Mitzraim para cuidar de él. Y así nos dicen nuestros sabios, en cada lugar en que estuvo el pueblo de Israel estuvo acompañado por Hashem.
Empero, la historia humana no es obra de Hashem, sino de Él y principalmente de los actos y omisiones de los hombres.
Así que el sufrimiento amargo que llevaba el corazón de Iaacov, pronto encontraría nuevos nidos en los innúmeros pechos de sus hijos, nietos…
Nosotros, desde la comodidad de los siglos y el supuesto conocimiento, reconocemos que el temor de Iaacov tenía sus fundamentos ya que con la salida de la familia de Israel a Mitzraim, tenemos el inicio de la primera gran Diáspora: Galut Mitzraim.
Es que los engranajes de la gran máquina puesta en funcionamiento tanto tiempo atrás, no hacían más que provocar que el movimiento persistiera hacia el futuro…
Shabbat Shalom les desea Yehuda Ribco
Resumen de la parashá Vaigash
Por causa de personas inescrupulosas, el que desee el resumen de la parashá contáctese con nosotros via mail, que se lo enviaremos a la brevedad.
Preguntas:
- ¿Quién expandió el poder de Faraón en Mitzraim?
- ¿Quiénes eran privilegiados en Mitzraim?
- ¿Cuántas ‘almas’ componían la familia de Iaacov al momento de descender a Mitzraim?
- ¿Iosef acusó a sus hermanos por sus acciones pasadas en su contra?
- ¿Qué pensaba Iosef acerca de los planes divinos en relación a él y su familia?
- ¿Cuál fue la bendición de H’ para Iaacov?
- ¿Quién se reencuentra esta semana?
- ¿Dónde fueron a vivir los hijos de Iaacov en Mitzraim?