En estos días de Janucá encendemos velas, cantamos, comemos delicias fritas y compartimos tiempo con nuestros seres queridos. Pero, ¿hemos reflexionado sobre el verdadero mensaje que encierra esta festividad? Janucá no es solo un recuerdo de una victoria militar o de un milagro en el Templo, sino una lección profunda que trasciende las generaciones.
Los «griegos» (en verdad, sirios de cultura helenista) trataron de apagar nuestra luz, no solo la física de la menorá, sino también la espiritual, la del alma. Querían que asimiláramos su cultura y abandonáramos nuestra identidad. Pero el pueblo judío, a pesar de estar en desventaja numérica y militar, se levantó con coraje y convicción para defender lo que es esencial: nuestra conexión con el Creador y nuestros valores eternos.
Cada noche de Janucá, al agregar una vela más a la januquiá, estamos enviando un mensaje claro: la luz espiritual nunca debe disminuir, siempre debe crecer. La oscuridad no se combate con más oscuridad, sino con pequeñas acciones de bondad y justicia que iluminan nuestro entorno. Una vela por sí sola no hace mucho, pero cuando se suma a otras, transforma la noche en día.
Hoy también enfrentamos desafíos, diferentes en forma, pero similares en esencia. La asimilación, el odio hacia nuestra identidad, el afán antisemita de hacer desaparecer nuestra existencia, la indiferencia en nuestro seno y el materialismo desprovisto de trascendencia, son las fuerzas modernas que intentan apagar nuestra chispa única. Pero, así como los Macabeos, podemos elegir ser luz, incluso cuando pareciera que la oscuridad nos rodea.
Que en este Janucá recordemos nuestro poder de iluminar, de mantener viva nuestra identidad y de inspirar a otros con nuestras acciones. No importa qué tan pequeña sea tu vela, siempre puede encender otra.
¡Feliz Janucá! Que tus días estén llenos de luz y significado.
Comparte este mensaje con tus allegados y anímalos a reflexionar sobre estos importantes temas. Involúcrate en iniciativas que promuevan la construcción de Shalom.
Sigue participan de este sitio sagrado, serjudio.com, y de nuestro canal https://www.youtube.com/@YehudaRibco.
https://youtube.com/yehudaribco